Los pactos autonómicos han servido, entre otras cosas, para fijar los objetivos del Partido Popular de cara al 23J. Después de los pactos en Comunidad Valenciana, en Extremadura y en Baleares, Alberto Núñez Feijóo ha asimilado que para gobernar en solitario necesita más de 160 escaños aunque gane las elecciones, si no tendrá que formar una coalición con Vox.
Tras las elecciones del 28M, Feijóo ha entendido que en los sitios donde el PP necesita que Vox vote a favor, “lo lógico es que forme parte del gobierno”, como ha ocurrido en la Comunidad Valenciana y en Extremadura, “pero donde no necesitamos el sí de Vox, lo lógico es que se mantenga fuera del gobierno”, ha aclarado.
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En el caso de que tuviese que incluir a miembros de la extrema derecha como ministros en un hipotético gobierno, Feijóo asegura que no dudaría en cesarlos si fuese necesario, aludiendo a que Pedro Sánchez no ha podido hacerlo con Podemos. “Si me encuentro con un ministro de Vox, en ese eventual supuesto, como se ha encontrado Sánchez, por supuesto que lo hubiera cesado”, ha dicho el líder del PP en una entrevista en El programa de Ana Rosa, de Telecinco.
También ha dado pistas sobre cómo organizaría el Ejecutivo si gana. El Ministerio de Economía lo ocuparía un hombre sin experiencia en la política, pero “absolutamente acreditado” porque es “una autoridad en economía”. “Cuando se sepa el nombre, España dormirá tranquila”, ha asegurado Feijóo, que ha detallado que el posible ministro de Economía no ha estado en política nunca, pero conoce la política europea.
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En cuanto a la vicepresidencia, ha señalado que la ocupará una mujer que tiene experiencia de gobierno, pero no en el estatal. Es decir, que ha pasado por la política autonómica o municipal. Preguntado sobre la posibilidad de que Ayuso entrase en su ejecutivo, Feijóo ha respondido: “Creo que Ayuso, en este momento, no querría estar en el gobierno”.
“El objetivo del PSOE no es que Vox no esté en el gobierno, sino que el PP no esté en el gobierno”, ha aseverado Feijóo, que ha señalado que Pedro Sánchez ha hecho un Pacto del Tinell en su máxima potencia, llegando a acuerdos con los partidos independentistas que, ha asegurado, no son legales en todos los países de Europa. Es España, son legales, pero se respeta la ley, ha dicho Feijóo, que aunque ha asegurado que comprende la “sensibilidad” del lehendakari y en la Generalitat, les pedirá que respeten las leyes.
Leyes del “sanchismo”
El líder del PP ha aclarado que en ningún caso derogará la reforma laboral aprobada por el Gobierno, pero ha reconocido que hay “cuestiones mejorables” como en el caso de la automoción. “Es una reforma asumible, pero se puede mejorar”, ha reconocido.
La que sí va a derogar es la ley de memoria democrática; la del solo sí es sí, que necesita “una reforma integral” o la ley trans para hacer una nueva. En definitiva, un conjunto de leyes “con imposiciones de una minoría a la mayoría de los españoles”, ha zanjado.
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