Los 10 pueblos de la Sierra de Madrid imprescindibles: castillos, rutas de senderismo y piscinas naturales

Estas localidades permiten a los ciudadanos huir del estrés de la capital y estar en contacto con la naturaleza

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Buitrago de Lozoya en Madrid (Wikimedia).
Buitrago de Lozoya en Madrid (Wikimedia).

Cualquier época del año es perfecta para hacer una escapada a la sierra de Madrid, pero con el recurrente buen tiempo este plan se vuelve todavía más atractivo. Y es que, a tan solo una hora del centro de la capital, existe una infinidad de pueblos en los que pasar el día y disfrutar de múltiples actividades, como hacer senderismo, escalada o incluso puenting. La página web Civitatis ha elaborado una lista de todas las localidades situadas en la sierra de Madrid que no te puedes perder durante tu próxima escapada.

Y es que, si lo que buscar es huir del estrés de la ciudad y pasar un día tranquilo, rodeado de la naturaleza o haciendo diferentes actividades, no es necesario irte a otra comunidad o país. Un breve trayecto en coche o en transporte público tendrás todo eso a tu disposición y sin salir de la Comunidad de Madrid. Pero, ¿cuáles son los mejores pueblo pasar visitar en un día?

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Guadarrama, restos de la Guerra Civil y senderismo

Esta localidad se encuentra situada en el Parque Nacional de Guadarrama y cuenta con múltiples puntos turísticos que visitar. En concreto, se puede realizar una ruta por los restos de edificaciones de la Guerra Civil, empezando por su ayuntamiento, un edificio que fue destruido durante la guerra y posteriormente reconstruido. Actualmente, su construcción es de piedra y revoco, su tejado está hecho con teja árabe y cuenta con dos torres en los laterales y soportales en la planta baja.

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Otros de los puntos de interés es la ermita de Nuestra Señora la Virgen de la Jarosa, la iglesia parroquial de San Miguel Arcángel, la fuente de piedra o el monumento a la coronación del Puerto de León. Entre sus festejos destacan las fiestas de la Virgen de la Jarosa y las fiestas de San Miguel y San Francisco de Asís. Aunque si por algo destaca este pueblo es por su naturaleza en la que se puede realizar senderismo, o pasar un fin de semana en sus múltiples alojamientos rurales.

Soto del Real y su Anillo Verde

Esta localidad está situada a unos 40 kilómetros de Madrid, cerca del embalse de Santillana. Entre otras cosas se conoce por su recorrido denominado el Anillo Verde, una ruta de aproximadamente 5 kilómetros, a través de la cual disfrutar de todo su casco urbano y de sus construcciones históricas, entre las que destacan la iglesia de la Inmaculada Concepción, el puente de los Once Ojos o la ermita de Nuestra Señora del Rosario.

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Miraflores de la Sierra: naturaleza y poesía

From Miraflores de la Sierra. (GETTY IMAGES)
From Miraflores de la Sierra. (GETTY IMAGES)

Miraflores de la Sierra es otro de los pueblos con más encanto de la sierra de Madrid. En esta localidad destaca la Estatua del Perrero, que rinde homenaje a una leyenda del pueblo, en la que se relata que este personaje consiguió echar a las tropas francesas que se instauraron en esta localidad con ayuda de perros. También cuenta con la iglesia de la Asunción de Nuestra Señora.

Además, este pueblo fue fuente de inspiración para uno de los poetas de la generación del 27, Vicente Aleixandre. Este autor veraneó en este pueblo a lo largo de toda su vida, desde su infancia hasta la vejez, por lo que muchos de los rincones de Miraflores de la Sierra están vinculados a este poeta, así como a algunos de sus compañeros.

Por otro lado, Miraflores de la Sierra es un municipio ideal para los amantes de la naturaleza, ya que cuenta con numerosas rutas de senderismo enmarcadas dentro de un precioso paisaje montañoso.

Manzanares el Real y su famoso castillo

El castillo de Manzanares el Real (Getty Images).
El castillo de Manzanares el Real (Getty Images).

Manzanares el Real ofrece la posibilidad de disfrutar de fiestas como la Noche de San Juan o el Cristo de la Nave. Aunque lo que realmente es imprescindible visitar son sus edificaciones como el castillo de los Mendoza (castillo de Manzanares el Real) el cual comenzó a construirse en 1475; el castillo Viejo, conocido como Plaza de Armas; el embalse de Santillana; y la ermita de Nuestra Señora de la Peña Sacra.

Respecto a la gastronomía, cuenta con recetas tradicionales como las patatas de caldero con cabrito, el conejo en escabeche o el toro con patatas. Y, por supuesto, dispone de una infinidad de rutas para hacer en La Pedriza.

Buitrago del Lozoya, un pueblo amurallado precioso

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Buitrago del Lozoya cuenta con múltiples atractivos más allá de ser un pueblo amurallado. El castillo de los Mendoza, que con siete torres corona la localidad, es un destino imprescindible para los visitantes, al que se unen la iglesia de Santa María del Castillo o el museo de Picasso. Además, cuenta con una gran oferta gastronómica en la que disfrutar de la buena comida a través de sus múltiples restaurantes, bares y tabernas.

Para concluir la visita se recomienda el mirador natural de Buitrago del Lozoya, donde se puede disfrutar de las mejores vistas de la localidad, rodeada por el río Lozoya.

Cercedilla, siguiendo las rutas de los romanos

Los restos de la antigua calzada romana forman parte de los encantos de Cercedilla, así como el ferrocarril, que se remonta al siglo XIX. Pero si por algo destaca este pueblo es por su diversidad de actividades: rutas y diversos planes que hacer en la naturaleza, dado que se encuentra muy cerca de la estación de esquí de Navacerrada. Además, su gastronomía destaca por servir una de las mejores carnes de toda la sierra de Madrid.

Patones de Arriba

Una plaza de Patones de Arriba
Una plaza de Patones de Arriba

Se trata de un pueblo con mucho encanto situado cerca de la cuenca del Jarama y a espaldas del embalse del Atazar, lo que hace que se encuentre medio escondido en plena naturaleza. En Patones, la pizarra es la reina de gran parte de sus edificaciones, lo que provoca que su arquitectura presente una tonalidad negra. Además, presenta varias rutas que se pueden realizar, como la del Pontón de la Oliva, la senda de Genaro o la del mirador del embalse del Atazar.

Rascafría: cascadas y piscinas naturales

Las Presillas, Rascafría (Wikimedia).
Las Presillas, Rascafría (Wikimedia).

En Rascafría confluyen las cumbres de la Sierra de Guadarrama, la nieve de Peñalara y el monasterio de El Paular, lo que hace que sea un destino todavía muy atractivo. Aunque más cercano a la localidad se encuentra el Bosque finlandés, con una cabaña de madera y un muelle típico del país escandinavo, así como las Presillas, unas piscinas naturales en las que disfrutar de un chapuzón en verano. También se recomienda visitar la cascada del Purgatorio, una de las más impresionantes de la Comunidad de Madrid.

Horcajuelo de la Sierra: pizarra y naturaleza

El Hayedo de Montejo en Horcajuelo de la Sierra (Jarmad78, Wikimedia Commons).
El Hayedo de Montejo en Horcajuelo de la Sierra (Jarmad78, Wikimedia Commons).

Este es otro de los pueblos de pizarra de la Sierra del Rincón que, al igual que Patones de Arriba, destaca por su arquitectura negra, muy característica de la comarca de la Sierra Norte de Madrid. Destaca por la fachada circular de su museo etnológico o su iglesia de San Nicolás de Bari. Aunque uno de los puntos más importantes de este pueblo es el Hayedo de Montejo, una de las razones por las que la sierra del Rincón fue declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco.

El Berrueco, un pueblo bonito y poco conocido

Panorámica del pueblo de El Berrueco desde el castillo (Ayuntamiento de El Berrueco).j
Panorámica del pueblo de El Berrueco desde el castillo (Ayuntamiento de El Berrueco).j

Se trata de una localidad con gran belleza natural, gran biodiversidad y un territorio ideal para huir del estrés. Este pueblo es famoso por sus rutas en moto y por la inmensidad de senderos que parten desde él. Entre los sitios a visitar en el Berrueco está la plaza de la Picota; la iglesia de Santo Tomás Apóstol, que data del siglo XII; el crucero y el mirador; el potro de herrar, una construcción de piedras monolíticas; las tradicionales casas del pueblo, hechas con piedra; el museo de El Berrueco; el puente romano; la atalaya musulmana o la dehesa Boyal. Además, se trata de un pueblo poco conocido, por lo que es ideal para ir a descansar, buscando tranquilidad.

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