La última victoria de Felipe González hace 30 años: el faro de Sánchez para la remontada pese a que el expresidente no ha pedido el voto para él

El líder del PSOE se aferra a esa victoria “frente a todos los pronósticos” como revulsivo para el 23-J

Guardar
El expresidente Felipe González y
El expresidente Felipe González y Pedro Sánchez en el acto público organizado por el PSOE para conmemorar el 40 aniversario de la primera victoria electoral socialista en 1982. Francisco J. Olmo / Europa Press

“Remontada” es una de las palabras que más usan en las filas socialistas desde el inicio de la campaña de las generales. Tanto antes como durante, todos los vientos han soplado en contra del partido, malherido por el batacazo en las autonómicas y municipales del pasado 28 de mayo. Tras la importante pérdida de poder institucional, el secretario general del PSOE asumió la derrota “en primera persona” y adelantó las elecciones para “clarificar” el rumbo del país.

En el partido hay quien asemeja este discurso al que Felipe González pronunció hace 30 años, cuando ganó las elecciones generales del 6 de junio de 1993. “He entendido el mensaje de los ciudadanos: quieren el cambio del cambio”, dijo el entonces secretario general socialista. Y es que, pese a cosechar su cuarta victoria consecutiva, su liderazgo se redujo a 159 escaños, aunque consiguió gobernar otros tres años más gracias al apoyo de CiU y el PNV.

Te puede interesar: Sánchez acusa a Feijóo de “mentir” sobre su amistad con Marcial Dorado: “Es inquietante su relación con un narcotraficante”

Pero las similitudes han ido a más al recordarse en algunos actos del partido que en 1996, como en el actual contexto político, la mayoría de las encuestas no daban al PSOE como ganador. Cabe destacar, además, que González atravesaba un momento complicado por la crisis económica y los escándalos de corrupción que salpicaban al partido, como el caso Guerra.

Felipe González, el motivo por el que Sánchez se afilió al PSOE

Aunque los motivos del cuestionamiento del liderazgo entre González y Sánchez no son compartidos, a la dirección del partido actual le une ese sentimiento de remontada, la última bombona de oxígeno en un periodo electoral convulso que cuenta las horas para que la ciudadanía decida si realmente hay un cambio de ciclo o no.

Te puede interesar: La batalla por los últimos escaños obliga al PSOE a rescatar los mítines en el último tramo de la campaña

El propio Sánchez reconoció este jueves en una entrevista en Al Rojo Vivo que “Felipe González fue “la causa” de que se afiliara al PSOE en 1993, “cuando todo el mundo pensaba que iba a perder las elecciones. Frente a todos los pronósticos ganó Felipe González”, añadió.

El expresidente José Luis Rodríguez
El expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez durante un acto por el Día Internacional de la Mujer. Ricardo Rubio / Europa Press

Pese a apelar a la épica de este referente, el exdirigente andaluz sigue sin pedir el voto de forma explícita para Pedro Sánchez. No será por falta de presión. Primero, porque otro ex secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha hecho todo lo contrario. Su papel activo en esta campaña ha sido aplaudido por Ferraz y por el propio Sánchez: “Hay un activismo de Rodríguez Zapatero que admiro”, incidió este jueves.

A diferencia de Felipe González y de otros muchos barones críticos con Sánchez, el ex secretario general ha reivindicado a Sánchez al frente de sus acciones políticas. Tanto en el acuerdo de Gobierno con Unidas Podemos, como el papel otorgado a EH Bildu y ERC para sacar adelante medidas de importante calado social y económico, han encontrado un fuerte respaldo de Zapatero. Y así lo ha reflejado con vehemencia en multitud de entrevistas y actos del partido.

Ni está ni se le espera

Por otro lado, González no se unió al manifiesto que firmaron recientemente casi 40 exministros de los gobiernos de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero pidiendo el voto para el PSOE. Matilde Fernández, Narcís Serra, Javier Solana, Joaquín Almunia, Carlos Solchaga, o Abel Caballero fueron algunos de los ministros de la etapa de González que plasmaron su firma.

Te puede interesar: La receta del PSOE para el 23-J: continuar con sus principales políticas frente a la amenaza de derogación de la derecha

González tampoco aprovechó la ocasión que otorgó otro manifiesto, el firmado hace un mes por históricos dirigentes del PSOE andaluz en defensa de Pedro Sánchez, entre los que se encontraban figuras cercanas al exdirigente sevillano y que participaron en la mítica foto del “clan de la tortilla” allá por los 80, como Luis Yáñez, Carmen Hermosín, Isabel Pozuelo, Pablo Juliá o José Manuel Amores.

Ni Felipe González ni Alfonso Guerra han sido partícipes de estos movimientos en favor del actual secretario general del PSOE. De hecho, han tomado la palabra para pedir que “gobierne la lista más votada”, como es el caso del expresidente del Gobierno (esto es lo que pide Feijóo), y para echar en cara los acuerdos con EH Bildu, como reprochó el exvicepresidente socialista.

En cualquier caso, Sánchez “no mide” a su homólogo “en esos términos” y tiene claro que “Felipe González ha sido uno de los grandes presidentes de la historia de la democracia y cuenta con mi admiración total y absoluta”. Aunque este no haya pedido el voto de forma expresa para Sánchez (según República.com, González ya ha votado por correo al PSOE, eso sí), su ejemplo es un faro para Sánchez. Este domingo comprobará si brilla en la oscuridad.

Seguir leyendo:

Guardar