Incrementar la captura de CO2 en el suelo es una estrategia climática que, por un lado, podría reducir significativamente las emisiones de gases del efecto invernadero y, además, según un estudio de Global Research Alliance, evitaría riesgos para la seguridad alimentaria.
En la actualidad, en Argentina hay un solo proyecto de captura de dióxido de carbono por forestación, que en sus más de 10 años de existencia, logró que se plantaran más de 3 millones de árboles de 20 especies diferentes y así disminuir 500 mil toneladas de co2.
Esto equivale a lo emitido por 140 mil autos en promedio en un año
El proyecto Santo Domingo -liderado por la empresa Novartis en conjunto con GMF Latinoamericana- está dedicado a compensar las emisiones de carbono según el mecanismo de desarrollo limpio (MDL) del Protocolo de Kioto, desde su campo de plantación forestal, ubicado en Ituzaingó, provincia de Corrientes, Argentina.
El Protocolo de Kioto es un proyecto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, y un acuerdo internacional que tiene por objetivo reducir las emisiones de seis gases de efecto invernadero que causan calentamiento global
Capturar 600 mil toneladas de Co2 para el 2020
Con una inversión de 16 millones de dólares y en asociación con GMF Latinoamericana, Santo Domingo es único por su triple impacto económico, social y ambiental, ya que captura dióxido de carbono de la atmósfera, además de generar beneficios a largo plazo para las comunidades locales, como son la creación de empleo y la producción de madera de alto valor.
El proyecto tiene como objetivo capturar 600 mil toneladas de dióxido de carbono hacia 2020 y, cuatro mil millones de toneladas para 2040
Santo Domingo cuenta con 3.400 hectáreas, de las cuales 2.340 forman la plantación forestal, pensado para dar respuesta a la problemática del cambio climático, causado principalmente por la deforestación y la quema de combustibles fósiles.
Al mismo tiempo, reduce el impacto sobre el bosque nativo y cumple con los objetivos de desarrollo sostenible a los que adhirió la compañía en el
pacto Global de las Naciones Unidas.
Además, este proyecto de se desarrolla en un marco de manejo forestal responsable, que cuida toda la cadena de valor del bosque de reforestación, desde las especies plantadas, la fauna local -aves, anfibios, micromamíferos-, el agua y los pastizales, hasta el trabajo de los empleados y contratistas.
Este proyecto forestal es el eje principal de la política ambiental y de responsabilidad social del Grupo Novartis. Y es uno de los cuatro proyectos forestales sustentables de la empresa en el mundo, junto a los de Colombia, Mali y China.
Con proyectos de este tipo, la compañía resultó la segunda empresa más sostenible del mundo, según el Informe de Compromiso de Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG) 100 de la ONU.
El proyecto en números:
-Fueron plantados más de 3 millones y medio de árboles de 20 especies diferentes.
-Se disminuyeron 500 mil toneladas de dióxido de carbono, el equivalente a lo que emiten 14o mil autos en promedio en un año.
-El terreno tiene 3.400 hectáreas, con 2.340 de plantación forestal.
-Para 2020 se planean capturar 600 mil toneladas de dióxido de carbono
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