Ana Obregón y Lequio se enzarzan por el testamento ológrafo de su hijo: ¿qué es este documento en el que Aless habría expresado su última voluntad?

El colaborador de ‘El programa de Ana Rosa’ ha recalcado que ese tipo de documento hereditario debe plasmarse por escrito y no de forma verbal

Guardar
Ana Obregón y Alessandro Lequio, en una imagen de archivo. (EUROPA PRESS)
Ana Obregón y Alessandro Lequio, en una imagen de archivo. (EUROPA PRESS)

Alessandro Lequio ha guardado un misterioso silencio desde que se conociera que Ana Obregón ha hecho realidad la última voluntad de su hijo Aless antes de morir: ser padre. El italiano ha mantenido un perfil discreto en esta historia, aunque sus escuetas intervenciones dejan entrever que entre él y su expareja existe un total desacuerdo con respecto a la paternidad póstuma de su hijo.

Después de que la actriz haya hecho referencia en su exclusiva en ‘Hola’ al testamento ológrafo de su hijo, el colaborador de ‘El programa de Ana Rosa’ ha querido matizar esas declaraciones y aclarar que ese tipo de últimas voluntades deben plasmarse por escrito.

Era la periodista Paloma García Pelayo quien recordaba las palabras de Ana: “En las primeras declaraciones oficiales de aquella entrevista, ella dice ‘su padre Alessandro y yo estuvimos presentes cuando Aless nos pidió que quería tener descendencia’. Ella lo califica como testamento ológrafo y Ana pone a Alessandro en su boca en ese momento”, explicaba.

El italiano respondía entonces con contundencia: “Solo un matiz, creo que se equivoca porque un testamento ológrafo es un testamento escrito, no hablado. Es un matiz importante”, sentenciaba.

De esta manera, Alessandro daba a entender que, si bien podía ser cierto que él estuviera presente cuando su hijo expresó su voluntad de ser padre, esto no podría recibir la calificación de testamento ológrafo puesto que ese deseo no llegó a refrendarse en un documento escrito.

¿Qué es el testamento ológrafo?

Aless Lequio, en una imagen de archivo. (EUROPA PRESS)
Aless Lequio, en una imagen de archivo. (EUROPA PRESS)

Tal y como recordaba García Pelayo, Ana Obregón ha justificado su cuestionado acto asegurando que sólo ha cumplido la última voluntad que su hijo expresó en su testamento ológrafo. Pero, ¿realmente dejó Aless tal testamento antes de morir?

Hace unos días, ‘Sálvame’ preguntaba a la protagonista si haría público ese documento en el que se reflejan las últimas voluntades de su hijo, pero ella lo negaba tajante: “¡Madre mía! El testamente ológrafo es un documento privado. Pero ¿Desde cuándo se enseñan los testamentos? Por favor ¿Qué es esto?”.

Sea como fuere, lo cierto es que la ley establece unos requisitos muy claros para dejar un testamento ológrafo. Este tipo de testamentos se produce cuando, por la circunstancia que sea, un notario no puede estar presente cuando el testador expresa sus voluntades.

Para que ese documento tenga validez, debe estar escrito a mano y firmado por el testador ante dos testigos mayores de edad. Además, debe aparecer la fecha en la que se realiza. Finalmente, el testador entrega este testamento a una persona de confianza que deberá custodiarlo hasta que fallezca.

Tras la muerte del testador, la persona encargada del testamento ológrafo debe presentarlo ante notario en un plazo de 10 días, iniciándose así una serie de trámites para cumplir con lo expresado por la persona -en este caso, por Aless Lequio- en el manuscrito.

Lo cierto es que, de existir realmente ese testamento, sólo podía haberse solicitado su invalidación en los 15 días siguientes a la muerte del joven y por alguno de los siguientes motivos: reparto de la herencia legítima no ajustado a la ley, defecto de forma, incapacidad del testador para obrar en el momento en que se redactó el documento o intervención de coacción o amenazas para la redacción de ese documento.

Si realmente Aless dejó o no un testamento ológrafo antes de morir es algo que sólo su entorno más cercano puede saber, aunque por las declaraciones contradictorias de sus padres parece que este conflicto público está lejos de resolverse tras el inesperado nacimiento de Ana Sandra, la hija póstuma del joven.

Guardar