Así es el ‘Sirtap’, el dron militar hispanocolombiano en el que España ha invertido 595 millones de euros

El Gobierno de España ha dado este martes el visto bueno a la firma del contrato entre el Ministerio de Defensa y la empresa Airbus Defence & Space para la compra de 27 sistemas remotamente tripulados de altas prestaciones (Sirtap), que serán empleados por el Ejército de Tierra y el Ejército del Aire. Así, la cartera de Margarita Robles adquirirá, por 595 millones de euros, nueve sistemas Sirtap -cada uno de ellos conformado por tres aeronaves y una estación de control terrestre-, dos simuladores para entrenamiento en el manejo de los drones y el apoyo logístico inicial por parte de la compañía aeroespacial. El presupuesto se distribuirá entre las anualidades de 2023 y 2031.

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Este avión piloteado a distancia, de cuyo desarrollo también participa Colombia, ha sido diseñado por la división de Airbus en España, donde las unidades serán construidas, a partir de los requerimientos de las Fuerzas Armadas del país. Además, el Sirtap supone un importante proyecto para la industria de defensa nacional ya que también contará con la participación de otras empresas locales.

Con estos nuevos drones el Ejército de Tierra planea reemplazar sus sistemas Searcher de fabricación israelí, incorporados a finales de 2007, ya en el ocaso de su vida útil. Por su parte, el Ejército del Aire no cuenta con unidades de las características del Sirtap sino que posee los Predator -unidades de origen estadounidense de mayor tamaño y destinadas a otro tipo de misiones- por lo que incorporar estos nuevos sistemas supondrá un incremento de sus capacidades.

Colombia se sumó a este proyecto en 2017, dos años después de que España y Airbus comenzaron a idear el desarrollo del Sirtap. La participación colombiana tomó nuevo impulso con la llegada al poder del presidente Gustavo Petro, quien tiene especial interés en que este tipo de proyectos implique el desarrollo y fortalecimiento de la industria aeroespacial de su país a través de la transferencia de conocimientos técnicos y tecnología.

Al respecto, el analista e investigador colombiano en temas de defensa y seguridad Erich Saumeth explicó a Infobae España que “Colombia centrará su trabajo en el desarrollo del conjunto de cola del dron, lo que comúnmente se conoce como empenaje, y en el tren de aterrizaje”, labores que llevará a cabo la Corporación de la Industria Aeronáutica Colombiana (CIAC), una empresa propiedad del Ministerio de Defensa colombiano. De acuerdo a Saumeth, quien citó a fuentes de Airbus, el país sudamericano es autónomo en el diseño de esos dos componentes y será el principal aporte que realice a este proyecto conjunto.

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A pesar de que aún se desconoce la suma exacta que invertirá Colombia en este programa, se calcula que la misma rondará los 300 millones de dólares. Las Fuerzas Armadas colombianas planean incorporar seis sistemas, es decir, 18 aeronaves que, sumadas a las 27 de España, hacen un total de 45 aviones para la fase inicial del proyecto. Además, Saumeth ha asegurado que otros cinco países latinoamericanos ya han expresado a Airbus su interés sobre el Sirtap: “Podemos aventurarnos a decir que entre ellos están, sin lugar a dudas, Chile, Brasil, Perú y, probablemente, Argentina y México”.

El Sirtap presentará una longitud de 7,3 metros, una altura de 2,2 metros y una envergadura de 12 metros para un peso total de 750 kilos. Según su fabricante, el dron podrá volar durante 20 horas seguidas a una altura de 6.400 metros, siendo capaz de operar bajo cualquier condición climática, entre los -40º y 50º, debido a un sistema de proyección contra el hielo y altas temperaturas. Asimismo, gracias a que sus alas y motor pueden ser desmontados, es fácilmente transportable, por ejemplo, en un avión C295 -también de diseño español-, capaz de trasladar hasta dos Sirtap a la vez.

La aeronave remotamente tripulada está pensada para su uso en misiones de vigilancia de fronteras y control migratorio, búsqueda y rescate de personas desaparecidas en zonas remotas, monitoreo de actividades ilegales como piratería, narcotráfico y pesca ilegal y apoyo contra incendios y otros desastres naturales. Si bien la primera versión del sistema estará equipada únicamente con sensores electroópticos e infrarrojos, existe la posibilidad de que en el futuro integre armamento para dotar al Sirtap de capacidad de ataque.

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