España rechaza e ignora la mayoría de peticiones de asilo: “Quedan en un limbo legal”

Las razones por las que huyen miles de personas hacia Europa en busca de una vida mejor —guerras, violencia, cambio climático, persecución por género— aumentan casi al mismo ritmo que los obstáculos a los que se enfrentan una vez llegan al destino y tratan de solicitar protección internacional.

En España, del total 118.842 personas que pidieron asilo en 2022, solo 14.235 resoluciones de protección internacional fueron favorables, un 16,5%, mientras que 51.838 fueron rechazadas, un 59,5%, según ha informado este lunes la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) que ha reclamado un pacto social y político que blinde el derecho de asilo frente a los “continuos ataques que está sufriendo en los últimos años”.

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CEAR, que ha presentado su XXI Informe Anual: La situación de las personas refugiadas en España y Europa, pide a las formaciones políticas que den prioridad a garantizar el acceso al procedimiento de asilo de forma legal y segura, al tiempo que reclama poner fin a las “deficiencias del sistema de cita previa” para solicitar asilo, pues “condenan a un limbo legal” a miles de personas que esperan una media de entre seis y ocho meses para poder formalizar su solicitud de protección internacional.

Ante la imposibilidad de obtener una cita en el sistema, durante esos meses “se quedan sin derechos, porque no pueden solicitar al acceso de protección internacional o no se pueden empadronar porque muchas veces carecen de documentos”, ha denunciado Estrella Galán, directora general de CEAR, en rueda de prensa. “En definitiva, no pueden acceder a los derechos básicos que tiene cualquier ciudadano”, ha añadido.

CEAR, que ha recordado que seis de cada 10 peticiones de asilo son denegadas en España, cifra en 180.000 las personas que no han podido acceder a una cita para solicitar el estatus de refugiado, pero en realidad esa cifra “está edulcorada”, pues en los márgenes del sistema podría haber otras 80.000 personas más “esperando a que ese teléfono les dé una cita”. “En total podría haber unas 250.000 personas que no pueden acceder a la protección porque no hay recursos suficientes”, por lo que la organización insta a las administraciones a que se desplieguen los medios adecuados “para que la protección en España sea una garantía”.

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Galán también ha precisado que las actuales políticas migratorias “estigmatizan y criminalizan a los migrantes, lo que hace que aumente los discursos de odio”, al tiempo que ha indicado que 1.200 personas han muerto tratando de acceder a las costas españolas en 2022. Esa cifra, sin embargo, también es más elevada, pues otras muchas “desaparecen” y no figuran en ninguna lista. “Hay una ola reaccionaria que nos está invadiendo, vivimos un retroceso en materia de migración, refugio y asilo, en materia de igualdad, de derechos en general, y eso nos debería preocupar”, ha añadido.

CEAR ha recordado que España es el tercer país europeo con más peticiones de asilo, solo por detrás de Alemania y Francia, y el tercero por la cola en cuanto a resoluciones favorables, solo por delante de Malta y Chipre, una cifra que se aleja notablemente del 38% de la media europea.

La Unión Europea, donde viven unos 750 millones de personas, acogió a lo largo de 2022 “a un 0,12% de refugiados, algo menos de un millón”, ha indicado CEAR. “¿De verdad no hay capacidad para acoger a más personas?”, se ha preguntado Galán, que ha considerado que “se puede cuando se quiere” tal y como se ha demostrado con los refugiados de Ucrania tras la invasión de Rusia. En ese sentido, ha denunciado que los “sesgos de intereses y el racismo marcan las decisiones que se van tomando”.

CEAR ha calificado de “excelente” la respuesta que España dio para acoger a refugiados ucranianos al recibir a unas 170.000 personas, lo cual demuestra que “el sistema se flexibilizó para adaptarse”, aclara la organización. Sin embargo, en el otro extremo se sitúa la tragedia ocurrida en junio pasado en Melilla, cuando al menos 37 inmigrantes murieron al tratar de alcanzar las costas españolas. “Nadie ha asumido la responsabilidad y eso en un Estado de derecho democrático es inaceptable”, ha criticado Galán.

Del total de 118.842 personas que solicitaron asilo en España en 2022, más de la mitad son hombres, 64.219, frente a 54.623 mujeres, un 46%. En cuanto al lugar de presentación de esas solicitudes, en la mayoría de los casos se pidió en territorio nacional, 114.434, mientras que el resto se solicitó en puestos fronterizos (2.714), Centros de Internamiento (932) de Extranjeros y embajadas (762).

En ese sentido, la coordinadora del área jurídica de CEAR, Elena Muñoz, ha destacado el derecho a la información del solicitante desde el primer contacto con las autoridades del país y ha lamentado que en la frontera sur de España, en donde es posible solicitar asilo en frontera, no se haya contabilizado ninguna petición en la valla de Ceuta en 2022. Mientras, ha explicado que las peticiones en los CIE se han “duplicado”.

Por otro lado, los países que más solicitudes pendientes de resolución acumulan en el país son Venezuela (24.639), Colombia (21.625) y Perú (7.217), seguidos de Marruecos (4.896) y Honduras (4.641).

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