A mitad del siglo XX, entre las décadas de los 50 y 60, el gobierno franquista llevó a cabo un programa de construcción de embalses en diferentes puntos de nuestro país. Esto tuvo como consecuencia la expropiación y el desalojo de numerosos pueblos que se encontraban próximos a ellos al declararse zona inundable. Sin embargo, muchos de ellos no acabaron bajo el agua, convirtiéndose en villas abandonadas que, a día de hoy, son el reflejo de la historia y la cultura de aquellos que las habitaban.
Son muchas las que cumplen con estas características, siendo además algunas, villas con alto valor histórico y que mantienen intacto su patrimonio arquitectónico. Este es el caso de Granadilla, un pequeño pueblo situado en Cáceres, que es considerado como el pueblo abandonado más bonito de España. Pertenece al municipio de Zarza de Granadillla y se encuentra cerca del embalse de Gabriel y Galán. En la actualidad, está considerado Conjunto histórico-artístico y está incluido en el Programa Interministerial de Recuperación y Utilización Educativa de Pueblos Abandonados.
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Una villa feudal
Los orígenes de Granadilla se remontan a la época árabe, cuando estos establecieron un asentamiento en lo alto de un cerro con un claro carácter militar y defensivo. Ya a finales del siglo XII y comienzos del XII, la localidad fue un enclave fronterizo entre tres reinos cristianos: Castilla, León y Portugal. De esta forma, los musulmanes decidieron levantar en la parte noroeste de la villa una alcazaba, la cual tras la reconquista pasaría a ser un castillo cristiano.
En sus inicios, el pueblo ostentaba el nombre de Granada, pero tras la toma de este reino por parte de los Reyes Católicos en 1492, decidieron denominarlo Granadilla, para así evitar confusiones. No obstante, este nuevo nombre no fue oficialmente utilizado en los documentos del Concejo hasta el siglo XIX. En cuanto al desalojo de la villa, el 24 de junio de 1955, se decretó la expropiación de la mayor parte del término municipal de Granadilla (incluyendo el casco urbano) a causa de la construcción del embalse de Gabriel y Galán.
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De esta forma, el 15 de junio de 1960, con motivo del pago de las indemnizaciones correspondientes, las tierras y el pueblo se consideraron ya propiedad del Estado. Lo últimos habitantes abandonaron Granadilla en 1964, y a pesar de que el pueblo no se inundó, el agua anegó las tierras de la Vega Baja, de modo que el modelo de vida de los vecinos desapareció.
Además, se vio aislado formando una especie de península con un único acceso en el norte. Ya en 1980, durante el gobierno de Adolfo Suárez, la villa fue declarada Conjunto Histórico-Artístico y se comenzó el Proyecto de Restauración.
Una de las murallas mejor conservadas de España
En un paseo por la localidad, el viajero puede contemplar su belleza y conocer la historia que allí se desarrolló. Uno de sus monumentos principales es su castillo, el cual fue construido en el siglo XV sobre la antigua alcazaba árabe. A su vez, dispone de una torre central y cuatro torres semicirculares, una en cada lateral, así como una planta polilobulada y cuatro alturas. A su esta estructura militar se le suman las murallas que rodean la villa.
Están catalogadas como una de las mejor conservadas de España, junto con la de Lugo y Ávila. El recinto agrupa en su totalidad a Granadilla y su construcción data de la época musulmana, del siglo IX, según algunos expertos, tal y como señalan desde el portal web de Granadilla. Carecen de torres, aunque cuentan con almenas de forma cúbica.
Por su parte, la iglesia parroquial de la Asunción termina por completar el conjunto monumental más relevante del pueblo. El templo se levantó en el siglo XVI, en sillería y mampostería, y fue el único edificio de Granadilla que no se pudo expropiar debido a la firme negativa del obispo de Coria. Cuenta con una capilla mayor, y un ábside de tres lados.
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Cómo visitar Granadilla
La visita a Granadilla es totalmente gratuita, aunque se debe tener en cuenta su horario. Abre sus puertas de martes a domingo, pero las horas varían dependiendo del mes del año. Desde abril a octubre el horario es de 10:00 h a 13:30 h y 16:00 h a 20:00 h, mientras que de noviembre a marzo es de 10:00 h a 13:30 h y 16:00 h a 18:00 h. Igualmente, el lugar cuenta con diversas normas de acceso:
- Las puertas de acceso y salida se cerrarán 10 minutos antes de cada horario.
- Las mascotas están permitidas, pero hay que llevarlas en todo momento atadas.
- Hay zonas en obra, por lo que no hay que atravesar las vallas de seguridad.
- Las vallas de color verdes son móviles para que poder pasar, pero hay que dejarlas cerradas.
- El acceso a las viviendas está prohibido.
Cómo llegar
Desde Cáceres, el viaje es de alrededor de 1 hora y 20 minutos por la carretera A-66. Por su parte, desde Salamanca el trayecto tiene la misma duración y además, se debe coger la misma vía, la A-66.