Las subvenciones que los gobiernos conceden a patronales y sindicatos varían a lo largo de los años y dependen, en muchos casos, de los partidos que gestionen la administración y su sintonía con cada organización. Sin embargo, existe un fenómeno generalizado tras la pandemia: el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha elevado las partidas públicas de 2021 y 2022 destinadas a los interlocutores sociales, en gran medida, a cargo de los fondos de recuperación europeos.
Según los datos disponibles en el Sistema Nacional de Publicidad de Subvenciones y Ayudas Públicas, dependiente del Ministerio de Hacienda, el Gobierno ha concedido un total de 82,08 millones de euros en los dos últimos años a las patronales y sindicatos más representativos, un 168% más que en 2018 y 2019. La confederación empresarial liderada por Antonio Garamendi, CEOE, se lleva 34,02 millones y la organización sindical encabezada por Pepe Álvarez, UGT, 31,30 millones. Dichas cuantías suponen un incremento del 405,95% y del 136,36%, respectivamente, en comparación con los importes concedidos en los dos años anteriores a la pandemia (2018 y 2019), ya que en 2020 se produjo un descenso por la situación derivada de la crisis sanitaria.
Les sigue de lejos la confederación de la pequeña y mediana empresa integrada en CEOE y presidida por Gerardo Cuerva, Cepyme, con 10,21 millones concedidos en 2021 y 2022, y en último lugar se sitúa CCOO, presidida por Unai Sordo, con 6,55 millones. No obstante, este último puesto de CCOO es temporal, al igual que el segundo puesto de UGT por detrás de CEOE, ya que aún no aparece en la base de datos la concesión de 2022 de la ayuda anual a la acción sindical, la cual también ha tenido incrementos presupuestarios en los últimos años.
Más allá de posibles variaciones en el ranking y en la cuantía total de 2022, las partidas que destacan por encima del resto son dos concesiones directas del Ministerio de Educación y Formación Profesional a los “interlocutores sociales” para la digitalización del sector productivo. La primera convocatoria de esta subvención data de diciembre de 2020 y la segunda, de diciembre de 2022, es una réplica de la anterior en el contenido con la novedad de que aparece enmarcada en el Plan de Recuperación y financiada por los Fondos Next Generation.
El reparto de la subvención, concedida en 2021 y 2022, ha sido de 30,63 millones para la CEOE; 20,42 millones para UGT y 10,21 millones para Cepyme. La gran ausente en esta convocatoria es CCOO, que decidió no participar en el reparto. Según explican los decretos de las ayudas publicados en el BOE, cada una de ellas tiene el objetivo de que 125.000 trabajadores realicen acciones formativas de 30 horas en digitalización antes del inicio de 2025. Las personas que reciban la formación pueden ser de cualquier ámbito o sector sin requisito de pertenencia o afiliación a las organizaciones beneficiarias y estas pueden subcontratar hasta el 70% del importe de la actividad subvencionada.
Ayudas para fomentar el diálogo social
Esta etapa de récord en subvenciones coincide con un clima de entendimiento en el diálogo social, salvo algunas excepciones. Patronal y sindicatos han firmado 17 acuerdos con este Gobierno, siendo los más sonados la reforma laboral de 2021, los ERTE durante la pandemia y las subidas del SMI, aunque los empresarios solo firmaron la de 2020.
Además de las ayudas vinculadas a los fondos europeos, también hay notables cuantías por labores de representación ante la administración y de acción sindical y empresarial. La CEOE ha recibido del Ministerio de Trabajo una subvención para la realización de planes de formación en negociación colectiva y diálogo social (1,67 millones en 2021) y otra para compensar sus participaciones en órganos consultivos del ministerio (3,82 millones en 2018, 2019 y 2021).
Cepyme no recibió importes directamente del Gobierno por ninguno de estos conceptos entre 2018 y 2022, pero sí lo hicieron los sindicatos. UGT y CCOO participaron en los planes de formación mencionados, recibiendo 5,80 millones en 2019 y 2021 y 1,69 millones en 2019, respectivamente. También se concedieron pagos por las labores consultivas, como a la CEOE, a lo que se suma que el Estado les concede una ayuda anual por el ejercicio de la acción sindical en función de su representatividad.
En la última concesión que aparece desglosada sobre esta ayuda, de 2021, CCOO recibió 5,29 millones y UGT 4,70 millones, diferencia debida al peso obtenido por cada una en las elecciones sindicales. Además, el Ejecutivo aumentó la partida total para esta subvención de los 13,88 millones de 2021 a 17 millones en 2022, por lo que lo recibido el pasado año por ambos sindicatos será más que en años anteriores.
Este presupuesto supone una cifra récord para la subvención de acción sindical, ya que se encuentra algo por encima de los importes de los gobiernos socialistas de José Luis Rodríguez Zapatero, de 15,80 millones de euros anuales. La subvención vivió sus años más austeros entre 2013 y 2020 -la mayoría bajo gobiernos del PP- con una dotación anual de 8,88 millones.
Ingresos por afiliación
La CEOE, consultada por Infobae España, incide en que las subvenciones citadas corresponden a programas finalistas o labores de representación y que los ingresos para sostener la organización provienen sobre todo de las cuotas de los afiliados. Según sus últimas cuentas anuales publicadas, los ingresos por cuotas, aportaciones y otros ascendieron a 12,86 millones de euros en 2021.
UGT se remite a sus cuentas anuales publicadas, en las que detallan 10,89 millones de ingresos propios en 2021, y desde CCOO explican que las subvenciones tienen “una eficacia y alcance general” en la sociedad, no solo en los afiliados. “No es lógico que esta actividad sindical se financie exclusivamente por los afiliados de las organizaciones sindicales”, defiende la secretaria de Finanzas, Administración y Servicios de CCOO, María Cardeñosa. Pese a la ley de transparencia, este sindicato no publica sus cuentas anuales en abierto, solo documentos con subvenciones concedidas, por lo que no es posible dar el dato de ingresos por cuotas de la confederación.
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