Carlos Alcaraz es el líder por antonomasia de la nueva generación dispuesta a relevar al Big Three. Pero no está solo. Al grupo del murciano, Sinner o Rune se suma ahora, desde el otro lado del Atlántico, en Estados Unidos, un jugador que empieza a levantar pasiones. Y, como Carlitos, tiene 20 años. Y, como Carlitos, no para de sonreír y derrocha carisma y personalidad por los cuatro costados. Su nombre es Ben Shelton (Atlanta, 2002), número 47 del mundo –entrará en el top 20 la próxima semana– y la baza a la que se agarra el tenis estadounidense para volver a alzar la voz en un torneo donde llevan dos décadas sin éxitos en el cuadro masculino. El último que venció en Nueva York fue Andy Roddick en el año 2003.
La carrera de Shelton está cargada de particularidades. Probó el beisbol y el fútbol americano, hasta que su padre Bryan, extenista que llegó a alcanzar el número 55 del mundo, le señaló el camino de la raqueta y le formó durante sus primeros pasos. Los dio en Estados Unidos, su país natal. De hecho, no compitió fuera del país norteamericano hasta este año, cuando viajó a Australia para disputar el primer Grand Slam de la temporada. Allí ya dejó huella. Ganó tres encuentros y alcanzó los cuartos de final en su primera participación. Una premonición de lo que se vendría.
Saques supersónicos a 240 Km/h
Shelton decidió enrolarse en la Universidad de Florida, pero tras un año y con apenas 19, la abandonó para centrarse en ser tenista profesional. Como sucede con tantos talentos precoces, se confirma aquello de que lo importante no es llegar, sino mantenerse. Shelton se diluyó en la vorágine competitiva de los torneos ATP. No fue capaz de ganar más de un partido seguido durante toda la temporada hasta que llegó el US Open. El Grand Slam de casa, en el que más presión recibiría, pero que afrontaría con unas ganas que iban a superar todo lo anterior. Ben se iba a quitar el peso de vencer de manera continuada, con triunfos ante Cachín, Thiem, Karatsev, Tommy Paul y Tiafoe.
Ben Shelton just hit at 149 MPH serve. 🤯
— US Open Tennis (@usopen) September 3, 2023
That's the fastest at the US Open! pic.twitter.com/TtRxzJvwJB
Si algo destaca del juego de Shelton es su saque y su derecha. El estadounidense lanza auténticos misiles gracias a la práctica del fútbol americano. Entrenó tanto para convertirse en quarterback que desarrolló una potencia endiablada en su brazo. “No hay duda de que eso ayudó. Esa es probablemente la razón más importante”, explica su padre. Ante Karatsev sacó a 237 kilómetros por hora. Dos días después, su compatriota Tommy Paul sufrió sus escopetazos. Shelton realizó dos saques consecutivos a 240 Km/h. Su servicio es un cañón, literalmente.
Comparado con Nadal y apadrinado por Federer
Más allá del saque, la explosión de Shelton ha venido acompañada por una comparación poco habitual. Muchos aficionados han observado ciertas similitudes en algunos de sus golpes y los de Rafa Nadal. Ahí es nada. Zurdo como el balear, algunos drives han recordado a los de Rafa, también su estilo y capacidad física. Al balear, con quien se entrenó durante el Open de Australia, es uno de sus referentes. “Es un ejemplo a seguir para él” ha reconocido Bryan, su padre y entrenador.
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— Gianluca Storani (@GianlucaStorani) September 6, 2023
Y de uno de los más grandes, Nadal, a otro, Roger Federer, su gran ídolo y propietario de la empresa que gestiona su carrera. Team8, su compañía, le echó el guante y es el mánager Alessandro Sant Albano quien se encarga de acompañar a la nueva sensación del tenis de Estados Unidos. Además, el suizo se encargó también de firmarle para la marca deportiva de la que es accionista, On Running.
Comparado con Nadal y tutelado por Federer, Shelton desafía ahora al otro integrante del Big Three: Novak Djokovic. Es, sin duda, el mayor reto de su corta carrera. No le asusta. “Sé lo sólido que es Novak, su fuerza mental y su resistencia física, así que tendré que planificar muy bien mi juego. Al mismo tiempo, mi estilo de juego es una ventaja a la hora de enfrentarme a alguien por primera vez, creo que puedo apoyar algunas cosas que tal vez no se vean en un partido normal dentro de la ATP. Voy a intentar poner sobre la mesa algunas cosas diferentes”, dijo Shelton, el cañonero que ilusiona a Estados Unidos.