Cormac McCarthy en el cine: la desigual suerte de Penélope Cruz y Javier Bardem en las adaptaciones de sus grandes obras

El novelista norteamericano, fallecido este martes, dejó un conjunto de obras imprescindibles dentro de la literatura contemporánea y algunas de ellas se llevaron a la pantalla con mejor o peor gloria

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Javier Bardem consiguió el Oscar
Javier Bardem consiguió el Oscar al mejor actor secundario por la película de los hermanos Coen 'No es país para viejos', que adaptaban la novela homónima de Cormac McCarthy

Pocos escritores han sido capaces de describir los monstruos escondidos en la América Profunda como Cormac McCarthy. La visión del mundo que desprendían sus novelas era de auténtico terror, repleta de criaturas que simbolizaban el mal y de visiones apocalípticas sobre el fin de la humanidad. Ha sido uno de los grandes cronistas de la literatura fronteriza, aquella que tiene lugar en un espacio real que casi se convierte en mitológico y que adquiere contornos de pesadilla, porque en él solo encontramos muerte y desolación, violencia salvaje y destrucción.

‘Todos los caballos bellos’

El imaginario de McCarthy es tan rico como crudo y está repleto de reflexiones metafísicas en torno a la naturaleza del ser humano, por eso resultaba tan atractivo a la hora de adaptarlo al cine, como al mismo tiempo complicado dependiendo del nivel de explicitud que pudieran tener las imágenes.

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El primero que se atrevió a trasladar su universo a imágenes fue Billy Bob Thornton en Todos los caballos bellos, que protagonizaría Penélope Cruz, en su primer papel internacional junto a Matt Damon. Con esta novela, McCarthy iniciaría lo que terminó conociéndose como ‘La trilogía de la frontera’ que fue galardonada con el National Book Award. El guion lo firmaba Ted Dally, responsable del libreto de El silencio de los corderos, sin embargo, el filme pasó bastante desapercibido e incluso se llegó a tildar como una adaptación mediocre del gran wéstern moderno de McCarthy.

Matt Damon y Penélope Cruz
Matt Damon y Penélope Cruz en 'Todos los caballos bellos', de Billy Bob Thornton.

Resulta curioso que tanto Penélope Cruz como Javier Bardem debutaran en los Estados Unidos en películas basadas en novelas de Cormac McCarthy y que este último, consiguiera además un Oscar al mejor actor secundario por su escalofriante interpretación de Anton Chigurh en No es país para viejos, que dirigirían los hermanos Coen, que a su vez también estaban emparentados con Billy Bob Thornton después de haber contado con él como actor en varias de sus películas.

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Joel y Ethan Coen sí firmaron una gran película, quizás la que tuvo una mayor repercusión después de Fargo y consiguieron también el Oscar al mejor guion adaptado, solo dos años después de la publicación de la novela de McCarthy. En esta ocasión la fuente literaria no se perdía, sino que adquiría una resonancia telúrica grandiosa, además, el personaje de Javier Bardem pasaría a formar parte del imaginario colectivo para siempre y de manera inmediata.

Visiones cada vez más oscuras del mundo

Viggo Mortensen en la adaptación
Viggo Mortensen en la adaptación del Pulitzer de McCarthy, 'The Road'

En 2009, el director australiano John Hillcoat, experto en propuestas de una gran crudeza expresiva y responsable de buena parte de los videoclips de Nick Cave, se atrevió con el Premio Pulitzer La carretera (The Road), la historia de un padre y un hijo que luchaban por su supervivencia en un mundo repleto de caníbales después de que se hubiera producido un cataclismo medioambiental. De nuevo, una magnífica traslación del texto a las imágenes, de una enorme fuerza visual (la dirección de fotografía corre a cargo del español Javier Aguirresarobe) y una de las historias de amor paterno-filiales en el fin del mundo que se recuerdan.

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Precisamente, de nuevo Hillcoat anunció que se atrevería a llevar a cabo quizás el libro más complicado de adaptar de McCarthy, Meridiano de sangre, por ser también el más salvaje, ya que se basa en las andanzas de un comando de cazadores de cabelleras de indios en el antiguo Oeste que no tienen ni conocen la piedad.

Cerrando el círculo Cruz-Bardem

James Franco, en su faceta como director compuso una película de casi dos horas partiendo de Child’s of God, Hijo De Dios, otra de las grandes novelas de McCarthy que no tuvo prácticamente repercusión a pesar de estar a concurso en el Festival de Venecia.

Y para terminar de cerrar el círculo, Penélope Cruz y Javier Bardem, ya convertidos en matrimonio, participaron juntos en El consejero, de Ridley Scott, la historia de un abogado que decide participar en una operación de tráfico de drogas en la frontera mexicana y todo se terminará complicando. Fue el primer guion en Hollywood que firmó McCarthy sin estar basado en ninguna novela. No salió bien. Aunque la culpa se le echó por entero a Ridley Scott, ya que su forma de plasmar esa mezcla entre thriller y el erotismo con gotas de pulp, era bastante descabellada e incluso irrisoria.

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