El adelanto electoral anunciado por Pedro Sánchez, ha provocado que la izquierda haya tenido que llevar a cabo unas negociaciones en tiempo récord para llegar a un acuerdo y concurrir todos ellos bajo las siglas de Sumar. Sin embargo, esto no ha sido nada fácil. Vetos, ha sido la palabra más repetida durante esta última semana, ya que algunas formaciones se mostraban reticentes a que Podemos y, en concreto, a que Irene Montero estuviera presente en las listas. Esto ha provocado que los posibles pactos entre las distintas formaciones de la izquierda con Yolanda Díaz hayan copado los titulares de los medios de comunicación. A ello se suma también el desembarco del nuevo partido de Macarena Olona, Caminando Juntos. Esto ha provocado que Vox haya quedado totalmente eclipsado.
Desde que se produjeron las elecciones municipales y autonómicas del pasado 28-M, al líder de Vox, Santiago Abascal, se le ha visto más bien poco, a pesar de que las elecciones anticipadas apremian y las formaciones ya han comenzado su precampaña. De las pocas noticias que han salido a la luz sobre el partido de extrema derecha son las negociaciones que están llevando a cabo en algunas regiones con el PP para poder gobernar. Además, desde que el presidente del Gobierno anunció el adelanto electoral, los miembros de Vox no han dejado de hacer un llamamiento a la sociedad para que acuda a votar a las urnas. “Mejor perder un día de vacaciones que vivir sumiso cuatro años más”, reza uno de los mensajes difundidos. También han animado a los ciudadanos a votar por correo y en su página web incluso han difundido un comunicado explicando cómo realizar el proceso.
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Más allá de estas cuestiones, no hay grandes noticias respecto a este partido. Hasta el momento, no se ha dado a conocer ninguno de los nombres que concurrirán en las listas de Vox, tampoco se han dado a conocer medidas ni líneas de actuación. De momento, parece que siguen inmersos en los acuerdos municipales y autonómicos, pero a nivel nacional y de cara al 23-J no hay gran movimientos. Y es que, la formación de Santiago Abascal ha quedado atrapada por la vorágine de la izquierda y no es para menos.
Los pactos de Sumar
Tenían poco más de 10 días para ponerse de acuerdo y que todas las formaciones quisieran pudieran concurrir bajo las siglas de Sumar. Y, finalmente lo han conseguido, un total de 15 partidos se presentarán juntos al 23-J con Yolanda Díaz a la cabeza. Pero, para llegar a este punto ha habido muchas presiones, vetos, exigencias y reclamos en las negociaciones. El principal escollo para la ministra de Trabajo ha sido Podemos. Desde el primer momento, sabían que ambos partidos concurrirían juntos, pero los detalles de esta alianza y los nombres de los políticos morados que irían en las listas han sido un gran quebradero de cabeza, en primer lugar porque la presencia de Podemos ya incomodaba a algunas formaciones que también se presentan bajo las siglas de Sumar, como Compromís o Más Madrid, según señaló el expolítico Pablo Iglesias.
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Mientras los partidos de la izquierda iban cerrando sus acuerdos con Yolanda Díaz, el pacto con Unidas Podemos se iba forjando lentamente. El tiempo apremiaba, pero los morados estaban dispuestos a exprimir hasta el último segundo antes de que se cerrara el plazo para registrar coaliciones para concurrir a las elecciones generales del 23-J. La cuestión era si los morados estaban dispuestos a ceder y sacrificar la presencia de Irene Montero en las listas o no. Además, en medio de estas negociaciones, Podemos lanzó una consulta exprés a la militancia sobre el acuerdo con Sumar, cuyo resultado fue un apoyo mayoritario de inscritos a la pregunta “¿Aceptas que el Consejo de Coordinación de Podemos, siguiendo el criterio de unidad que marcó el Consejo Ciudadano Estatal, negocie con Sumar y, en su caso, acuerde una alianza electoral entre Podemos y Sumar?”. Es decir, la formación morada pidió a sus inscritos tener el aval para negociar y decidir un acuerdo con Sumar.
Finalmente, pocas horas antes de que acabara el plazo, Unidas Podemos y Sumar anunciaron que había llegado a un acuerdo. La formación de Ion Belarra se vio obligada a ceder ante las exigencias de Yolanda Díaz e Irene Montero ha sido el precio. Una cuestión que no han dudado en afear los principales políticos morados.
Pero, Unidas Podemos no es la única formación que se ha unido a Sumar para concurrir juntos el 23-J. El resto de formaciones que integran la coalición son Izquierda Unida, Catalunya en comú, Más Madrid, Más País, Compromís, Chunta Aragonesista, Més per Mallorca, Més per Menorca, Verdes Equo, Alianza Verde, Batzarre, Izquierda Asturiana e Iniciativa del Pueblo Andaluz.
Macarena Olona y su nuevo partido
A las negociaciones de la izquierda se suma también otra información que ha estado muy presente en el panorama mediático nacional durante las últimas semas y la decisión de Macarena Olona, expolítica de Vox, de crear un nuevo partido. Tanto dos días después de que Pedro Sánchez anunciara el adelanto electoral, la alicantina sorprendía a todos con su regreso a la política a través de Caminando Juntos, la nueva formación con la que concurrirá al 23-J. La noticia era un secreto a voces, ya que Olona nunca ha escondido su deseo de liderar un espacio alternativo. Según el post que compartió en sus redes sociales, su nuevo proyecto pretende huir de los extremos. “Caminando con el pie izquierdo y con el pie derecho”, es la cita que ha elegido para acompañar a una imagen en la que aparecen un zapato rojo y otro azul.
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Sin embargo, esta no iba a ser la única noticia sobre esta nueva formación. La política alicantina se encontró con dos obstáculos que no esperaba. Días después de inscribir Caminando Juntos en el Ministerio de Interior, este mismo departamento informó a Olona de deficiencias de sus estatutos, las cuales debían ser subsanadas en un plazo. Un escollo que finalmente consiguió solucionar. Y segundo, necesita 21.700 firmas ciudadanas antes del 17 de junio para poder concurrir a las elecciones generales del próximo 23 de julio, cuestión en la que todavía está trabajando. Aunque parece que cada vez está más cerca de conseguirlo, ya que ha anunciado que quiere presentarse en diez circunscripciones: Madrid (dónde necesitaría 6.000 firmas), Barcelona (4.600), Valencia (2.200), Sevilla (1.700), Alicante (1500), Málaga (1.400), Murcia (1.250), Cádiz (1.150), Las Palmas (1.000) y Granada (900), circunscripción en la que irá Olona como cabeza de lista.
En medio de este huracán de noticias política, Vox parece que ha quedado desplazado a un segundo plano. Una situación que Santiago Abascal tratará de revertir, sobre todo de cara a la campaña electoral del 23-J que dará comienzo el próximo 7 de julio. Este es el reto en el que actualmente se encuentra la formación de extrema derecha, evitar que la izquierda y su expolítica les eclipsen y silencien.
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