
El pasado mes de marzo, el Gobierno de coalición aprobó mediante un real decreto-ley un paquete de medidas urgentes para proteger a los deudores hipotecarios con menos recursos. Este documento, que lleva por nombre Código de Buenas Prácticas, contempla una serie de propuestas para aquellas personas que, pese a tener pendiente el pago de una hipoteca, se encuentran dentro del umbral de exclusión social o en situación de vulnerabilidad. Las entidades bancarias y todas aquellas compañías que, de manera profesional, se dediquen a la concesión de préstamos pueden adherirse de forma voluntaria a esta especie de código ético.
Las medidas contenidas en este documento promueven la implicación del sector financiero español en el esfuerzo requerido para aliviar la difícil situación económica y social de las familias que cumplan con los requisitos establecidos. El objetivo del Código de Buenas Prácticas no es otro que reestructurar la deuda hipotecaria o el déficit correspondiente al alquiler en caso de ejecución de la vivienda habitual.
El Código de Buenas Prácticas contempla tres fases de actuación. La primera, orientada a procurar la reestructuración viable de la deuda hipotecaria mediante la aplicación de un período de carencia en la amortización de capital y con la rebaja de los tipos de interés, que se extenderá durante cinco años. Del mismo modo, se ampliará el plazo de devolución del préstamo. Los beneficiarios de estas ayudas tienen que demostrar que están en situación de vulnerabilidad social, que el valor de la adquisición no supera los 300.000 euros y que se trata de una vivienda habitual.
Te puede interesar: Cuándo pagan los bancos el Ingreso Mínimo Vital en agosto: de CaixaBank a BBVA
Las soluciones de los bancos
De no resultar suficiente la reestructuración anterior, las entidades podrán, con carácter potestativo, ofrecer a los deudores una quita sobre el conjunto de la deuda. Finalmente, si ninguna de las dos soluciones logra reducir el esfuerzo hipotecario de las familias, los beneficiarios podrán continuar en la vivienda con un derecho de alquiler. En estos casos, las familias podrán permanecer en su domicilio por un plazo de dos años siempre que abonen una renta asumible para su viabilidad financiera, que estará previamente acordada.
La protección que otorga este esquema a los deudores con dificultades económicas se concibe como un conjunto de medidas que tienen como objetivo aliviar la carga hipotecaria de aquellas familias que, contando con un volumen de ingresos limitado, se pueden encontrar con problemas a la hora de soportar dicha carga. De este modo, cuanto menores son los ingresos, quien solicita la aplicación de estas medidas de alivio puede optar a cuotas menores, tipos más bajos y plazos más amplios. En España, un total de 54 entidades financieras se han adherido al Código de Buenas Prácticas, entre ellas BBVA, Banco Sabadell, Banco Santander, CaixaBank, Abanca, Bankinter y múltiples cajas rurales.
Seguir leyendo:
Últimas Noticias
Mujica era Muxika: los orígenes vascos del expresidente de Uruguay
Mikel Prieto, doctor en Pedagogía y miembro de Eusko Ikaskuntza, ha podido demostrar sin lugar a dudas el pueblo de origen del exguerrillero tupamaro

Céline Dion, protagonista de la primera semifinal de Eurovisión 2025: su emotivo mensaje y los 10 países clasificados
La cantante, ganadora del certamen en 1988 representando a Suiza, no ha podido actuar como artista invitada debido a su delicada salud

Los coches de gasolina se renuevan cada 12 años, los eléctricos no llegan ni a cuatro: “Solo el 18% de los nuevos híbridos reemplazan a los antiguos”
Pese al auge de las matriculaciones eléctricas, el coche de combustión sigue dominando las carreteras durante más tiempo

Resultados de Bonoloto: ganadores y números premiados
Aquí los resultados del sorteo Bonoloto dados a conocer por Loterías y Apuestas del Estado; averigue si ha sido uno de los ganadores

Un empleado solicita teletrabajo para cuidar a su hijo con discapacidad y la empresa se lo deniega: la Justicia le da la razón con indemnización incluida
La empresa no presentó pruebas de que esta modalidad afectara la productividad del trabajador
