Los presuntos agresores de dos niñas en Logroño abusaron de las menores en un piso abandonado que solían usar para hacer botellones o fumar porros, situado en la avenida de Navarra de la capital riojana. La vivienda está en un inmueble muy céntrico, pero en muy mal estado, donde otros apartamentos también están abandonados, otros ocupados ilegalmente y varios de ellos habitados por miembros de una misma familia de etnia gitana. En el edificio se trapichea con droga, según fuentes policiales.
La investigación deja, de momento, cinco detenidos de entre 14 y 17 años. Todos han declarado este miércoles ante la Fiscalía de Menores. El juez ha ordenado el internamiento en régimen cerrado para dos de los acusados, y ha dictado orden de alejamiento y prohibición de comunicarse con las víctimas para los otros tres. Hay otros dos participantes de la agresión que son inimputables al no tener todavía los 14 años. Justo la edad de las dos víctimas, dos niñas de 12 y 13 años.
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Los hechos ocurrieron la tarde noche del domingo, en esa vivienda situada en la planta baja. Tras conocerse por Instagram, los agresores quedaron con las dos chicas en una calle aledaña. El grupo condujo a las dos niñas hasta el número 16 de la avenida de Navarra, una vivienda ahora vacía pero que hace años era la residencia del portero del edificio. Ahora los jóvenes la utilizaban como su local de reunión. De hecho, tenían tapiadas las ventanas con tablones para que no se viera lo que ocurría en el interior.
Una chica lo denunció
Tras la agresión, una de las menores relató lo sucedido a una patrulla de la Policía Local de Logroño. Varios coches policiales se desplazaron inmediatamente hasta el lugar, donde pudieron identificar a una decena de menores que todavía se encontraban en esa casa abandonada de la planta baja. El caso lo lleva ahora la Policía Nacional, que mantiene abierta la investigación.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha relacionado este miércoles en una entrevista en RNE el aumento de este tipo de agresiones sexuales, cometidas por menores, con un incremento del número de las denuncias, la visibilización de los casos de la violencia sexual y la mayor confianza en las instituciones.
El 016 es el teléfono de atención a las víctimas de violencia machista. Está disponible 24 horas al día, los 365 días al año. La llamada es gratuita y no deja huella en la factura.