Un niño de cinco años y su familia se han convertido en centro de los ataques del independentismo catalán. La familia del pequeño, en el último año del ciclo de educación Infantil, pidió a los responsables del colegio donde está matriculado que a su hijo, tal y como ordena la ley, le dieran al menos el 25% de la clases en castellano. Desde que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) dictaminara a favor de la familia y dijera que desde hoy, 9 de diciembre, debían impartirse en el aula del pequeño clases en español, el acoso es incesante.
El viernes pasado, en la televisión autonómica catalana (TV3), padres de los compañeros de este niño llegaron a decir que al chico había que dejarlo solo en clase. Es decir, aislarlo. A través de redes sociales y de un grupo de WhatsApp creado ex profeso para tratar este caso, se han lanzado mensajes claros en este sentido: “Os informamos de que nuestra escuela ha sido denunciada por una familia de P5A y a raíz de ello el TSJC ha dictado que las horas lectivas en esta clase deben ser el 25% en castellano”, se ha escrito en estas redes. Por ello llegaron a amenazar, según fuentes consultadas por Infobae, con no llevar sus niños a clase con ese pequeño que quiere clases en español. De esta forma se evidenciaría quiénes eran el pequeño y su familia.
De hecho, algunos de los mensajes han sido denunciados ya ante la Fiscalía: “Me apunto a apedrear la casa de este niño”, escribió en Twitter Jaume Fàbrega, profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona. “No queremos supremacistas castellanos que nos odian”, añadió. También ha sido denunciado por la Asociación ‘Hablamos español’ el mosso d’Esquadra (policía autonómico) Albert Donaire, quien publicó el siguiente tuit: “Este niño se tiene que encontrar absolutamente solo en clase. En las horas que se hacen en castellano, los otros niños deberían salir de clase. Reaccionemos o nos matan la lengua”.
El caso tiene como escenario la escuela Turó del Drac, en la localidad barcelonesa de Canet del Mar. Este centro aboga por una inmersión lingüística absoluta, con una enseñanza 100% en catalán. Esto contraviene las normas del Estado. El pasado 23 de noviembre, el tribunal Supremo (TS) dictaminó, de hecho, que el 25% de la enseñanza en los centros públicos y concertados de Cataluña debe ser en castellano, lengua cooficial, junto al catalán, en esta Comunidad Autónoma. La Educación es competencia de las comunidades autónomas.
El de Canet de Mar es uno de más de los muchos casos que tiene registrada la Asamblea por una Escuela Bilingüe en Cataluña. Su presidenta, Ana Losada, ha explicado a Infobae que el proceso de inmersión lingüística se inició hace casi 30 años, y recuerda que todos los gobiernos han mirado para otro lado porque les interesaba negociar con los grupos nacionalistas. “Con [Pedro] Sánchez es peor porque ahora ERC [Esquerra Republicana de Cataluña] es más fuerte”. Desde septiembre han tramitado cinco casos como el de Canet, pero este ha surgido a la palestra por las amenazas y porque llega después de que el Supremo, en sentencia firme, obligue a dar el 25% del currículum en castellano.
De hecho, cada día llegan a la Asamblea más peticiones de familias que quieren que a sus hijos se les den clases en español. Ahora, indica Ana Losada, se atreven gracias al respaldo de la sentencia del Supremo.
Sin apoyo del Gobierno
Pero Losada va más allá. “El Gobierno de España, este y los anteriores, no han hecho lo que tenían que hacer” respecto a la política lingüística. Pone como ejemplo que “el 70% de ayuntamientos catalanes que convoca concursos literarios no acepta obras en castellano”. O, insiste, “que sólo dos de cada 10 libros adquiridos por bibliotecas públicas son en español”.
En Cataluña los niños de 0 a 6 años no reciben una sola hora de enseñanza en castellano, dice Losada. Los de 6 a 12, dos horas a la semana. En secundaria y bachillerato, tres horas semanales. Esto es menos de lo que se dedica a otras lenguas como el inglés, el francés, el alemán… “Nosotros somos la única asociación que presenta recursos por el bilingüismo”, señala. “De hecho, desde que se produjo la sentencia del Supremo y desde que se ha conocido este caso, hemos recibido más peticiones de familias que exigen que se dé clase en castellano a sus hijos”, añade.
El acoso al niño de Canet de Mar se sustanciará este viernes con una manifestación en contra de la enseñanza en castellano que arranca, precisamente, del centro donde estudia el menor. “Hemos pedido que la familia sea protegida, que la manifestación no arranque a las puertas del colegio, y menos a las 16.30 horas, que es cuando los niños salen de clase”, explica Losada a este medio. Sobre este punto, el consejero de Educación de Cataluña, Josep Gonzàlez-Cambray, ha manifestado: “Nosotros somos los de la democracia y, por tanto, que cada uno se exprese y manifieste en la línea que considere oportuna. Respetamos cualquier manifestación, como siempre hemos hecho”.
Desde que el caso se conoció, hace cinco días, la familia y la Asamblea, que es quien la representa, se ha sentido abandonada por los partidos políticos y, sobre todo, por el Gobierno central. “La reacción llega tarde. Llevamos solos desde el viernes pasado”, denuncia Losada, que afirma que son constantes los descalificativos en redes sociales: “colonos”, “castellanos”...
Ha sido hoy cuando los ministerios de Justicia e Interior, a través de sus titulares, Pilar Llop y Fernando Grande Marlaska, respectivamente, han dicho que se investigará el caso. “Toda amenaza o posible amenaza son un acontecimiento grave para la convivencia. Serán investigadas en su caso y tengamos confianza tanto en la investigación de las fuerzas de seguridad como del Poder Judicial”, ha dicho el titular de Interior. “No tenemos conocimiento exactamente. Hay que ver los expedientes y ver qué ha pasado primero, pero desde luego todo nuestro apoyo a la familia”, ha afirmado la ministra de Justicia.
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha concluido, por parte del Ejecutivo, que si bien desconoce los detalles “de las personas que fueron los demandantes y la cuestión del niño, en cualquier caso, de ser así, por supuesto, hay que reprobar cualquier acción de acoso, es intolerable, y esa sería la posición del Gobierno, pero desconozco los detalles”.
Desde la oposición, PP, Ciudadanos y Vox han pedido una reacción inmediata al Gobierno de Sánchez para que haga cumplir la ley y en todos los centros públicos y concertados de Cataluña se estudie un 25% del currículum en español.
El Gobierno de la Generalitat de Cataluña considera, por su lado, que la sentencia que apoya a la familia de Canet de Mar es un ataque a un sistema educativo “de éxito”. en una rueda de prensa a las puertas del colegio foco de la polémica, y negándose a responder en castellano, Josep Gonzàlez-Cambray ha señalado: “Nosotros [quienes abogan por una escuela en catalán] somos la convivencia. Nuestro modelo tiene éxito, mantiene la cohesión social y la igualdad de oportunidades. En Cataluña no hay ningún problema con el idioma y aunque repitan esa mentira mil veces no la convertirán en verdad”.