El efecto de ‘La pija y la quinqui’: el PSOE arrasa entre los jóvenes

Pedro Sánchez, el 29 de mayo, después de una pérdida importante de poder político, inició la operación todo al rojo. Quería dar un golpe inesperado en el tablero político, cambiar el foco mediático y no dejar que el PP aprovechara su victoria electoral para seguir desgastando al PSOE. Su campaña, desde su cartel electoral hasta sus propuestas, las han copado, principalmente, los jóvenes. Trasporte gratuito para los menores de 24 años, construcción de vivienda pública o universidad gratuita para todos aquellos que estudiantes que aprobasen son algunos de sus compromisos electorales.

Las medidas, como ya aprendió en la campaña de mayo, era necesario que llegaran a la ciudadanía, por eso se propuso copar todos los espacios mediáticos que fueran posibles: Ana Rosa, Hora 25, El Hormiguero, Hoy por Hoy, El Intermedio…, e incluso formatos que el propio presidente no sabía ni que existían, como por ejemplo el pódcast de moda entre la generación Z, La pija y la quinqui.

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El presidente era consciente —una vez fue informado— de que ir a un espacio de estas características le abriría una importante ventana a una generación desmovilizada y algo apartada de la política. Tras la propuesta de los conductores del pódcast más escuchado entre los jóvenes, el candidato socialista aceptó con el objetivo claro de hacerse con los cientos de miles de votantes potenciales que consumen el contenido de la pija y la quinqui cada semana.

Durante la segunda semana de campaña, el Centro de Investigaciones Sociológicas realizó un estudio metodológico sobre las tendencias de definición y decisión del voto a lo largo de la campaña electoral. El CIS publica, a diferencia de otros estudios, todos los datos que recoge de las encuestas que realiza. Este ejercicio de transparencia nos permite conocer los metadatos de la investigación y concluir si la estrategia de Sánchez durante la campaña electoral fue acertada.

Mucho se ha hablado y escrito sobre la tendencia de las nuevas generaciones, pues bien, este estudio, pegado a las elecciones generales del 23-J, nos permite concluir que la gran mayoría de los ciudadanos de entre 18 y 35 años se autodefinen más de izquierdas, que de derechas. Teniendo en cuenta que el 1 es extrema izquierda y el 10 extrema derecha, este segmento de población se autodefine, en mayoría, en un tres sobre diez.

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En total, un 35% de estos ciudadanos se sitúa en este valor. Como segunda opción mayoritaria, un 12,4% de los jóvenes de entre 18 y 24 años se puntúan en el cinco, frente al 17,7% que se autoposicionan en el tres. Entre los encuestados de 25 a 34 años, son un 16,4% los que apuntan al número cinco para autodefinirse ideológicamente, en contraposición al 17,3% que marca el número tres.

A pesar de considerarse progresistas, este segmento de la población podría decantarse por otras fuerzas de izquierdas y no necesariamente por el PSOE. Ante la pregunta: “¿Qué partido le gustaría que ganara las elecciones?”, un 28.7% de los votantes entre 18 y 24 años apuestan por el Partido Socialista, frente al 23% que apuesta por Feijóo, o el 12% que se decanta por Abascal. Entre los electores de 25 a 34 años, el PSOE sigue a la cabeza, un 25,2% prefiere a Sánchez, un 22,1% a Feijóo y un 10.1% a la ultraderecha. Entre ambos segmentos de la población, Sumar es preferido antes que Vox, con un 16.1% y un 21.9%.

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Según este estudio publicado por el Centro de Investigaciones Sociológicas, un 37,2% de los jóvenes entre 18 y 24 años reconocen al CIS que decidieron su voto durante la campaña electoral, el mismo periodo en el que Sánchez acudió a La pija y la quinqui. No obstante, la opción que más apoyo suscita es la que indica que la elección del voto la decidieron “mucho antes de la campaña electoral”, un 42.9%.

Sobre como reciben la información y por qué medio se informan, la mayoría de los electores más jóvenes lo hacen a través de las redes sociales. En concreto, un 41,5% de los electores entre 18 y 24 años, el porcentaje se reduce en el siguiente tramo de edad, entre los 25 y los 34 años. Esta opción pasa al segundo puesto, por debajo de la prensa escrita y digital, pero muy de cerca de las redes sociales, que firman un 33,6% y un 32%, respectivamente

A pesar de todos estos datos, la prueba de fuego llega ante la preferencia de presidente del Gobierno. Pedro Sánchez es el preferido entre los electores más jóvenes. En total, un 51,6% de los votantes de entre 18 y 35 años apuestan por el secretario general del PSOE.

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