La censura contra ‘Oppenheimer’: el desnudo de Florence Pugh que está siendo prohibido en varios países

La escena ha tenido que ser cambiada en India y Oriente Medio después de varias protestas por blasfemia

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Universal Pictures.
Universal Pictures.

Estamos en pleno 2023, pero parece que la censura sigue haciendo estragos, incluso en una de las películas más taquilleras y reconocidas del año. Pero ni Christopher Nolan ni nadie se salva del extremismo en ciertos países y así ha sucedido con la última película del director británico, Oppenheimer, que ha tenido que ver como han cambiado notoriamente una de las escenas de su película. En concreto, la que tiene que ver con el desnudo de Florence Pugh.

La actriz, que da vida en la película a Jean Tatlock, la amante del Robert J. Oppenheimer que interpreta Cillian Murphy, aparece en un momento dado del filme completamente desnuda. Todo ello en una escena en la que Oppenheimer y Tatlock mantienen relaciones sexuales y este le pide a ella que recite un pasaje del Bhagavad-gita, el libro que citaría cuando explotase la bomba atómica con la famosa frase “Me he convertido en la muerte, el destructor de mundos”.

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En casi cualquiera de los países en los que ha sido proyectada Oppenheimer esta escena ha pasado desapercibida, y el éxito de la película está siendo celebrado por todo el mundo. Pero en la India no ha sentado tan bien esta escena, tanto por el desnudo en sí mismo como sobre todo porque se recite un pasaje de una de sus escrituras más sagradas, algo que muchos allí han visto como una grave ofensa al hinduismo.

Tráiler oficial de Oppenheimer, la película escrita y dirigida por Cristopher Nolan sobre la vida de J. Robert Oppenheimer

Es por ello que la distribuidora de Oppenheimer en la India y otros países de Oriente Medio como Indonesiao Bangladesh ha tenido que retocar la escena, introduciendo una especie de vestido negro a través de efectos especiales CGI. Un retoque que ha permitido que la película siga triunfando en todos esos países no exenta de polémica, pero que tampoco ha sentado del todo bien a sus protagonistas.

La escena que desató la ira de la comunidad hindú muestra a Cillian Murphy y a Florence Pugh teniendo relaciones sexuales mientras Murphy lee un verso de la Bhagavad-gītā, el texto más importante de esta religión
La escena que desató la ira de la comunidad hindú muestra a Cillian Murphy y a Florence Pugh teniendo relaciones sexuales mientras Murphy lee un verso de la Bhagavad-gītā, el texto más importante de esta religión

Era la primera escena de sexo de Nolan

Porque era de esperar que un hombre como Christopher Nolan, que cuida al detalle todas sus películas y que incluso las concibe para que se vean de determinada manera -aunque aquí en España no vayamos a poder ver Oppenheimer como habría querido- no esté muy de acuerdo con este cambio en una de sus escenas. “Cuando miras la vida de Oppenheimer y todos sus aspectos, su sexualidad y el modo en que se relacionaba con las mujeres, el encanto que tenía, son una parte esencial”, señala Nolan, defendiendo que la escena formaba parte de la vida real de Oppenheimer, y añadiendo que se trataba además de su primera escena de sexo en todo su cine. “Siempre que te desafías y te pones a ti mismo a trabajar en cosas en las que no habías trabajado antes, deberías tener ciertos nervios que te hagan precavido y te lleven a planear y preparar las cosas bien”.

Por otro lado, el protagonista de Oppenheimer y compañero de escena de Florence Pugh también ha salido a defender la escena de aquellos que la tachan de ofensiva y gratuita. “No son gratuitas. Son perfectas, y Florence es simplemente increíble”, comentaba el actor en una reciente entrevista. Y es que Murphy probablemente sea muy consciente de que esta no es la primera vez que la censura ataca a Florence Pugh, quien ya tuvo que ver cómo sus redes sociales se llenaban de mensajes de odio y acoso después de posar con un vestido rosa de Valentino en el que se translucían sus pechos. La actriz tuvo que salir al paso ante los comentarios de odio. “Muchos de vosotros queríais decirme agresivamente cuán decepcionados estabais por mis tetas pequeñas, o cómo debería estar de avergonzada por tener un pecho plano. He vivido en mi cuerpo durante mucho tiempo. Soy plenamente consciente del tamaño de mis senos y no le tengo miedo”, escribiría la británica en su perfil de Instagram.

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