El interés de las generaciones más jóvenes por la protección del medioambiente se ha trasladado a muchos aspectos de su vida, entre ellos, a la financiación de sus viviendas. Por ello, las hipotecas verdes son cada vez más solicitadas por los milennials, nacidos entre 1981 y 1993, y por los miembros de la Generación Z, nacidos entre 1994 y 2010, que son los que más interés muestran por el crédito hipotecario sostenible.
Este interés se debe a que a largo plazo, las hipotecas verdes concedidas para financiar la compra de viviendas sostenibles “no solo benefician a nuestro planeta, también aminoran el gasto en las facturas, puesto que utilizan menos energía, cuyo precio puede reducirse hasta un 90%”, señala Ricardo Gulias, CEO de RN Tu Solución Hipotecaria.
Te puede interesar: Las hipotecas sobre viviendas se desploman un 24% hasta alcanzar en mayo las 33.398
Estas no son sus únicas bazas. Otro factor que las convierte en las favoritas de los más jóvenes es que son, en general, más baratas que las hipotecas convencionales. Los bancos que las conceden aplican un interés de entre 0,05 y 0,10 puntos más bajo que en sus hipotecas convencionales, además no cobran comisión de apertura e incluyen menos seguros asociados.
Estas facilidades tienen como objetivo “incentivar la compra de viviendas con una buena calificación energética para preservar el medio ambiente”, señala Miguel Riera, experto en hipotecas de Helpmycash, un argumento que convence a los compradores de menor edad. También están dirigidas a financiar la construcción de viviendas energéticamente eficientes y a rehabilitar inmuebles con el objetivo de reducir el gasto energético y, aunque llevan años implantadas en España, hay pocas entidades que las comercializan.
Te puede interesar: Si quiere comprar una vivienda nueva hágalo ya, pero si opta por una de segunda mano espere porque los precios bajarán
Esta falta de oferta es debido a que hasta ahora su demanda ha sido escasa debido a que muchos compradores desconocen este tipo de créditos. Según el Observatorio sobre Vivienda y Sostenibilidad publicado por Unión de Créditos Inmobiliarios (UCI), el grado de desconocimiento varía según los grupos de edad, “siendo los compradores y propietarios de vivienda de entre 25 y 44 años los mayores conocedores de este tipo de préstamos (32%), frente al grupo de 45-65 años (20%)”.
Financiación sostenible al alza
De momento, solo diez entidades financieras españolas dan la opción de contratar una hipoteca verde o mejoran las condiciones de sus préstamos si se compra una casa eficiente. Son BBVA, Santander, Bankinter, Unicaja Banco, Mediolanum, Triodos Bank, Ibercaja, Abanca, Cajamar e Hipotecas.com.
Pero los analistas prevén que este número aumentará a corto plazo debido a que el Gobierno pretende usar los fondos europeos de recuperación para mejorar la sostenibilidad de las viviendas españolas. “Se espera que el número de rehabilitaciones crezca a medio plazo y si eso ocurre, es muy probable que más entidades entren en este mercado en auge”, vaticina Riera.
Te puede interesar: ¿No tiene dinero para adquirir un piso? Compre una habitación
Otras medidas que impulsarán la contratación de estas hipotecas son los objetivos de descarbonización de las ciudades impuestos por Europa para 2050. Todo ello hace que “la revolución sostenible de la UE haya dejado de ser una moda y nos obliga a todos los países a mejorar la eficiencia energética de nuestros hogares”, señala Catia Alves, directora de Sostenibilidad y Rehabilitación de UCI.
A su juicio, “la sociedad asume que es sostenible por moverse en bici o en tren y si recicla la basura pero muchas veces se olvidan de lo que emiten los edificios, por lo que es importante dar a conocer los mecanismos de financiación sostenible que actualmente tenemos al alcance, como las hipotecas verdes, impulsar su demanda y contribuir a que el cliente busque la eficiencia energética en su vivienda, ya que conseguirá mayor confort, más salud y menos gastos”.
Requisitos para obtener una hipoteca green
Pero no todos los que quieran contratar una hipoteca sostenible pueden acceder a ella. La mayoría de las entidades exige una serie de requisitos para concederla entre los que destacan que la calificación energética de la vivienda sea A, A+ o B.
Una condición relativamente fácil de cumplir para las viviendas nuevas que suelen tener una calificación energética mejor que las de segunda mano. Según un informe del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE), el 59% de las casas de nueva construcción tenían una certificación A o B en 2020, mientras que solo el 1,17% de las usadas recibían esa nota.
Seguir leyendo: