El debate de investidura de Feijóo: votos que necesita para ser presidente, qué pasa si no obtiene los apoyos y cuándo podría presentarse Sánchez

Felipe VI ha designado al candidato del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, para presentarse a la investidura con el objetivo de convertirse en presidente del Gobierno. En menos de 24 horas, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha consultado con el líder del PP - que le pedía tiempo para negociar los apoyos- y han establecido que los días 26 y 27 de septiembre se celebrará el debate de investidura, dando a Feijóo 35 días para lograr los cuatro escaños que necesita para poder superar la votación con éxito.

En principio, el presidente del PP tiene muy complicado conseguir los apoyos, lo que provocaría que, desde el fracaso de la votación, comenzaran a correr dos meses para que otros candidatos se presenten al debate de investidura y puedan acceder a La Moncloa. En este periodo de dos meses, se pueden hacer todos los intentos que se precisen, previa ronda de consultas del rey con los grupos parlamentarios.

Te puede interesar: Armengol fija la investidura de Feijóo para el 26 y 27 de septiembre

Feijóo cuenta con más noes que síes y Sánchez con menos vetos, por lo que desde el PSOE mantienen que, tras la previsible investidura fallida de Feijóo, Sánchez intentará armar una mayoría que le permita seguir al frente del Gobierno. Los próximos 35 días serán vitales tanto para el PP, para intentar alcanzar un acuerdo con alguna fuerza nacionalista o independentista, como para el PSOE para comenzar los contactos con Junts, el actor político que, en principio, será el más complicado de convencer.

Alberto Núñez Feijóo cuenta, por ahora, con un total de 172 votos afirmativos. El candidato popular se encuentra a tan solo 4 votos de la mayoría absoluta de la cámara, que se encuentra en 176 escaños. El PP tiene a su favor sus propios diputados —los 137 que logró el pasado 23J— y también cuenta con los apoyos de Santiago Abascal con el que, tras semanas de tensiones entre ambas formaciones, ayer pactó una reconciliación, después de que Feijóo, en su intervención ante los periodistas, reconociera como socio a la ultraderecha.

Además, en los últimos días, el PP también ha alcanzado un acuerdo con Coalición Canaria, para llevar a término lo que la formación del archipiélago ha denominado “la agenda canaria”. Por último, también tienen el voto de UPN. Su presidente, Javier Esparza ya reconoció su preferencia de volver a las urnas antes que un nuevo gobierno del PSOE. Todos estos apoyos aglutinan un total de 172 síes, que serían insuficientes y le abocarían a una investidura fallida.

Le hacen falta cuatro votos a favor, que podrían venir de los 5 que tiene el PNV, o la abstención de Junts, una vía que a día de hoy no existe. Sin límite de tiempo, ni de intervenciones, Feijóo debe exponer su programa político de cara a la legislatura y, en una primera votación, pedir la confianza de mayoría absoluta de la Cámara Baja.

Si esa votación, el 27 de septiembre, no alcanza la mayoría absoluta, Feijóo tendrá que ir a una segunda en el plazo de 48 horas, el viernes 29, en la que le valdría con mayoría simple: más síes que noes. Si Feijóo sale elegido, habría nuevo Gobierno, pero de no contar con el apoyo de la Cámara se abre un nuevo escenario, que ya contemplaba ayer el comunicado de la Casa del Rey.

Tal y como establece la ley, la investidura será superada o por mayoría absoluta en primera votación o por mayoría simple en una segunda votación que se celebraría 48 horas después de la primera votación. En la primera votación, con los apoyos actuales, Feijóo no alcanzaría los 176 diputados, es decir, la mayoría absoluta. Sin embargo, en caso de lograr la abstención de alguno de estos grupos, Feijóo firmaría 172 síes, frente a los 171 noes.

El Partido Popular, tal y como ha anunciado, peleará para lograr los apoyos del PNV. Y a pesar de que la abstención de ERC y Junts Per Catalunya permitiría aglutinar una mayoría posible, ambos partidos se han mostrado contrarios a votar a favor de Feijóo. Sin embargo, una posible abstención de alguna de las fuerzas independentistas catalanas sí permitiría al candidato popular superar la votación de investidura.

Te puede interesar: El reto de Feijóo un mes después del 23-J: una investidura sin fecha y a la espera de un milagro con el PNV

Con la previsible derrota parlamentaria del PP, tal y como se indicaba anteriormente, el rey volvería a llamar a consultas a los grupos políticos con representación en el Congreso de los Diputados. Es previsible que la segunda ronda de consultas se celebre durante la primera semana de octubre y, en función del estado de las negociaciones entre el PSOE y los grupos periféricos, el rey nominaría a Sánchez y se celebraría el debate de investidura. Con la designación del rey bajo el brazo, todo dependería de Francina Armengol, que tendría hasta antes del 27 de noviembre para poder convocar un nuevo debate de investidura.

Con la primera votación establecida el próximo 27 de septiembre, podemos calcular cuado se volverían a repetir elecciones. El próximo 14 de enero los ciudadanos se volverían a ver cara a cara con las urnas en caso de que ninguno de los candidatos propuestos por el rey alcancen la mayoría suficiente para superar la investidura.

En caso de que se produjera este escenario, la campaña se reduciría a una semana, tal y como establece la ley electoral, la cual fue modificada en 2016 con el objetivo de ahorrar costes y evitar la coincidencia de unas nuevas elecciones en plenas navidades. Al reducirse el tiempo de campaña electoral, este periodo comenzaría el 5 de enero.

Seguir leyendo: