Las 20 piscinas naturales más espectaculares de España

Una de las mejores opciones para huir del calor sofocante del verano y pasar un rato agradable con familia y amigos es ir a una piscina natural. España alberga gran cantidad de ellas emplazadas en entornos maravillosos, lo que permite también disfrutar de rutas de senderismo en mitad de la naturaleza. De esta forma, hemos realizado una selección de 20 piscinas naturales perfectas para disfrutar cuando llegan las altas temperaturas.

Esta hermosa poza natural la podemos encontrar en la espectacular comarca de La Garrotxa. Es un entorno perfecto para los amantes del senderismo, barranquismo y escalada, siendo el camino que lleva hasta la piscina natural uno de los más demandados.

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Se localizan en el Valle del Ambroz, cerca de Hervás. Desde este pueblo comienza la ruta que lleva hasta el salto de agua conocido como la Chorrera. Justo antes de llegar allí, hay que desviarse brevemente para poder disfrutar de las tres pozas que forman las Charcas Verdes.

Conocidas como pilones, las pozas de la Garganta de los Infiernos son unas de las más famosas de Cáceres. Se encuentran en la reserva natural que lleva el mismo nombre, en la sierra de Gredos. Son varias las rutas que pasan por ellas, además de poder disfrutar de numerosas cascadas y una fauna y flora increíble.

Las Fuentes del Algar son uno de los entornos naturales más espectaculares de Alicante. Alberga gran cantidad de cascadas y pozas en un recorrido de 1,5 kilómetros a lo largo del cauce del río Algar. A pesar de ser un espacio protegido, ofrece al visitante todo tipo de servicios turísticos. Sin embargo, para entrar se debe pagar una entrada de 5 € para adultos y 2 € para menores de entre 4 y 10 años.

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Creada por la erosión de las olas y moldeada por los caprichos de la lava, El Charco Azul es una de las piscinas naturales más impresionantes de España. Se trata de un enclave virgen donde solo la mano del hombre ha facilitado su acceso. Se ubica en el pueblo de El Golfo y es uno de los lugares imprescindibles si se visita la isla de El Hierro.

A su paso por las localidades de Enguídanos y Villora, el curso del río Cabriel crea estas hermosas piscinas naturales. El espacio se caracteriza por estar lleno de cascadas y pozas donde poder darse un buen chapuzón, así como por albergar cuevas laterales.

Apenas a 1 hora y 30 minutos de Madrid, las piscinas naturales de El Chorro de Navafría son una de las mejores opciones si se vive en la capital. Se ubican en el interior de un bosque de pinos, en la sierra de Guadarrama, y cuentan con una zona de descanso y recreativa para los más pequeños. Además, a solo 1 kilómetro se puede disfrutar de El Chorro, una cascada que tiene una caída de 20 metros de altura.

En la sierra de Groba, pequeños ríos descienden de forma vertiginosa formando numerosos valles y cuencas fluviales. Así, se pueden encontrar numerosas cascadas y pozas como son las de Mougás. Son perfectas para pasar un día en familia o con amigos, además cuenta con un área recreativa donde poder descansar.

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El Charco Azul de Chulilla se enclava en el Paraje Natural Municipal Los Calderones, en el curso del río Turia e incrustado entre paredes verticales de más de 80 metros de altura. Se trata de un pequeño embalse que cuenta con numerosas rutas de senderismo para llegar hasta él. Una de las más famosas es la conocida como Ruta de los Pantaneros de Chulilla, un sendero de vértigo que discurre por puentes colgantes.

El espacio que ocupan hoy las piscinas naturales de Agaete se corresponde con las antiguas salinas. Se ubican frente al océano Atlántico, lo que hace que las pozas se llenen o vacíen en función del estado del mar y las mareas. Además, brinda una experiencia única gracias a su buen acondicionamiento y servicios.

Son una de las mejores pozas para bañarse dentro de la provincia de Ávila. Se localizan junto al cauce del río Arenal y están formadas por dos masas de agua dividas por un puente. Una cuenta con una gran profundidad, mientras que la otra es apta para los más pequeños.

Están formadas por las aguas del río Lozoya a su paso por la sierra de Guadarrama. Se enclava en un impresionante entorno, pues se encuentran rodeadas de montañas y praderas. Además, en los alrededores incluyen numerosas rutas de senderismo perfectas para los más aventureros.

Ubicado en Luesia, un municipio de la comarca de las Cinco Villas, el Pozo Pígalo es una de las pozas más turísticas de Zaragoza. Se encuentra rodeado por paredes naturales de piedra, ideales para saltar. Incluye también una zona de descanso.

La corriente de agua procedente del interior esta gruta ha dado lugar a lo que hoy se conoce como la cueva del Gato. Esto hace que se formen también diferentes cascadas a su paso. Se sitúa en el Parque Natural Sierra de Grazalema y es el espacio perfecto para bañarse mientras se visita el entorno.

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Dentro del espectacular paisaje volcánico de la isla, el Calentón de Garachico se mezcla a la perfección con el entorno y el océano Atlántico. Constituye uno de los mejores espacios para bañarse en Tenerife acompañado de la familia o amigos, pudiendo disfrutar a la vez de las olas del mar.

Con una altura de más de 20 metros y una piscina natural de unos 100 de longitud, la cascada del Peñón de Tobalina impresiona a cualquier visitante. Se encuentra en el municipio de Pedrosa de Tobalina y las aguas del río Jarea son las artífices de este monumento natural.

La piscina natural de la Fontcalda se localiza en la localidad de Gandesa, entre montañas y junto al río Canaletes. Próximo a ella se puede disfrutar de un santuario del siglo XIV y del escenario donde se libró la Batalla del Ebro durante la Guerra Civil.

A través de una agradable ruta de senderismo se puede llegar hasta la Foradada de Cantonigrós. Se trata de una cascada de 15 metros de altura donde el agua emana de las paredes verticales de roca, desembocando en la hermosa poza.

En el curso del río Guadalquivir se pueden encontrar estas espectaculares pozas. Se incrustan en el cañón de la Cerrada del Utrero y están formadas por la cascada de Linajeros, ofreciendo uno de los mejores baños de Jaén.

El recorrido por la Garganta de las Nogaledas permite disfrutar de numerosas piscinas naturales y cascadas. Son perfectas para refrescarse durante las numerosas rutas de senderismo con las que cuenta el entorno.

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