Desde la Dirección General de Tráfico (DGT) no salen de su asombro. Muchos años sin un solo accidente y de repente dos helicópteros de su flota totalmente destrozados en los últimos seis meses por dos maniobras negligentes: un aterrizaje en una zona prohibida y un mal giro porque el piloto dio positivo en drogas. El coste de las “bromas” supera los seis millones de euros, el precio de las dos aeronaves y de los radares adaptados que llevan para ‘cazar’ conductores imprudentes.
En este caso los imprudentes fueron los dos pilotos, personal de la DGT. El primer accidente se produjo el 5 de marzo de 2023 en el municipio madrileño de Robledo de Chavela. Según la investigación preliminar de la Comisión de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil del Ministerio de Transportes, un helicóptero Eurocopter modelo AS355N “sufrió una pérdida de control durante la actividad de vigilancia de carreteras que estaba realizando”.
La aeronave había despegado del aeropuerto de Cuatro Vientos. El trayecto había transcurrido sin incidencias hasta que alcanzaron la carretera M-512, donde iba a realizar la actividad de vigilancia. Según la declaración del piloto, acababan de entrar en vuelo estacionario cuando el helicóptero “se hundió”. Inició un descenso y un viraje hacia la derecha para intentar recuperar el control, “pero el helicóptero hizo contacto con el terreno en rumbo opuesto al que tenía al inicio de la maniobra. El helicóptero se detuvo a 167 metros de la carretera M-512, en un bancal con una pendiente del 31%. Estaba apoyado sobre su costado izquierdo, con el cono de cola desprendido del fuselaje y debajo de este”. Los restos se encontraron concentrados en un radio de 40 metros alrededor del helicóptero.
Te puede interesar: Así son los helicópteros de la DGT que multan con el radar aéreo Pegasus
La tripulación estaba formada por dos personas (piloto y operador del radar) y un pasajero. Luego se supo que el piloto dio positivo por cocaína y que ese pasajero era la mujer del operador del radar que había subido irregularmente al aparato para que su marido le mostrase las vistas aéreas. Tras el accidente abandonó el lugar de los hechos para ocultar su presencia. El segundo accidente este 11 de agosto en el término almeriense de La Mojonera.
Desgracia en Almería a la hora de comer
En este caso, otro helicóptero Eurocopter AS355 NP despegó del aeropuerto de Almería. Pero “el piloto decidió aterrizar para comer junto a un restaurante al que había llamado por teléfono previamente. Durante el aterrizaje en una zona no preparada, el movimiento del rotor principal provocó una nube de polvo, perdiendo el piloto las referencias visuales con el terreno, lo que provocó el impacto del rotor de cola con un árbol y la posterior caída al terreno. Los dos ocupantes del helicóptero resultaron ilesos y el helicóptero resultó destruido”, según la investigación preliminar.
La DGT tiene 13 helicópteros, luego la pérdida de estos dos aparatos supone que ahora tiene fuera de servicio al 15% de su flota. Estos modelos cuestan, según la versión, entre 2,7 y 3,3 millones de euros. La denominación técnica de estas aeronaves no es la de ‘Pegasus’, pero popularmente toman el nombre del sistema de radar que llevan incluido (que suele costar unos 170.000 euros).
Fuentes oficiales de la DGT destacan que, a pesar de estos dos incidentes, la flota aérea de tráfico no se ha quedado obviamente sin capacidad de operar ni de multar desde el aire, porque en contra de lo que se ha llegado a publicar, la DGT cuenta con más radares ‘Pegasus’ en otros helicópteros.
El requisito ineludible para poder ser piloto para la DGT es, en primer lugar, ser funcionario. Una vez se haya aprobado una oposición y se forme parte de los grupos A, B o C, sin importar el cuerpo, lo siguiente es demostrar que se tiene el título de piloto de helicóptero. En este caso, Tráfico solicita la Licencia de piloto de Transporte de Línea Aérea, que permite llevar a pasajeros y naves de más de 4.000 kilos de peso (los aparatos que usa la DGT cuentan con un peso máximo de despegue de 2.270 kilos).
Seguir leyendo: