Ya hay fecha para el plan favorito de Felipe VI que le convierte en ‘uno más’

Salvo en contadas ocasiones, la agenda de Felipe VI está repleta de actos que requieren de su presencia como rey de España. Obligaciones que forman parte de su puesto, realiza con gran profesionalidad y que, de vez en cuando, coinciden con sus aficiones, haciendo que esa jornada de trabajo sea casi un momento de ocio. Los eventos relacionados con el deporte tienen esa cualidad, especialmente los que están centrados en la vela, una disciplina que practica desde niño y cuya pasión ha heredado de su padre, el rey Juan Carlos.

De todas las citas dedicadas a la vela, hay una que se ha convertido en imprescindible para el marido de la reina Letizia, la Copa del Rey. No solo porque está dedicada a su título, también porque ha participado en ella en innumerables ocasiones. Este 2023 no será una excepción y Felipe estará en la bahía de Palma para volver a subirse al Aifos.

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Tal y como ha desvelado la organización, en esta ocasión se celebrará desde el 29 de julio hasta el 5 de agosto. El plazo de inscripción acaba de abrir, pero entre los participantes ya aparece el Aifos 500, el velero propiedad de la Armada en el que suele participar el Rey como timonel. Como patrón aparece el almirante Jaime Rodríguez-Toubes, compañero de regatas de Felipe VI desde que este tenía 16 años, edad en la que se estrenó en esta misma competición como tripulante en el Sirius II.

A bordo de este velero se puede ver la faceta más cercana y competitiva de Felipe VI, que se convierte en uno más de la tripulación para surcar las aguas que rodean a la bahía de Palma. Cuando vuelve a pisar tierra firme retoma su papel de Rey y entrega la copa al equipo ganador. En esta edición se espera que este momento tenga lugar durante la tarde del domingo 6 de agosto.

El rey Felipe se convierte año tras año en el mejor embajador de esta cita deportiva que tanto disfruta. No solo atrae a curiosos y profesionales de la prensa, también a otros regatistas y socios del Club Náutico de Mallorca que quieren ver de cerca al monarca y, si pueden, competir contra él.

El Rey lleva años buscando el triunfo en las regatas, siempre confiando en su equipo y en su velero, pero es algo que todavía se le resiste. Pese a ello nunca ha perdido la sonrisa y es que es un deporte que disfruta y cuya pasión ha heredado de su padre. Juan Carlos I fue el gran impulsor de la vela a nivel nacional, por él se creó la Copa del Rey y tal ha sido su dedicación que ha llegado a ganar cinco Copas.

Tanto le gusta que a pesar de sus 85 años, sus problemas de movilidad y su ‘exilio’ voluntario en Emiratos Árabes sigue viajando a España para regatear. Así lo hizo el pasado mes de abril, cuando llegó a la localidad gallega de Sanxenxo para participar en una regata del campeonato español de vela a bordó del Bribón.

Pese al entusiasmo que le pone, parece que sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía no van a seguir su legado. Nunca han participado en ningún curso estival de la isla de Mallorca, algo que sus primos Borbón sí han hecho, pues la reina Sofía solía pagar a sus otros nietos, los hijos de las infantas Elena y Cristina, un curso en el Real Club Náutico de Palma.

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