Dos meses después la llegada al Gobierno de Extremadura de María Guardiola, su Ejecutivo ha acabado con la gratuidad universal de los comedores escolares en la comunidad y horas después, en el Consejo de Gobierno, el Ejecutivo autonómico ha suprimido el Impuesto de Patrimonio y ha rebajado los primeros tramos del IRPF, que afectará principalmente a las rentas inferiores a 22.200 euros. En la misma reunión, la presidenta de la región ha dado luz verde a la rebaja el impuesto de matriculación, a la supresión del impuesto a viviendas vacías de grandes tenedores, y eleva al 30% la deducción de las cantidades satisfechas por el alquiler de vivienda habitual.
En la rueda de prensa posterior, Guardiola ha subrayado que con estas medidas se da cumplimiento a su programa electoral. Además, ha apoyado su acción de gobierno en el contexto económico actual de “alta inflación”, que justifica el carácter de urgencia con el que se ha aprobado este “primer paquete” de medidas tributarias con el que se pretende “aumentar la renta disponible de los extremeños”, y que tendrá efectos retroactivos a 1 de enero del 2023.
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Respecto al IRPF, cuyo impacto en las arcas autonómicas se estima en 39,8 millones de euros, se han rebajado los tipos de gravamen en los dos primeros tramos, que se situarán en el 8% y en el 10%, respectivamente, frente al 12,5% actual. Esta rebaja fiscal va a beneficiar “a todos los contribuyentes”, ha remarcado Guardiola, pero lo hará “en mayor medida” a aquellos que tengan rentas bajas y medias, de tal forma que se ha “limitado” el impacto de la bajada en los tramos superiores.
Fin al comedor gratuito
La llegada del PP y Vox a la Junta de Extremadura ha supuesto que más de 2.126 alumnos queden fuera del acceso a la gratuidad del comedor. El Gobierno anterior, liderado por Guillermo Fernández Vara, aprobó esta medida que se extendía tanto para los comedores escolares, como para el servicio de aula matinal desde enero de 2023 a los alumnos de la escuela pública y concertada. En marzo, el Ejecutivo de Vara anunció que en los cursos 2023-2024 y 2024-2025 se prorrogaría la medida, de la que beneficiarían todos los alumnos de la comunidad.
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El grupo de estudiantes al que no le han otorgado la beca deberá abonar 5,77 euros al día para poder comer en la escuela. La consejera de Educación ha sacado pecho del pacto alcanzado entre la compañía de catering adjudicataria del contrato de comedores y la Junta, explicando que estas familias se beneficiarán del coste reducido del menú.
La Consejería de Educación del Gobierno de Extremadura ha recibido 17.619 solicitudes para beneficiarse de esta medida. Sin embargo, la Junta solo ha podido conceder 15.493 becas. Explican desde el departamento dirigido por Mercedes Vaquera que no se ha podido atender gran cantidad de solicitudes.
Las familias afectadas critican la forma en la que la Junta de Extremadura ha aplicado los criterios de concesión, puesto que se ha realizado por centros educativos y no sobre el total de los alumnos solicitantes. De esta forma, se da la circunstancia que, ante situaciones económicas similares, algunos estudiantes sí se les ha concedido la gratuidad del comedor y a otros no.