Con la fecha de la investidura de Alberto Núñez Feijóo fijada para el próximo 26 y 27 de septiembre, PSOE y Sumar tendrán de plazo hasta el 27 de noviembre para intentar llegar a un acuerdo con los partidos nacionalistas e independentistas de cara a la investidura de Pedro Sánchez toda vez que la del líder popular está abocada al fracaso. Esto permitirá al secretario general del PSOE ampliar las conversaciones más allá de septiembre, un mes marcado por la Diada (11 de septiembre), en la que el fragor independentista buscará exhibir músculo.
La votación de la investidura de Feijóo pone en marcha el denominado reloj electoral de dos meses, el plazo para que PSOE y Sumar reediten el Gobierno de coalición si consiguen una mayoría parlamentaria con los mismos partidos que hace una semana permitieron la primera victoria del bloque plurinacional en la Cámara Baja. Y es que, aunque el candidato inicial propuesto por el rey sea Feijóo, ante una eventual segunda ronda de contactos, Sánchez volverá a mostrar su disposición a intentar armar una mayoría.
A lo largo de este mes, el PP tratará de conseguir los cuatro votos que le faltan después de atar los de Vox, Coalición Canaria y UPN (junto a los 137 diputados del PP, Feijóo tendría por ahora 172 apoyos). Para ello, pedirá sentarse con todos los partidos, incluidos los independentistas, a excepción de EH Bildu. Salvo giro de los acontecimientos con algún otro partido, los populares intentarán atraer especialmente al PNV, que reiteró por enésima vez este miércoles su negativa a permitir que Feijóo se convierta en presidente “de la mano de Vox”.
Te puede interesar: El PNV trunca el sueño de Feijóo, que va directo a una investidura fallida: “Si nos llama el PP, hay que ir, pero no va a servir para nada más”
De hecho, para evitar elucubraciones relativas a un supuesto apoyo del PNV, su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, quiso zanjar el asunto: “Las posiciones ya están fijadas por parte de todos los partidos políticos. Por mínima cortesía, si nos llama el PP, hay que ir. Además, puede servir para que el señor Feijóo y yo nos conozcamos personalmente, pero no va a servir para nada más”.
La Diada pondrá a prueba la unidad del independentismo
Con este escenario de fondo, a pesar de que a lo largo de este mes “habrá mucha especulación, mucho marketing y no creo que haya sorpresas”, como vaticinó el representante vasco, el PSOE esperará su oportunidad con “prudencia, discreción y diálogo”. Asimismo, desde Sumar insisten en “seguir trabajando para hacer efectiva cuanto antes la única investidura posible, que es la de un Gobierno de coalición progresista”.
Ambos partidos son conscientes, porque así lo han dejado claro ERC y Junts tanto en público como en privado, de que las vías para caminar hacia una desjudicialización del conflicto político con Cataluña van a ser decisivas para llegar a un acuerdo que facilite la investidura de Pedro Sánchez. En este debate, la amnistía para todos los encausados del procés y su encaje constitucional será determinante, además de uno de los principales reclamos de las fuerzas independentistas.
Te puede interesar: El reto de Feijóo un mes después del 23-J: una investidura sin fecha y a la espera de un milagro con el PNV
La Diada de este año volverá a poner a prueba la unidad del independentismo ante una “ocasión histórica” para sus reivindicaciones, como defienden los republicanos. Este clima marcará en buena medida los contactos para la investidura, pero el amplio margen para llegar a un acuerdo, cuya fecha límite es el 27 de noviembre, puede dar a los socialistas un balón de oxígeno en las conversaciones.
Mientras tanto, el PSOE elude pronunciarse sobre la amnistía. “Cuando haya acuerdos se comunicarán, porque mientras serán especulaciones que no van a ningún sitio”, declaró el portavoz socialista, Patxi López, reiterando las palabras de Sánchez sobre esta cuestión: “El diálogo es el método y la Constitución es el marco”, dijo el presidente del Gobierno en funciones tras su encuentro con el rey.
Paralelamente, en Sumar ya trabajan con un grupo de expertos para estudiar la viabilidad de una amnistía. De hecho, en palabras de su portavoz en la Cámara Baja, Marta Lois, este planteamiento “podría ser compartido” por el PSOE, asegurando que la coalición no tiene “miedo a dialogar”. Por lo pronto, al margen de los acuerdos alcanzados la semana pasada para la constitución de la Mesa del Congreso, PSOE y Sumar vuelven a hacer gestos hacia estas fuerzas dispuestas a apoyar a Sánchez al cederles cada una dos diputados para que puedan formar grupo propio en la Cámara Baja.
Seguir leyendo: