Daniel Sancho, el hijo del conocido actor Rodolfo Sancho, se encuentra retenido en Tailandia tras ser acusado de haber presuntamente haber asesinado y desmembrado al cirujano colombiano Edwin Arrieta Arteaga mientras se encontraban de vacaciones en el país asiático. Tras el desconcierto inicial al conocerse la noticia, han ido saliendo a la luz nuevos datos que, según la policía tailandesa, apuntan directamente al joven.
Las primeras alertas saltaron después de que uno de los recolectores de basura encontraran diferentes restos humanos dentro de un saco de fertilizante, eran partes seccionadas de un hombre -intestinos, nalgas y pene-. Tras una pequeña búsqueda, al día siguiente se encontró en el basurero una bolsa de plástico con partes de la pierna derecha, la camiseta, pantalón y calzoncillos de la víctima.
Además de esparcir restos por los vertederos, y según la reconstrucción, Sancho también habría comprado un kayak por 1.000 dólares a unas chicas con el que salió a navegar para arrojar al mar parte de los restos del cuerpo del cirujano colombiano. Ambas mujeres han sido interrogadas y han confirmado esta información.
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La pista que les llevó hasta Daniel Sancho fue un ticket de compra de una tienda de Koh Phangan desde la que señalaron al hijo del actor, quien además aparecía en la cámara comprando el día 1 de agosto bolsas de basura grandes, guantes de goma, detergente, esponjas, nanas de acero y un cuchillo de picar carne. Sin embargo, no fue ahí cuando descubrieron su identidad, sino al subirse en una motocicleta que había alquilado y que, gracias a la matrícula, pudieron vincular con él.
Tras este descubrimiento, a la policía le llamó especialmente la atención que fuera el mismo joven que apenas unas horas antes había acudido a una comisaría a denunciar la desaparición de un colombiano que estaba pasando con él las vacaciones en la isla. Los acontecimientos se precipitaron desde ese momento, y además de hacerse pública la identidad del asesinado y de su presunto verdugo, se conoció que Sancho había recogido a Edwin Arrieta Arteaga, como se llamaba el fallecido, en el puerto de la isla el día 2 de agosto y que habían viajado juntos en la mencionada motocicleta hasta el hotel Salad Beach. Allí se perdió la pista del colombiano.
Confesión
La policía asegura que el chico de 29 años ha confesado el asesinato de Edwin Arrieta Arteaga, de 44 años, a quien conocería de un viaje anterior a Tailandia. El motivo habrían sido los “celos” y el temor de que la víctima le “engañara”, sin que hayan trascendido por el momento más detalles. Al registrar la habitación de hotel de Daniel Sancho se dieron cuenta de que el baño, la nevera y el fregadero estaban muy limpios, pero en los desagües había restos de pelos, grasa y sangre.
El visado del joven ha sido revocado y se espera que se presenten pruebas en su contra ante un juez para que ordene su detención, algo que podría ocurrir en las próximas horas por la desaparición de la víctima. Su padre, Rodolfo Sancho, está de camino a Tailandia para encontrarse con él.
Una de las últimas novedades compartidas por las autoridades tailandesas al medio Bangkok Post es que han puesto al joven bajo vigilancia por riesgo de suicidio, ya que se encontraría “muy nervioso” y con “claros signos de estrés”.
Primeras imágenes
La Royal Thai Police de Tailandia, encargada del caso, ha difundido este domingo 6 de agosto las primeras imágenes de Daniel Sancho tras su detención como autor confeso. En las fotografías, a las que ha tenido acceso EFE, se le puede ver en la habitación de su hotel, custodiado por la policía. Además de verse a Daniel, también se aprecian diferentes bolsas de ‘evidencias’, es decir, pruebas recogidas en el cuarto.
Bangkok Post añade que Daniel había subido a su habitación con Edwin, quien “quiso mantener relaciones sexuales” con él. Al negarse, en un “arrebato de ira”, el joven le habría dado un puñetazo que hizo que la víctima cayera y perdiera el conocimiento tras darse con el borde de la bañera en la cabeza.
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