La playa que tiene un ‘caballero petrificado’ y donde empieza la Senda de los Miradores, una de las rutas más bonitas de España

La costa asturiana es un destino que raramente defrauda. Sus espectaculares paisajes de montaña, junto con sus imponentes costas, algunas de un paraje escarpado sin igual, dotan a la provincia de un patrimonio natural difícil de igualar. A esto se le suman los hermosos pueblos costeros, así como su rica gastronomía. No obstante, si por algo destaca, y más en verano, es por sus hermosas playas.

De arena fina o incrustadas en acantilados, sus arenales son unos de los más impresionantes de España. Además, gracias a diferentes senderos se pueden disfrutar de rutas que los recorren, revelando a la vez hermosos paisajes. En este sentido, destaca una playa que cuenta con todas estas características. Se trata de la playa de Aguilar, un arenal de arena fina y dorada pero enclavado en un paraje rocoso de ensueño rodeado de vegetación. Esto hace que la playa sea una de las más visitadas del concejo de Muros de Nalón (Asturias), aunque comparte el extremo occidental del arenal, con el concejo de Cudillero.

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Aguilar destaca por su impresionante paisaje, el cual está plagado de enormes rocas que dan a la playa una belleza especial. Según José Alejandro Adamuz en el libro Playas de España que no te puedes perder (Anaya Touring), destaca la peña del Caballar, ya que cuenta con una forma singular y esconde detrás la leyenda de que se trata de ‘un caballero petrificado’. Además está al oeste la punta del Gavieiru, más conocida como la peña del Reloj por su silueta, y al este, punta Castillo.

Más allá de todo su atractivo natural, la playa ofrece al visitante todo tipo de servicios, pues cuenta con chiringuito, duchas, aseos y socorrista. Además, es un enclave perfecto para la práctica de surf y la pesca. En cuanto a su acceso, es bastante sencillo, ya que cuenta con una zona de aparcamiento señalizado. Desde allí, tan solo hay que caminar unos metros hasta la arena.

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Los encantos de la playa del Aguilar no se quedan en su hermoso paisaje, sino que, además, es el punto de partida de una de las rutas más hermosas de nuestro país. Se trata de la Senda de los Miradores, un recorrido que recorre la senda asturiana a lo largo de más de seis kilómetros (solo ida) hasta el pueblo de San Esteban de Pravia. Es de dificultad baja y apta para todos los públicos.

Discurre por un paraje virgen enmarcado entre acantilados donde se integran miradores como los de punta Los Glayos, de la Atalaya y, finalmente, el mirador del Espíritu Santo, ubicado justo al lado de la ermita del mismo nombre. La vista estratégica que ofrecen descubre playas con muchos encantos como la playa de las Llanas, Xilo, Aguilar, Cabo Vidio y al de Peñes. . Además, está catalogada como sendero azul, pues se puede hacer en bicicleta, excepto la subida al balcón del Espíritu Santo.

Desde Gijón, el viaje es de alrededor de 30 minutos por la carretera A-8. Por su parte, desde Oviedo el trayecto tiene una duración estimada de 35 minutos por la misma vía.

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