Hasta el siglo XIX la población del planeta era de unos 1000 millones de personas. En los últimos 200 años esa cantidad aumentó seis veces. Hoy se estima que la población mundial ronda los 7500 millones de personas.
Grandes poblaciones, nuevas metrópolis y un nuevo tipo de contaminación: la sonora.
La Organización Mundial de la Salud define como ruido cualquier sonido superior a 65 decibelios. Hoy, cualquier gran ciudad del mundo posee un sonido muy superior a ese límite y el transporte motorizado posee el 80% de la responsabilidad de este problema.
El asfaltado con pavimento fonoabsorbente, la instalación de pantallas sonoras o el soterramiento de las vías rápidas, son algunas de las soluciones que se plantean, pero la más efectiva y rápida solución es, sin duda, que cada uno desde su lugar evite emitir sonidos molestos.
Motores silenciosos
Los autos híbridos, con su tecnología superior y sus motores de última generación contribuyen a disminuir la contaminación sonora en las ciudades.
Esto se puede experimentar en autos como el Toyota Prius, que cuando utiliza solamente el motor eléctrico, se disfruta de un silencioso y placentero confort de marcha, y al hacer la transición del motor eléctrico al naftero, mantiene las vibraciones y sonidos a un mínimo prácticamente imperceptible.
Como sociedad, con las próximas generaciones, existe la gran responsabilidad de garantizar ciudades con una mejor calidad de vida medioambiental, y los autos híbridos juegan un papel fundamental en la construcción de ese futuro mejor.