Yolanda Díaz y Podemos callan mientras la negociación se enturbia: quedan solo dos días para llegar a un acuerdo

La vicepresidenta primera, Yolanda Díaz, y la cúpula de Podemos callan mientras el clima de negociación se ha enturbiado en las últimas horas a cuenta de las voces que apuntan a un veto a Irene Montero, las acusaciones del exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, sobre los Comunes, Compromís y Más Madrid al identificarlos como los escollos para la unidad, y una presunta negociación en la sombra entre Podemos y ERC, delatada por los Comunes, desmentida por los republicanos y ante la que los morados guardan silencio.

A solo dos días de que expire el plazo para registrar las coaliciones (este viernes a las 23.59 horas) para las próximas elecciones generales del 23 de julio, las principales formaciones de la denominada izquierda transformadora siguen sin llegar a un acuerdo de unidad en torno a Sumar. A estas alturas, IU, los Comunes, el PCE, Alianza Verde, Verdes Equo, Iniciativa del Pueblo Andaluz y, más recientemente, Drago Canarias (proyecto que lidera el exdiputado de Podemos Alberto Rodríguez) han confirmado que concurrirán junto a Sumar el 23-J.

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El adelanto de la convocatoria electoral anunciado el pasado lunes, que pilló con el pie cambiado a todos los partidos, así como los diferentes resultados obtenidos por estas formaciones en los territorios, creó un clima favorable de cara a la agrupación de una quincena de formaciones (Podemos, Más Madrid, Compromís o IU, entre otras) bajo el paraguas de Movimiento Sumar.

La sensación de falta de unidad reflejada en Magariños a primeros de abril por la ausencia de Podemos en el lanzamiento de la candidatura de Yolanda Díaz dio un giro de 180 grados el 29-M, un día después del batacazo electoral de la formación morada, que desapareció de la Asamblea de Madrid, la Comunidad Valenciana y Canarias.

“Ya estamos trabajando para ofrecerle a la ciudadanía progresista de este país la noticia que lleva tanto tiempo esperando, para que este espacio político se presente unido a las elecciones y salgamos a ganar. No solo a revalidar el gobierno de coalición sino a gobernar con más fuerza”, reaccionó la líder de la formación morada y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra.

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Pero el silencio que rodeó las negociaciones iniciales y el escenario propenso a la unidad han entrado en otra fase a raíz de la renuncia del líder de IU, Alberto Garzón, de ir en las listas de Sumar, pues esta decisión abrió la puerta a que líderes importantes de Podemos, como Irene Montero, hagan lo propio. De hecho, fuentes de la dirección del partido morado han confirmado a Infobae España que el “principal escollo” en la negociación es la figura de la ministra de Igualdad, al alegar Sumar que su presencia en las listas “resta” más que “suma”, algo que desde el entorno de Yolanda Díaz niegan.

Preguntada por esta cuestión, la coportavoz de los morados, Isa Serra, salió en defensa de la ministra en rueda de prensa, como también hicieron otros dirigentes y representantes de Podemos en redes sociales, y aseguró que “las exigencias, los vetos y las exclusiones torpedean la unidad”.

Más allá de esto, las acusaciones vertidas este lunes por la noche por el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, echaron más leña al fuego al asegurar que Compromís, Más Madrid y los Comunes quieren vetar a los morados en las listas de Madrid, Valencia y Cataluña. “Hay tres actores políticos que entienden que en esos territorios son el único actor que tiene que representar ese espacio político electoral de Sumar”, apuntó en el Ágora de Hora 25.

Tanto la fuerza valenciana como la madrileña desmienten las palabras de Iglesias. “Quiere hacer daño a Más Madrid”, afirman desde el equipo de Mónica García. “La misma independencia que reclamamos nosotros para poner a nuestros candidatos la reclamamos también para las otras organizaciones”, añadió Joan Baldoví.

Ambas formaciones, pendientes de ratificar con sus bases cómo presentarse a las próximas elecciones generales, afirman que en las negociaciones “sí se habla” de puestos en las listas y de su peso en función del resultado electoral en estos territorios, en donde los morados quedaron fuera de los parlamentos. Asimismo, desde Más Madrid enmarcan las declaraciones de su número dos en el ayuntamiento, Félix López-Rey, en una “opinión personal”.

El concejal señaló en un tuit: “Imponer a Irene Montero y Ione Belarra, las Ministras peor valoradas del Gobierno, es un error de Pablo Iglesias que pone en peligro la construcción de una alternativa de progreso. Es tiempo de generosidad y altura de miras. Garzón marcó el camino. ¡Piensen en la gente!”.

Por otro lado, las palabras de Iglesias tuvieron su efecto en el paso dado este martes por los Comunes, al desvelar la formación catalana que la cúpula de Podemos “les ha trasladado que está negociando con ERC para presentarse en coalición” a las elecciones generales. ERC salió al paso al instante para desmentir esta información, pero más de 12 horas después, el partido morado no ha dado señales de vida al respecto. De hecho, desde Sumar aseguran que “desconocían” estas supuestas conversaciones paralelas.

Pese a todo, tanto Sumar como Podemos señalan que las negociaciones avanzan y ven probable que se alcance un acuerdo antes de la fecha límite. La sombra del ejemplo andaluz de Por Andalucía es alargada y se trabaja para evitar una imagen similar, la de una confluencia que nació directamente con grietas. En aras de este acuerdo, fuentes de la dirección de Podemos no descartan que Irene Montero de finalmente un paso a un lado. El cualquier caso, el tiempo apremia para la izquierda a la izquierda del PSOE.

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