Guía de una mesa electoral en las elecciones del 28M: funciones del presidente, cuánto pagan por dieta y qué pasa si el suplente no se presenta

Si este 28 de mayo ha sido seleccionado para formar parte de una mesa electoral es imprescindible que conozca sus principales funciones como presidente o vocal de la mesa.

Entre sus tareas estará comprobar que las urnas facilitadas por la administrción no están deterioradas y que hay papeletas suficientes. Además, deberá controlar el proceso de votación y participar del recuento y escrutinio de los votos.

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Tal y como ya hemos contado en Infobae España, las mesas electorales están compuestas por tres personas: un presidente y dos vocales. Todos los participantes de la mesa tienen derecho a una retribución de 70 euros cada uno, libres de impuestos, además de una reducción de jornada de cinco horas del día siguiente. La administrción, durante la jornada electoral, te protege bajo el sistema de la Seguridad Social ante posibles accidentes o diferentes situaciones. Como curiosidad, tal y como se expone en la ley, los miembros de una mesa electoral no pueden ser detenidos por ninguna autoridad salvo en caso de cometer un “flagrante delito”.

A las 8 de la mañana todos los integrantes de la mesa electoral -los suplentes también- deben presentarse en el colegio electoral. Un vez quede acreditada la presencia de dos vocales y un presidente, aquellos que queden liberados podrán abandonar el local electoral y solicitar formalmente un justificante de asistencia.

A esta hora también están citados los interventores, estos deben acreditarse ante los presidentes de la mesa electoral. Una vez todos los roles acreditados, la presidencia de la mesa debe firmar el acta de la constitución junto a los dos vocales.

Es imprescindible, tal y como explica la guía para los miembros de la mesa distribuida por la Junta Electoral Central, comprobar que no están ni manipuladas ni deterioradas. Además, los miembros de la mesa deberán asegurarse de que se cuenta con las urnas correctas y que cada una de ellas está diferenciada para evitar confesiones. El próximo 28 de mayo se celebran elecciones municipales y autonómicas, pero en algunos territorios se introducirán más de dos papeletas, en Canarias, por ejemplo, también se elige Cabildo.

Las urnas deben estar en buen estado, cerradas y precintadas, de no estar disponibles o en buenas condiciones, se debe notificar a la Junta Electoral de Zona, que se encargará de subsanar el problema a la mayor brevedad. Además, se debe comprobar que hay disponibles tanto papeletas como sobres, tanto en las mesas, como en las cabinas de votación.

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La presidencia debe inaugurar la votación con la frase: “Comienza la votación”. Durante todo el proceso, deben estar presentes, al menos, dos miembros de la mesa para que los electores puedan hacer uso de su derecho al sufragio, por eso, se permite la ausencia de uno de los miembros en “momentos puntuales”.

`Para que los electores puedan votar, los miembros de la mesa deben identificarlos. En ningún caso se aceparán fotocopias del DNI. Una vez identificado, uno de los miembros de la mesa apunta el nombre y los apellidos del elector y el número con el que el votante figura en el censo electoral. Por otro lado, se tachará del censo al votante para que no pueda introducir más votos.

Una vez que el reloj marque las 20.00 solo podrán ejercer su derecho al sufragio aquellos electores que permanezcan dentro del centro electoral. Después, se introducen en la urna los votos de los electores que han participado por correo. Por último, los miembros de la mesa y los interventores depositan su voto en la urna.

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Una vez que todos los componentes de la mesa han tenido la posibilidad de votar, se procede al recuento manual de los votos. En primer lugar, se cuentan las papeletas de las elecciones locales y después, los votos de las autonómicas. Una vez queda abierta la urna, la presidencia de la mesa es la encargada de abrir los sobres y enseñarle a los interventores, vocales y apoderados el sentido del voto, además de anunciar cada papeleta en voz alta.

Para evitar fraude electoral, las papeletas deben conservarse para comprobar que el número de votos coincide con el número de votantes, demás será necesario separar los votos nulos de los votos en blanco para el recuento final. Según finalice el recuento, se deben anunciar los resultados en voz alta y se deben entregar copias de estos a cada representante de cada candidatura y a todo interventor o apoderado que lo solicite.

La presidencia de la mesa, debe llevar toda la documentación al juzgado. En todo momento, será acompañada por agentes policiales, donde deberá entregadar dos sobres diferenciados.

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En el primero los documentos originales usados durante el día, en un segundo sobre se deben incluir copuas de las actas de constitución de la mesa electora y acta de la sesión. Los miembros de la mesa electoral deberán preparar un tercer sobre, con una copia de los mismos documentos que del segundo. El tercer sobre lo recoge un empleado de Correos que acude al colegio electoral, uno de los vocales es quién le entrega el tercer sobre.

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