Sin dinero para pagar las nóminas municipales en el pueblo donde sale el granito para la Sagrada Familia

El municipio madrileño de Cadalso de los Vidrios (12 años gobernando el PP) no ha podido pagar los sueldos de julio y agosto a sus 80 empleados públicos. La alcaldesa echa la culpa al interventor

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El municipio madrileño de Cadalso de los Vidrios (12 años gobernando el PP) no ha podido pagar los sueldos de julio y agosto a sus 80 empleados públicos

Cadalso de los Vidrios es un pequeño pueblo del suroeste de Madrid que apenas llega a los 3.200 habitantes. Destaca porque tiene la única cantera de toda la comunidad donde se puede extraer granito blanco cristal, una piedra tan singular en el mundo que, por ejemplo, se está usando para completar las obras de la Sagrada Familia de Barcelona. Un granito muy resistente, fuerte y robusto. Todo lo contrario que la salud financiera del Ayuntamiento, que según denuncia la oposición y algunos de sus trabajadores, no pasa precisamente por sus mejores momentos. Falta liquidez y sus más de 80 empleados públicos aún no han cobrado las nóminas de julio y agosto y ya tuvieron problemas para percibir las de junio y la extra de mayo. Solo un mes de nóminas suponen para las arcas públicas unos 120.000 euros.

La alcaldesa, la popular Verónica Muñoz (el PP lleva gobernando el municipio los últimos doce años), echa la culpa al secretario interventor que se acaba de jubilar anticipadamente. La cuestión es jurídicamente complicada de explicar, pero la regidora lo resumen asegurando que este funcionario, no sabe si actuando de mala fe, “volcó mal unos datos” y pasó los pagos de las nóminas de una partida a otra. “Nos ha bloqueado el presupuesto”, unas cuentas municipales que Cadalso lleva prorrogando desde el año 2017. ¿Cómo es posible que este municipio lleve seis años sin aprobar nuevos presupuestos? “El secretario interventor siempre nos decía que no tenía tiempo para tramitarlos”, asegura Muñoz. Ver para no creer.

La situación es tan surrealista, que cuando el secretario interventor se jubiló en mayo, el Ayuntamiento (el PP gobierna este mandato con el apoyo de Vox) tuvo que pedir auxilio al Área de Asistencia Técnica y Económica que la Comunidad de Madrid facilita a municipios pequeños. Un interventor autonómico llegó entonces a Cadalso para echar una mano y lo que se encontró es que no había liquidez para pagar nóminas y las facturas a varios proveedores. De hecho, presentó un reparo a la liquidación de presupuesto de 2022.

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El interventor destaca en su informe que hay un remanente de tesorería negativo de 203.000 euros y que el Ayuntamiento ya efectuó pagos el año pasado por valor de 1.158.546 euros que se han aplicado de nuevo en los presupuestos de 2023, es decir, un dinero que no se puede utilizar. “No existe un crédito adecuado y suficiente”, señala el interventor regional. Lo que hizo entonces la alcaldesa es convocar un pleno para levantar ese reparo, algo para lo que tiene potestad. De los 11 ediles que tiene Cadalso, solo tres votaron a favor y el resto se abstuvo para, según varias fuentes consultadas, no perjudicar a los trabajadores ni a los proveedores a los que el Consistorio debe facturas. Es decir, hubo dos concejales del PP que no votaron a favor. De hecho, uno de ellos ya ha dejado el partido y ahora es edil no adscrito.

La cantera de granito de
La cantera de granito de Cadalso de los Vidrios (Foto: Telemadrid)

La alcaldesa asegura que la situación se va a solucionar en breve y que en pocos días se pagarán las nóminas atrasadas. La regidora, que cobra un salario de 2.172 euros mensuales, asegura que ella tampoco ha percibido su retribución pública estos dos meses. “En pocos días tendremos nueva interventora municipal y tenemos además dos pólizas de créditos que suman 1,1 millones de euros”, es decir, dinero que les prestan entidades bancarias y que, por tanto, deben devolver. “Estamos reduciendo gastos sin minorar los servicios que reciben los vecinos de Cadalso. Además, en breve recibiremos nuevos ingresos por recaudación de tributos, como el IBI”, concluye.

Lo cierto es que sí se han visto mermados algunos servicios, ya que ha desaparecido la ayuda a domicilio que se prestaba a los mayores y dependientes, se han externalizado los servicios de la piscina municipal y no se sabe si va a poder abrir la escuela de música al inicio del curso, para el que quedan unos días. Además, la Policía Local ya no mantiene el servicio de 24 horas que venía ofreciendo y ahora recibe ayuda de la Guardia Civil.

¿De quién es la culpa?

Ana Sibert, portavoz socialista del Ayuntamiento (los socialistas se quedaron a seis votos de la Alcaldía), asegura que el Ayuntamiento se lleva gestionando mal desde hace muchos años. “La alcaldesa echa ahora la culpa al secretario interventor que se ha ido, pero han trabajado juntos durante años. Si un gobernante sabe que alguien ha obrado mal, debería denunciar esa mala praxis. Y si ha obrado sin su conocimiento o ha utilizado su firma, con más razón. No se está explicando bien ni el proceso ni de quién es la responsabilidad. Deberían aclararlo”.

“Hay una cuenta municipal que acoge facturas pagadas que no se han contado dentro de las partidas de gastos. Eso es fundamental en un ayuntamiento: anotar en su sitio cada euro que sale y que entra”, señala Sibert. “Y si algo se escapa, se lleva a esta cuenta y hay que contabilizarlo en el presupuesto del año siguiente o venideros. No tenían por qué bloquear el presupuesto en 2023 todo de golpe, pero lo han hecho y la han liado. Desde el PSOE, hemos hecho varias propuestas para deshacer el entuerto que han sido desechadas por la alcaldesa, pero la realidad es que al problema técnico hay que sumarle la falta de liquidez.”

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Según el Ministerio de Economía y Hacienda, el Ayuntamiento tenía a 31 de diciembre de 2022 una deuda de 781.000 euros. “Pero la verdad es que tenemos una deuda con los bancos de 1.100.000 euros porque no se ha contado en esas cuentas el préstamo que pidió en noviembre de 393.000 euros, también hay un remanente negativo de tesorería de 203.000 euros que hay que reponer, otro medio millón de euros pendientes de cobrar por impuestos atrasados, otros 300.000 euros por impuestos que se deben de dudoso cobro, algunos pendientes desde hace muchos años”, señala Sibert. “Nuestra situación no es nada boyante, pero la alcaldesa actúa como si nada ocurriera y se van a contratar orquestas y toros asumiendo todos los cadalseños unos gastos que no nos podemos permitir. No se han planteado otras opciones, teniendo en cuenta la situación. La alcaldesa contrata y la deuda es para el pueblo”.

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