Hace aproximadamente dos años que Miquel Iceta se hizo cargo de la cartera de Cultura y Deportes en sustitución de José Manuel Rodriguez Uribes. Antes de ocupar el puesto, el catalán era Ministro de Política Territorial y asumió su nueva misión con un sinfín de problemas sobre la mesa por parte de un sector, el cultural, que se encontraba agónico después de crisis generada durante el confinamiento y la pandemia de coronavirus.
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Algunos retos a los que se enfrentaba: había que gestionar la inversión de fondos europeos de resiliencia y atender a la convocatoria de ayudas. También estaba pendiente la resolución del Estatuto del Artista y había que recuperar la confianza de cada una de las industrias culturales tras la gestión de su antecesor, que fue duramente criticada. Había otros frentes abiertos, como la Ley de Mecenazgo, el Hub audiovisual, así como el incremento de los incentivos fiscales y la difusión y protección del Patrimonio Histórico, que partían de una propuesta de ley de 2020 para resignificar los conceptos y adecuarlos a las nuevas realidades.
El Estatuto del Artista, el gran hit
Era una de las demandas históricas y más luchadas por los colectivos y que tenía como objetivo primordial mejorar las condiciones materiales y sociales de los artistas en nuestro país, defendiendo los derechos de los trabajadores intermitentes a través de un nuevo modelo fiscal y sindical, además de buscar soluciones a las pensiones de jubilación. Unas medidas que tenían que incluir a los Ministerios de Trabajo y Seguridad Social para llegar a buen puerto. Finalmente se aprobó en marzo del año pasado a través de un Decreto Ley en el que, entre otras cosas, se combatía la temporalidad, se obligaba a indemnizar el despido, y por fin se introducían las actividades técnicas y auxiliares como integrantes legítimas.
Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia
El Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), al frente del que hasta hace poco estaba Beatriz Navas (que precisamente renunció al parecer por discrepancias con el ministro), puso en marcha un paquete de medidas extraordinarias para paliar la situación de las salas de cine después del confinamiento. Llegaron ayudas directas por valor de más de diez millones de euros para los exhibidores y se dio una nueva vida a la producción cinematográfica a través del aumento de las ayudas generales y selectivas. Y, por primera vez, se pusieron las pilas para promocionar la cinematografía española de forma internacional, sirviendo de enlace con los diferentes festivales europeos. ¿El resultado? Que desde hace varios años, el cine español se encuentra presente en los más prestigiosos certámenes internacionales y gana premios.
Además, se comenzó a apoyar a los laboratorios y las incubadoras de creación y desarrollo de proyectos con un presupuesto de 9 millones de euros, la primera línea de ayuda que lanzó el ICAA financiada en su totalidad con los fondos de Next Generation de la UE.
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Dentro del sector musical también se multiplicó el presupuesto hasta llegar a los 16 millones de euros, así como en las artes plásticas, que alcanzaron los 39 millones de euros. Se activaron otras iniciativas, como la promoción del sector del videojuego, el fomento a la lectura, la innovación de las empresas creativas. Además, dentro de este paquete de medidas también se presentó la creación de un Hub Audiovisual cuyo objetivo era convertir a España en un líder en producción a través de la configuración de un ecosistema que permitiera la inversión internacional y gracias al que ya se han traído a nuestro país una buena cantidad de rodajes de capital extranjero.
El Bono Cultural y el Cine Sénior, iniciativas populares
En marzo del año pasado el Consejo de Ministros aprobó el Real Decreto que regula el Bono Cultural Joven, a través del que los todas aquellas personas que cumplieran 18 años a lo largo de ese año, podían disponer de 400 euros para la adquisición y el disfrute de productos, servicios y actividades culturales. Este nuevo programa de ayudas tenía como finalidad revitalizar y dinamizar el sector cultural después de la pandemia, así como generar en los jóvenes el hábito de consumir productos culturales.
Tan solo hace unas semanas, se hizo público el programa Cine Sénior que permitía a los mayores de 65 años ir al cine por 2 euros en más de 400 salas de nuestro país y que ha sido celebrada por el sector de exhibición, aunque todavía no se sabe el éxito o el buen funcionamiento de la propuesta.
La Ley del Cine, uno sus históricos escollos
La Ley del Cine es una de las damnificadas por la convocatoria de elecciones y también ha sido uno de los motivos de mayores controversias durante el mandato de Iceta por la Ley Audiovisual, que situaba a las plataformas en un lugar privilegiado anteponiéndose a los productores independientes por una cuestión de matices en las definiciones y nomenclaturas.
El pasado mes de diciembre, el Consejo de Ministros remitía a las Cortes el Proyecto de Ley del Cine y de la Cultura Audiovisual después de un largo plazo de enmiendas por parte de los grupos parlamentarios que no paraba de ampliarse. Se rechazó la de VOX, pero nada llegó a concretarse y hasta hace poco todavía las conversaciones con los diferentes agentes del sector continuaban
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También se ha quedado en stand-by la Ley de Mecenazgo. La normativa pretendía estimular las donaciones privadas hacia diversos sectores que podían pertenecer al mundo del arte, de la medicina o la investigación a través de mayores deducciones fiscales y de la creación de nuevas opciones y se incorporaba la prestación de servicios como nueva forma de colaboración con las ONG.
Otras buenas noticias
A lo largo de estos años han ocurrido acontecimientos dignos de mención, como que la UNESCO declarara Patrimonio Mundial el Paseo Del Prado y el Buen Retiro de Madrid. El Mua Mata se quedó en el Thyssen y se amplió el plazo de 15 años para que la colección permaneciera en Madrid. Se estableció el Día del Cine Español, se ha ido avanzando en la rehabilitación del Patrimonio Histórico y se han aumentado las políticas de género en todos los ámbitos.
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