El INE eleva el crecimiento de la economía española al 0,6% en el primer trimestre

España es el país que más creció de la UE en los tres primeros meses de 2023 en comparación con el año anterior y recupera el nivel de PIB anterior a la pandemia

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La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño. (Europa Press/ María José López)
La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño. (Europa Press/ María José López)

La economía española creció un 0,6% en los tres primeros meses de 2023 en comparación con el trimestre anterior, según los datos definitivos de Contabilidad Nacional Trimestral publicados este viernes por el INE. Esto supone una décima más de crecimiento en dicho periodo que el previsto en la última publicación del instituto estadístico, aunque el INE también eleva el avance del PIB de varios trimestres anteriores, lo que implica una revisión al alza del crecimiento interanual, que ahora el INE sitúa en el 4,2%, cuatro décimas más que la avanzada el pasado 28 de abril.

En concreto, según la serie reconstruida por el INE, el PIB en 2022 creció un 0,5% en el último trimestre, un 0,4% en el tercero, un 2,6% en el segundo y descendió un 0,5% en el primero. El acelerón se debe, sobre todo, a la contribución positiva del sector exterior, algo que el Ministerio de Asuntos Económicos atribuye a la “mejora de la competitividad” de las empresas españolas.

Además, la cartera liderada por Nadia Calviño destaca que el PIB español es el que más avanza en Europa, cuatro veces más que la media, del 1%. Este dato se debe a que ocho países de la UE registraron datos negativos en el primer trimestre del año, como es el caso de Alemania (-0,5%), lo que provocó la entrada en recesión técnica de la zona euro entre el último trimestre de 2022 y el primero de este año.

El Ministerio de Asuntos Económicos asegura que con los datos publicados este viernes “se confirma que ya hemos recuperado el PIB pre pandemia”. Esto es algo que ya habían conseguido la mayor parte de las economías del euro y que a España le ha costado más como consecuencia de una recesión más profunda en los peores meses de confinamiento por tener una economía especialmente dependiente del sector servicios y, sobre todo, del turismo.

El consumo de los hogares se desacelera

Según desagrega el INE, la demanda externa ha contribuido con 2,8 puntos al crecimiento interanual, nueve décimas más que en el trimestre anterior, aunque la demanda nacional también tiene una aportación positiva de 1,4 puntos, tres décimas superior a los tres últimos meses de 2022.

En la demanda externa destaca la aportación de las exportaciones de bienes y servicios, sobre todo esta última, que presentan una variación del 10,2% interanual, lo que supone tres puntos más que en el trimestre anterior. Por su parte, la variación del gasto de no residentes en el territorio económico aumenta 37,3 puntos (del −3,6% al 33,7%). Dato que contrasta con la desaceleración interanual en 1,6 puntos del gasto de residentes en el resto del mundo (del 17,1% al 15,5%).

A la buena marcha de las exportaciones y ganancia de la competitividad de las empresas españolas está contribuyendo la menor inflación que tiene España en comparación con la UE, de 2,9% frente al 6,1%, y las subidas salariales menores, aunque se están acelerando en los últimos meses.

En el lado de la demanda nacional, el gasto en consumo final se incrementa un 1,6% respecto al mismo trimestre de 2022, pero esta tasa es 1,3 puntos inferior a la del cuarto trimestre. Los responsables de esta desaceleración son un menor crecimiento del gasto en consumo final de los hogares (variación del 1,6% interanual, 1,4 puntos menos que en el trimestre pasado) y de las administraciones públicas (crecimiento del 1,4%, 1,1 puntos menos que el trimestre precedente). Al contrario, la inversión empresarial (formación bruta de capital) gana fuerza y registra una variación del 0,6%, superior en 5,6 puntos a la del trimestre anterior.

El Banco de España detecta en sus últimas proyecciones macroeconómicas que entre abril y junio el consumo se habría recuperado “levemente” debido al empleo tras el desplome en el último trimestre de 2022 y el primero de 2023 y prevé que esta senda de recuperación se acelere en los próximos meses, siendo el próximo año el consumo privado el que tire más del PIB ante el agotamiento de la demanda exterior.

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