Las pensiones de los trabajadores españoles no dejan de crecer. La Seguridad Social ha destinado el pasado mes la cifra récord de 12.017,8 millones de euros al pago de las prestaciones contributivas. Tres cuartas partes de la suma total van a parar a la hucha de los jubilados. Las personas que han abandonado el mercado laboral este verano deben saber que la pensión media de jubilación ha crecido en los últimos tiempos hasta alcanzar los 1.375,1 euros mensuales. La administración pública calcula que más de seis millones de personas reciben una prestación de este tipo cada 30 días.
La cuantía de las pensiones depende, entre otros factores, del número de años trabajados o de la categoría profesional de los beneficiarios. De este modo, las personas que hayan cotizado más tiempo en el régimen de la Seguridad Social tendrán derecho a cobrar un subsidio más elevado cuando llegue la hora de su retiro. El Gobierno de coalición ha aprobado recientemente una revalorización de las pensiones conforme al IPC, con el objetivo de paliar los efectos de la inflación y la pérdida de poder adquisitivo de los hogares.
Como consecuencia, la subida en las pensiones contributivas ha sido del 8,5% en 2023. La tendencia seguirá el mismo rumbo durante los próximos años. El Gobierno ha estipulado unas subidas progresivas para hacer frente al incremento de los precios. Los pensionistas conocerán al cierre de noviembre cuál va a ser el porcentaje de subida del próximo año, aunque los cambios no se harán efectivos hasta el primer día de enero.
¿Cuánto van a subir las pensiones en 2024?
Con el cambio de página en el calendario, las pensiones van a sufrir un incremento que tomará como referencia el IPC interanual, que se conocerá a partir del undécimo mes del año. Sin embargo, esta no es la única subida que se espera para 2024. Uno de los compromisos del Gobierno es que, para 2027, las pensiones mínimas deben alcanzar el 60% de la renta media de los españoles. De este modo, el próximo curso los subsidios aumentarán todo lo que sea necesario para reducir en un 20% esta brecha.
El objetivo es que la cuantía de referencia de la pensión continúe esta tendencia y suba en los dos próximos años lo suficiente como para reducir en un 30% y un 50% respectivamente la diferencia existente entre dicha asignación y el umbral de pobreza calculado para un hogar con dos adultos. En 2027, tres años más tarde, el porcentaje subirá de tal forma que la brecha quede disuelta. Todavía es pronto para sacar la calculadora, pero los expertos creen que, de manera aproximada, la pensión mínima de jubilación de una persona con cónyuge a cargo podría subir hasta un 22%, lo que se traduce en un incremento de más de 210 euros mensuales.
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