Barcelona, en el aire el 28-M: Colau, los pactos posibles y los “vasos comunicantes” en el independentismo

Las encuestas son contradictorias y, al contrario que en otras plazas, en Barcelona no hay un claro ganador de las elecciones

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Los alcaldables de Barcelona Eva Parera (Valents), Anna Grau (Cs), Jaume Collboni (PSC), Ernest Maragall (ERC), Ada Colau (BComú), Xavier Trias (Junts), y Daniel Sirera (PP), en el debate electoral de Betevé (Europa Press)
Los alcaldables de Barcelona Eva Parera (Valents), Anna Grau (Cs), Jaume Collboni (PSC), Ernest Maragall (ERC), Ada Colau (BComú), Xavier Trias (Junts), y Daniel Sirera (PP), en el debate electoral de Betevé (Europa Press)

Barcelona se enfrenta el domingo a una batalla electoral completamente incierta. Los ciudadanos de la ciudad condal podrán elegir entre decenas de fuerzas pero tan solo seis, siempre según las encuestas, tienen posibilidades reales de obtener representación.

En el Ayuntamiento de Barcelona sigue gobernando Ada Colau a pesar de que no logró revalidar la primera posición en 2019 y fue adelantada por ERC. Sin embargo, la plataforma liderada por Manuel Valls permitió gobernar a los comunes, para evitar que el independentismo se hiciera con la alcaldía de la capital de Cataluña.

Los partidos que llegan más fuertes a las urnas son el PSC, Junts per Catalunya y En Comú Podem. Según todas las estimaciones de votos, estas opciones son las preferidas por la mayoría de barceloneses para gobernar durante los próximos cuatro años el Ayuntamiento de Barcelona.

“La clave estará quién quedará primero”, afirma Toni Aira, profesor de Comunicación Política en la UPF-Barcelona School of Management. Aira sostiene que “seguramente, de no haber posibilidad de sumas de bloques, dejarán gobernar a la lista más votada, al final de año hay elecciones y, es posible que a mediados de 2024 en Cataluña también. Los partidos no querrán mojarse”, apunta. Sin embargo, Pau Torres, politólogo de Passes Perdudes, mantiene una tesis diferente: “Creo que sí son posibles los pactos, es más, estratégicamente es positivo hacer coaliciones porque evitas, en gran medida, el desgaste y neutralizas a parte de la oposición”, sostiene.

A pesar de algunas discrepancias entre los diferentes barómetros, es posible sacar algunas conclusiones interesantes que nos permitan conocer la realidad actual de la ciudad condal. A partir de las investigaciones sociológicas podemos concluir que quién saldrá más debilitado será ERC, que perdería tres representantes, pasando de la primera fuerza, a la cuarta. Por el contrario, Junts per Catalunya sería el más beneficiado de la caída de la izquierda independentista.

En base a lo publicado por las encuestas, Xavier Trías pasaría de los 5 a los 10 concejales, doblando el resultado de hace 4 años. Este fenómeno se produce “por los vasos comunicantes que existen entre ambas fuerzas independentistas”, sostiene Aira, “en Cataluña, cuando Junts está fuerte, ERC cae y ocurre lo mismo al revés”, concluye.

“El votante de Colau es urbanita, joven, universitario y se informa por medio de las redes sociales”

Para el profesor de comunicación política de la Universidad Pompeu Fabra, la realidad electoral en el independentismo ha cambiado radicalmente con respecto a 2019. “En las anteriores elecciones, Junts presentó a Joaquim Forn -encarcelado por el procés- y de número 2 estaba Elsa Artadi, que de facto iba a ser la alcaldesa de Barcelona en caso de ganar, pero no funcionó, en aquel momento, el independentismo apostó por Maragall”, expone. “Esta claro que el paradigma ha cambiado radicalmente en todos los aspectos, tanto dentro del independentismo, como en el eje izquierda-derecha”, apunta Ramón Mateo, director de análisis e impacto regulatorio de BeBartlet.

Ahora las tornas han cambiado, Xavier Trias “es un perfil más pragmático, pertenece a ese ala de Junts que no cree que el debate de la independencia deba estar todo el rato presente”, es más, “Trias se presenta con Junts porque sabe que es imprescindible contar con el respaldo de un partido para ganar las elecciones y Junts sabe que es un candidato que les puede devolver la alcaldía. Sin embargo, estamos viendo como no aparece por ningún lado la marca del partido, lo que venden es Trías, Trías y más Trías”, añade Torres. “Lo que pretende Junts es beber del votante que está polarizado respecto a la figura de Colau”, termina por completar el responsable de BeBartlet.

En clave interna, Trias también se la juega: “Si sale victorioso de estas elecciones, en Junts cogerán aire los sectores que abogan porque la independencia no lo sea todo”, sostiene Ángel Muelas, codirector de Ideas en Guerra. “Ahora el objetivo de Trías y de ese sector es el de recuperar al votante de CiU”, apunta Toni Aira por teléfono a Infobae España.

Collboni o Colau

Quién más se juega el 28-M es En Comú Podem. Ada Colau lleva ocho años en la alcaldía y aspira a revalidar la el poder frente a un PSC imparable en las encuestas y un Junts que no se quiere quedar atrás. A pesar de que los barómetros la posicionan, en muchas ocasiones, como la tercera fuerza política, muchas otras encuestas proyectan, casi, un triple empate y otras como el CIS sitúan a Colau como la ganadora en la ciudad de condal.

“Lo que esta claro es que 8 años de gobierno pasan factura y se nota el desgaste de Colau”, explica Pau Torres. El votante de Colau responde a un perfil “urbanita, joven, universitario, que se informa en redes...”, define el codirector de Ideas en Guerra. Además, “en esta campaña está haciendo un esfuerzo por dirigirse a otro tipo de electorado, está hablando más en castellano para captar el voto de los recién llegados a Barcelona o de los latinoamericanos, un votante al que no llega Trías”, añade Torres.

Por otro lado, En Comú Podem “es el único partido que está proyectando que tiene un plan para ciudad, como votante te puede gustar más o menos, pero ha demostrado que tiene proyecto”, apunta Muelas, “los demás candidatos solo expresan su oposición al proyecto de los comunes, pero no logran especificar qué quieren hacer con Barcelona los próximos 4 años”, concluye Torres, politólogo de Passes Perdudes.

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Toni Aira sigue con esta idea de Torres: “Colau, se está viendo en los debates, está mucho más cómoda en esta campaña, que en 2019, tiene más cosas que vender, han sido 8 años en la alcaldía”. El profesor señala que “Colau es un animal político y comunicativo”, que, “aunque es una figura que provoca opiniones muy polarizadas, sabe utilizar muy hábilmente las opiniones que genera. La idea de la camiseta parodiando la famosa frase sobre que toda la cumpla la tiene Yoko Ono y que esté tachado su nombre y ponga Ada Colau, es solo un ejemplo”, sostiene el politólogo.

Además, apunta Ramón Mateo, “con esta vuelta electoral sabremos si el espacio a la izquierda del PSOE es capaz de mantener sus últimos bastiones. Están en juego Valencia, Cádiz y, por supuesto, Barcelona”. En los tres municipios, las fuerzas que tomaron el poder en 2015 se juegan el futuro de su espacio político tras la caída en 2019 de la plaza más importante, Madrid. “En Comú Podem y su espacio, al final, también se juegan mucho”, termina por apuntar Mateo.

Yolanda Díaz participa en un acto con la camiseta comercializada por En Comú Podem parodiando la famosa frase de Yoko Ono.
Yolanda Díaz participa en un acto con la camiseta comercializada por En Comú Podem parodiando la famosa frase de Yoko Ono.

En enero, Jaume Collboni decidió salir del gobierno municipal, un movimiento que muchos militantes no entendieron pero que Toni Aira explica como la fórmula que “le está permitiendo erigirse como una alternativa real a Colau”, apunta. “Collboni, al final, lo que está intentando es transmitir que un gobierno del PSC será todo lo bueno que tiene el de Colau, pero sin ella. Está aprovechando la parte buena de ser el socio minoritario de un gobierno”, mantiene el responsable de BeBartlet.

El candidato socialista “ha estado en segundo plano durante cuatro años y quiere aprovechar el que no se le relacione con los fallos del gobierno municipal”, sostiene Muelas. “Aunque es un arma de doble filo, porque no puede explotar los logros del gobierno, veremos el 29 de mayo si le ha funcionado”, termina por zanjar el profesor de la Universidad Pompeu Fabra.

“ERC siempre tendrá la espina clavada de no haber podido gobernar Barcelona”

Según las encuestas, la decisión de abandonar el ejecutivo municipal tendrá un resultado positivo porque “el PSOE pasa por un buen momento de marca a nivel estatal”, añade Torres, “a pesar de no ser un candidato demasiado carismático”, completa Aira. “El PSOE ve a Barcelona como su posible gran bastión electoral frente a Madrid, lo que le permitiría gobernar una gran ciudad y comparar modelos con el PP”, concluye Pau Torres.

ERC, cuarta fuerza política

La batalla en el independentismo también se libra en las elecciones municipales y, en concreto, en Barcelona. Mientras que en 2019 ERC dobló en escaños a Junts per Catalunya, esta vez, todo apunta a que cambiarán las tornas en favor de los de Trías. Para Aira “no es ninguna novedad que ERC salga débil en Barcelona”. Pau Torres incide en la idea: “Creo que ERC no pasa por su mejor momento en Cataluña, está gobernando en una minoría muy precaria”, señala el politólogo de Passes Perdudes.

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Sobre la caída de ERC, Torres apunta al candidato: “Puede que no sea el mejor candidato. En Barcelona Maragall ya tiene un desgaste importante”, aunque no hay que olvidar que “podrían tener la llave del gobierno, a izquierdas o en clave independentista”, recuerda Ángel Muelas, aunque Ramón Mateo descarta la posibilidad: “Me cuesta creer que el independentismo vuelva a pactar, se han roto todos los puentes”. Lo que está claro es que ERC “siempre tendrá la espina clavada de haber sido la primera fuerza en la capital de Cataluña y no haberla gobernado”, concluye el profesor de la Pompeu Fabra.

En clave autonómica, Toni Aira vislumbra las elecciones municipales en Cataluña como un termómetro electoral para ERC, “estos comicios servirán para saber si ERC se está quedando solo, igual que en el Parlament, o les ayudará a matizar esa idea en positivo”

La derecha españolista casi desaparecida

Históricamente, en Barcelona la derecha españolista ha sido un espectro político “de mucho movimiento y poco espacio” define Toni Aira. Con respecto a la desaparición de Ciudadanos y la entrada en la arena política de la ultraderecha, Torres sostiene que Vox “está en un momento de efecto contagio en el que aún no ha tocado gobierno y puede beneficiarse de hacer oposición”. Ángel Muelas va más allá, afirma que la poca fuerza con la que entrarían en el Ayuntamiento de Barcelona los de Abascal -1 representante, e incluso, ni entrar- constata que “las plazas municipales constituyen un ecosistema propio” y recuerda que “en las elecciones autonómicas, Vox quedó muy por encima del Partido Popular”, en cambio, esa fuerza de la ultraderecha a nivel municipal “es casi inexistente”, termina el codirector de Ideas en Guerra.

En definitiva, señala Ramón Mateo, “Barcelona será una plaza fundamental”, en unos comicios a los que llegamos “en un contexto muy diferente al que teníamos previsto hace un año. No serán unas elecciones de cambio de ciclo generalizado, sino que deberemos analizar plaza a plaza y autonomía a autonomía”, concluye Mateo.

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