El caso Vinicius anima al Ministerio de Inclusión y el CSD a crear un grupo de trabajo sobre el odio en el deporte

El Consejo Superior de Deportes (CSD) y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, a través del Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (OBERAXE), crearán un grupo de trabajo para tratar el odio en el deporte. Según ha anunciado este martes el CSD en un comunicado, esta iniciativa se ha propuesto y ha sido aprobada por consenso en el transcurso de la 14 Reunión del ‘Acuerdo para cooperar institucionalmente contra el racismo, la xenofobia, la LGBTIfobia y otras formas de intolerancia’ que este año preside el CSD y cuya secretaría técnica ocupa de forma permanente el OBERAXE.

En la reunión del acuerdo interinstitucional han participado, entre otros, el presidente saliente del CSD, José Manuel Franco, la secretaria de Estado de Migraciones, Isabel Castro, y la directora del OBERAXE, Karoline Fernández de la Hoz.

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El nuevo grupo pretende realizar un análisis de la situación actual del discurso de odio en el deporte en España, en el ámbito federativo y de clubes en el entorno educativo, así como en el ámbito social y en los eventos. También crear un debate para facilitar a las autoridades los instrumentos necesarios para diseñar una estrategia estatal de lucha contra el odio en el deporte.

Finalmente, buscan promover la concienciación, crear conocimientos y compartir las mejores prácticas sobre los beneficios de la diversidad, así como las medidas eficaces para hacer frente a la discriminación y el racismo en el deporte.

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Luis Rubiales, presidente de la Federación española (RFEF) y su homólogo de la Confederación brasileña (CBF), Ednaldo Rodrigues, presentaron acompañados de los internacionales Rodrigo Moreno y Ansu Fati el amistoso que España y Brasil disputarán en marzo de 2024 en el estadio Santiago Bernabéu, bajo el lema ‘Una misma piel’, en un grito de fútbol contra el racismo. “Estamos muy contentos de anunciar un partido que se gestó a raíz de los altercados violentos, los insultos racistas” que sufrió el brasileño del Real Madrid Vinícius Junior en Mestalla, como había sucedido antes en más estadios españoles, explicó Luis Rubiales.

“Inmediatamente hablé con Ednaldo y el mismo día nos pusimos a trabajar. Teníamos muchas ganas de jugar tras 25 años de Brasil sin venir a España. El fútbol se inventó para disfrutar y no para generar violencia con gente que lo usan como escudo. Admiramos mucho a un país como Brasil, uno de los países que más jugadores ha aportado a nuestro fútbol”, añadió el presidente de la RFEF. La cita entre España y Brasil se disputará en marzo del próximo año en el estadio Santiago Bernabéu, “el escenario ideal para un encuentro de primer nivel entre dos de las mejores selecciones del mundo”, dijo Rubiales.

Y de forma paralela a la celebración del encuentro, la Federación desarrolla “el observatorio de la igualdad” y realizará “unas jornadas de lucha contra la violencia y el racismo en el fútbol” con “protagonistas de peso y gente de primer nivel”. “La clave está en evitar cualquier tipo de violencia, color de piel, orientación sexual, credo. La violencia en el fútbol no tiene cabida. Tenemos un problema de educación y España es un país acogedor, abierto, que acoge a muchísimas nacionalidades. Tenemos la preocupación de hacer todo por atajarlo y vamos a perseguir a los que manchan el nombre de una ciudad tan fabulosa como Valencia y el de todo un país como España que recibe millones de turistas”, aseguró.

Por su parte, Ednaldo Rodrigues dejó un mensaje de unión en la lucha contra el racismo, feliz de lanzarlo en un partido de la grandeza de un España-Brasil, que aseguró paralizará al mundo del fútbol. “Es una felicidad muy grande para Brasil poder jugar en España un partido que completa un ciclo entre dos selecciones grandes que están entre las mejores del mundo. El mensaje debe despertar al mundo, censurando todo tipo de discriminación y el racismo. El fútbol es un deporte que da alegría y no cabe en el fútbol, ni en ningún deporte, el racismo”, manifestó.

“La iniciativa entre las dos Federaciones es lanzar un mensaje juntos. Hay que decir basta y nada mejor que con un partido que se verá en todo el mundo para lanzar un mensaje unidos. Es una alegría para el fútbol mundial purificarlo y alejar a los que lo desprecian con una iniciativa contraria en uno de los mejores partidos en 2024″, añadió. En su experiencia en la CBF, aseguró que lleva 60 años luchando contra el racismo y recordó que su primera decisión fue la creación de un seminario “para combatir cualquier tipo de intolerancia, especialmente el racismo”. Desde ahí se desarrollaron “observatorios del fútbol que trabajan día a día en la lucha contra el racismo”.

Y solicitó que el castigo no sea solo económico. “Las sanciones financieras no son suficientes a los clubes que pagan multas, hay una responsabilidad que debe ser asumida por Federaciones y clubes que deben trabajar en la prevención, sabiendo el daño que hace cualquier tipo de actuación xenófoba o racista”.

Si hay un internacional español de los que actualmente juegan con la selección y que regresa para la disputa de la fase final de la Liga de Naciones, para el que será especial el partido ante Brasil, es Rodrigo Moreno. Brasileño de nacimiento, desea poder estar en el campo en el amistoso. “Sin duda es un gran partido, jugar ante Brasil siempre es especial, el país del fútbol y referencia durante muchos años. Pude jugar contra ellos en un Mundial sub-20 y fue un sentimiento muy especial. Poder estar aquí con España es un orgullo para mí y un reconocimiento muy grande”, reconoció. “El partido es una gran iniciativa de ambas Federaciones y de sus presidentes. Es muy importante utilizar el poder del fútbol para poder denunciar la discriminación en todos los ámbitos de nuestras vidas”, sentenció.

Una información de EFE

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