Los últimos años han sido realmente duros para Aranxta Sánchez Vicaria, quien ha sido acusada de un supuesto delito de alzamiento de bienes por el banco de Luxemburgo, a quien evitaba pagar la deuda de 6,1 millones de euros. Este martes 12 de septiembre ha empezado su proceso judicial en la Fiscalía de Barcelona y que, según se preveé, podría finalizar el próximo 15 de septiembre.
Menos de siete minutos han bastado para que la extenista se derrumbara en mitad de su declaración. La deportista rompió a llorar cuando la acusación particular, nombrada por el Banco de Luxemburgo, le preguntaba por el papel de su padre en la gestión de su patrimonio.
Tras un largo minuto en el que las lágrimas bajaban por su rostro como si de un río se tratase, Arantxa Sánchez aseguró sentirse un “poco nerviosa”. Una de sus peticiones fue pedir un vaso de agua, que, desafortunadamente, no le pudieron ofrecer.
El abogado de Sánchez Vicario, el socio de RCD Borja Vives Iborra, ha solicitado que Arantxa pueda ausentarse del juicio durante toda la semana hasta que lleguen las conclusiones finales. Y así será, después de casi una hora de declaración a puerta cerrada, la extenista se ha marchado. Sin embargo, una de las frases más repetidas por la deportista ha sido “mi marido, el señor Santacana”, a quien sitúa como el responsable principal.
Te puede interesar: La dura realidad de Arantxa Sánchez Vicario: paga al banco mensualmente para evitar entrar en la cárcel
Josep Santacana, el principal responsable
Tanto Aranxta Sánchez Vicario como su expareja, Josep Santancana, quienes se encuentran inmersos, además, en un proceso de divorcio, podrían enfrentarse a cuatro años de cárcel si la sentencia no recae a su favor. A lo largo de la declaración judicial de la deportista, ella se ha referido de forma constante y reiterada al nombre de su exmarido.
La acusación particular le ha detallado todas y cada una de las operaciones financieras por la que ha sido acusada. Y su respuesta a casi todas las preguntas ha sido Josep Santacana, según ella, el responsable principal de la condena por la que está siendo procesada. “Nunca he gestionado mi patrimonio porque desconozco cómo”, ha manifestado.
“Venía y me decía ‘tienes que firmar aquí y allí', y yo lo hacía porque me fiaba. Luego él rellenaba los documentos”, ha asegurado durante la declaración. De acuerdo con su testimonio, Santacana se encargó de realizar todas las operaciones financieras que le han llevado a la ruina económica y por la que se ha visto obligada a pagar cada mes al banco de Luxemburgo una cantidad determinada para evitar ir a la cárcel.
Arantxa supuestamente ha cometido un delito de alzamiento de bienes al vender todo su patrimonio y hacer desaparecer el dinero de todas sus cuentas cuando la entidad financiera le exigió el pago del aval que había solicitado para liquidar una multa de Hacienda Pública.
Te puede interesar: Eva Amaral, sobre las críticas por cantar a pecho descubierto en el Sonorama: “Fue la liberación más grande que he sentido jamás”
Según la extenista, ella quiso pagar al banco, pero su expareja se negó. “Me decía que antes de dárselo al banco era mejor que nos lo quedáramos nosotros, que él se encargaba de todo, que no me preocupara”, ha afirmado en su declaración.
¿Santana, exculpado?
Santacana todavía no ha declarado, pero en más de una ocasión ha dejado claro que no tiene nada que ver con el dinero de la campeona mundial. De hecho, su idea es obtener la absolución en el juicio, motivo por el que su abogado ha presentado varias cartas escritas a puño y letra por la extenista.
Según el letrado, en esos escritos privados Arantxa exculpa a Santacana, le agradece todo lo vivido y le pide volver con él. El abogado de la acusada ha entregado esas cartas para comprobar que eran suyas y, tras un largo silencio en la sala, Sánchez Vicario ha asegurado: “Deben de ser antes de que pasase todo y no recuerdo la fecha en las que las escribí”. Una afirmación que desmontaba una de las pruebas de la defensa.
Santacana, que declarará el próximo viernes, afirma que el patrimonio está en poder de la tenista y que está lo tiene oculto en varias cuentas secretas en Suiza. Sin embargo, la extenista asegura que fue él quien desmanteló todos sus bienes ayudado de sus amigos, a los que conocía de sus años como subastero.
De acuerdo con su testimonio, cuando recibieron la querella del Banco de Luxemburgo, los dos contrataron los servicios del mismo abogado. Fue entonces cuando la campeona mundial empezó a ser consciente de varios movimientos económicos que, hasta ese momento, desconocía. Ante esto, decidió admitir su culpa y llegó a un acuerdo con la entidad bancaria para entregarle el 50% de todos sus ingresos y también otorgarle el poder de examinar todas sus finanzas.