Quién mató a José Antonio Primo de Rivera: así murió

Fue fusilado en la cárcel de Alicante el 20 de noviembre de 1936

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Tumbada de José Antonio Primo de Rivera en el Valle de los Caídos, en San Lorenzo del Escorial (REUTERS/Violeta Santos Moura)
Tumbada de José Antonio Primo de Rivera en el Valle de los Caídos, en San Lorenzo del Escorial (REUTERS/Violeta Santos Moura)

Los restos de José Antonio Primo de Rivera, fundador de la La Falange, han sido exhumados este lunes de su tumba del Valle de los Caídos (ahora denominado Valle de Cuelgamuros) y trasladados a la tumba familiar del cementerio madrileño de San Isidro. La única condición que ha puesto la familia para llevar a cabo este traslado es que los gastos corran a cargo del Gobierno.

Se trata de un traslado que la familia de Primo de Rivera solicitó en octubre del año 2022 al Abad del Valle de los Caídos, así como a la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid. Además, pidieron que fuera un proceso íntimo y discreto y que no se convirtiera en una “exhibición pública propensa a confrontaciones de ninguna clase entre españoles”. Y así es como se ha llevado a cabo la exhumación durante la mañana de este lunes. El dictador llevaba enterrado en el Valle de los Caídos desde el año 1959 por orden de Franco

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José Antonio Primo de Rivera fue encarcelado en marzo de 1936 en la cárcel de Alicante y pocos meses después del inicio de la Guerra Civil, el 20 de noviembre, fue fusilado por conspiración y rebelión militar por el bando republicano. Sin embargo, Franco decidió ocultar la muerte de éste durante dos años, hasta el 18 de julio de 1938.

La noticia del fusilamiento llegó rápidamente al bando sublevado, ya que los medios republicanos publicaron la sentencia emitida contra el fundador de la Falange. A pesar de ello, no se llevó a cabo ningún anuncio oficial de la muerte de Primo de Rivera. Ya en 1938, con el segundo aniversario del “alzamiento”, se comunicó de forma oficial y en un discurso de Franco emitido en RNE éste le otorgó el título de “mártir glorioso de nuestra cruzada”.

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Entierro en el Valle de los Caídos

Tras finalizar la guerra, el cuerpo de José Antonio Primo de Rivera fue recuperado y trasladado al Monasterio de El Escorial, donde fue enterrado el 29 de noviembre de 1939. Sin embargo, 20 años más tarde, en marzo de 1959 Franco dirigió una carta a los hermanos de Primo de Rivera donde les comunicaba que la basílica del Valle de los Caídos había sido terminada y les expresó sus deseos que los restos de fundador de la Falange fueran trasladado a dicho emplazamiento.

Los hermanos de Primo de Rivera aceptaron la idea del generalísimo y, desde entonces, los restos descansan en dicha basílica. Hasta hoy. El madrileño cementerio de San Isidro será el cuarto lugar, contando los dos años que permaneció en Alicante, en el que los restos de José Antonio Primo de Rivera descansarán.

Ley de Memoria Democrática

La nueva Ley de Memoria Democrática, aprobada en 2022, establece que en el Valle de Cuelgamuros podrán yacer los restos de personas fallecidas en la Guerra Civil. Sin embargo, detalla que en ningún caso podrán ocupar un “lugar preeminente en el recinto”, como es el caso de Primo de Rivera, quien se encontraba enterrado a los pies del altar mayor de la basílica.

Así, ante el inminente movimiento de los resto del fundador de la Falange, su familia ha optado por cumplir con la voluntad de éste de ser enterrado en un cementerio católico para que reciba una sepultura conforme al rito de la Religión Católica, Apostólica, Romana que profeso en tierra bendita y bajo el amparo de la Santa Cruz.

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