La escapada de Boris Izaguirre en su fin de semana más agitado: lejos de su examiga Tamara Falcó y de ‘Lazos de sangre’

La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva ha acaparado toda la actualidad de este fin de semana y es que la pareja no se ha limitado a casarse y ya. Si el viernes celebraban con sus invitados una preboda en el hotel Ritz de Madrid, este domingo 9 de julio va a tener lugar su primer brunch como marido y mujer, y también estarán acompañados de sus más allegados. Una larga lista de familiares y amigos en la que ha faltado un nombre, el de Boris Izaguirre, quien pese a haber sido una de las personas más cercanas a la familia Preysler durante años se ha quedado fuera de todos los eventos.

Durante años el venezolano y la marquesa de Griñón fueron intimísimos, pero todo cambió cuando Tamara, en la convención religiosa en México, realizó unas declaraciones que Boris entendió como un ataque al colectivo LGTBIQ+. “En una suerte de esfuerzo mancomunado conseguimos alejar a Tamara del engañoso Íñigo Onieva. Ahora deberíamos repetir esfuerzo para alejarla de esa ideología odiosa que la rodea”, escribió el latino tras ello en El País, sin imaginarse que su gran amiga le iba a repudiar.

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Desde entonces Izaguirre le ha pedido perdón en una gran cantidad de ocasiones, también en público, pero de nada ha servido. La hija de Isabel Preysler no ha querido volver a saber nada de él y ni le ha invitado a su boda.

Por eso, consciente de que algunas miradas estarían puestas en él con motivo del enlace de la marquesa de Griñón, Boris ha optado por poner tierra de por medio y ha viajado a Zúrich, en Suiza, para alejarse física y mentalmente de la nombra como ‘boda de año’.

Unos días que ha compartido en sus redes sociales y en las que ha estado acompañado de su marido, Rubén, su gran y mejor apoyo. “Y ahora sonando Modern Love de David Bowie, gracias Rubén por el paseo, los Alpes al fondo, Zurich una vez más. Love, Boris”, ha escrito en su último post, demostrando que es ajeno a todo lo que está sucediendo en Madrid.

A todo esto hay que sumarle su ‘despedida’ de Lazos de sangre, el programa de TVE que llevaba presentando los últimos cuatro años, desde 2019 hasta 2022. La cadena pública ha anunciado que el venezolano no estará en la sexta temporada del formato, pues este cambia de cadena tras fichar por La Sexta, donde dirigirá un programa junto a Adela González.

Su sustituto será Jordi González, quien puso punto final a su contrato con Mediaset España tras la salida de Paolo Vasile. Sin duda, se trata de una suerte para Boris y es que, según se ha conocido, la nueva temporada empezará el próximo 11 de julio con un especial sobre la boda de Íñigo Onieva y Tamara Falcó, así que se librará de tener que hablar sobre el tema.

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