Los reyes Felipe y Letizia y sus dos hijas alquilan un barco para disfrutar de sus vacaciones en Mallorca

Desde hace unos años, el rey Felipe VI, la reina Letizia y sus dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, no emplean embarcaciones propias durante sus salidas al mar. Concretamente, desde la retirada de la lancha Somni, en 2020, y del Fortuna, a finales de los 90. Sin embargo, según ha desvelado La Vanguardia, este año, la familia Real ha alquilado un barco para disfrutar de sus vacaciones en Mallorca.

Según el diario, desde hace varios meses, el hijo de Juan Carlos I y su familia habían encargado al Palacio de la Zarzuela buscar un buque para hacer uso de él durante sus días de verano en la isla Balear. Asimismo, según el mismo periódico, los reyes aclararon que se trataría de un alquiler temporal para su estancia en Mallorca, descartando cualquier posibilidad de compra.

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El pasado mes de octubre, el Felipe VI visitó el Salón Náutico de Barcelona. Siguiendo los consejos de Luis Conde, presidente del Salón, el rey tuvo accedió al stand de Deantonio Yachts, una empresa establecida en Barcelona y propiedad de Marc Antonio, responsable del diseño, construcción y comercialización de embarcaciones bajo el sello made in Spain.

Después de observar los diferentes navíos, el hijo de la entonces reina Sofía se descartó por una lancha motora diseñada por Deantonio Yachts. Así, en la isla balear ha desembarcado un barco modelo D50, con una amplia tecnología y con una amplitud para doce personas en cubierta. El precio de la embarcación se sitúa alrededor de los 2.500 euros por día, con un gasto aproximado de 300 euros en combustible según su uso.

Lejos han quedado aquellos días en los que Felipe y Letizia surcaban las aguas con la lancha Somni. Una embarcación que pertenecía a Josep Cusí y que, en 2007, fue cedida para el uso de la familia real. En 2014, durante el primer verano del hijo de Juan Carlos I, se firmó un contrato, a modo de préstamo, para el uso del navío. De esta manera, en 2020 Somni fue devuelta a su propietario y, posteriormente, fue puesta en venta.

El Fortuna corrió una suerte similar. Muchos son capaces de recordar aquellos impresionantes yates que, por aquella época, el entonces Rey Juan Carlos I utilizaba con su familia en sus salidas al mar. Así, durante muchos años, cuando se decía que la familia real se trasladaba de vacaciones a Mallorca o a las regatas de Palma, enseguida se asociaba con el disfrute del Fortuna. El rey Fahd de Arabia tuvo el detalle de regalarse un yate a Juan Carlos I, embarcación que se convertiría en el primer barco que formaría parte de Fortuna. El esposo de la reina Sofía estrenó el navío en 1979 y por él pasaron celebridades tan conocidas como Bill Clinton o Carlos y Diana de Gales.

Sin embargo, a finales de los 90 el rey Juan Carlos tomó la decisión de cambiar el navío por uno más moderno y nuevo. Así, un grupo de empresarios mallorquines se ofrecieron a financiar la nueva embarcación del entonces rey a cambio del Fortuna. No obstante, desafortunadamente, tras varios años de uso, el nuevo buque fue devuelto a los promotores.

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