Así se ganó Fernando Alonso a Yuki Tsunoda para siempre: “Intenté no hacer el ridículo, pero mi corazón estaba exultante”

Fernando Alonso es uno de los pilotos de Fórmula 1 más respetados. Con él, se cumple a rajatabla aquello de que la veteranía es un grado, ya que la admiración hacia el español no conoce límites. No sólo entre los aficionados, sino también dentro del paddock del Gran Circo. Así ha vuelto a quedar demostrado con las últimas declaraciones de uno de los compañeros de profesión y rivales del bicampeón del mundo, Yuki Tsunoda.

El japonés, al volante de uno de los AlphaTauri en el presente Mundial, nunca ha escondido que Alonso es su gran ídolo. Sin embargo, Tsunoda ha ahondado aún más en esa predilección por el asturiano en el podcast oficial de la Fórmula 1, Beyond the Grid. Tal y como ha apuntado, el flechazo con el pilotaje de Alonso fue instantáneo: una constante en su niñez, desde los siete años.

Tsunoda no se quita de la cabeza una carrera en Suzuka, cuando tenía 12. “Soy fan de Fernando porque mi padre le admiraba. Nos sentábamos en la tribuna de la última curva, que no es un punto fácil porque no se puede ir a fondo fácilmente. Mi padre me mostraba cómo Alonso la trazaba al máximo por fuera, muy cerca de la línea blanca. Y ahí si tocas la hierba te vas directo al muro. Pero él iba consistentemente pegado a la línea blanca, con mucho movimiento de la trasera del coche”, recuerda.

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Años después, Tsunoda no ha dejado de idolatrar a Alonso, intentando aprender lo máximo posible de él. De hecho, el nipón no ha dudado en analizar la conducción del ahora líder de la escudería Aston Martin cuando ha podido sacar algún aprendizaje valioso de ella. Así lo hizo en 2021 tras el Gran Premio de Hungría.

“Fue la carrera en la que Lewis (Hamilton) empezó él solo en la parrilla y todos entraron a boxes. Por su estrategia equivocada, tuvo que tratar de adelantar a todos. Cuando llegó hasta mí, lógicamente, intenté defenderme todo lo posible, pero me pasó como en cuatro vueltas”, relata Tsunoda. También entonces, Alonso le dejó anonadado.

“Fernando estaba entonces en Alpine, con un coche que tenía el mismo rendimiento más o menos que mi AlphaTauri: estuvo defendiéndose 10 vueltas de Lewis. No recuerdo si consiguió pasarle al final (el español lo consiguió). Volví a ver después esa carrera porque Alonso me impresionó”, ha revelado ahora Tsunoda.

Al revisar aquella prueba, intentó “entender la forma en la que trataba de sacar ventaja al Mercedes, incluso aunque era un coche más rápido”. Una vez más, el saber hacer de Alonso en la pista le había dado unos réditos inmejorables: “La última curva de Hungría es muy difícil, porque necesitas downforce y no puedes estar muy cerca del coche de delante por el aire sucio, y eso Fernando lo sabía. Trataba de ganar lo más posible en las últimas curvas para aprovechar eso y que no pudiera pasarle en la 1 o la 2, que es donde normalmente hay alguna opción”.

Tsunoda aprendió la lección gracias a su ídolo y decidió aplicarla en el Gran Premio de Turquía. “Allí tuve que defenderme de nuevo de Hamilton y lo hice diferente, intentando imitar lo que hizo Fernando. Y pude defenderme durante ocho vueltas esta vez”, apunta con orgullo. El mismo que siente al compartir pista con un Alonso al que siempre quiso parecerse: “Aún no me creo que corra con él, es increíble. Nunca lo hubiese esperado”.

Si tuviese que elegir un momento vivido junto al asturiano, “muy amable, un gran chico”, Yuki Tsunoda tiene claro cuál escogería. “Hemos cambiado el casco, algo que yo deseaba incluso desde antes de ser piloto de Fórmula 1. Pero estaba demasiado nervioso para pedírselo, así que nunca fui a decírselo. Pero el año pasado, sobre el Gran Premio de España, me lo pidió él”, ha desvelado.

La sorpresa por el gesto que tuvo Fernando Alonso con él fue descomunal para Tsunoda: “Me explotó la cabeza. Estaba superfeliz, intenté no hacer el ridículo delante de él, pero mi corazón estaba exultante. Lo primero que hice fue llamar a mi padre”.

Si el japonés ya tenía a Alonso en un pedestal desde que el automovilismo entró en su vida, el concepto que tiene de él es aún mejor ahora que comparten parrilla en la Fórmula 1. “Tenía una imagen distinta de él antes de conocerle. Esperaba que fuese algo así como una leyenda, y no tan cercano como es”, ratifica Tsunoda. Eso sí, reconoce que su coche “está un poco lejos para luchar con él”, que es lo que le gustaría para lograr la cuadratura del círculo con el español.