La directora neerlandesa Halina Reijn reveló que una de las escenas más comentadas de su reciente película, el thriller erótico Babygirl, está inspirada en un episodio de su vida.
En una entrevista con W Magazine, Reijn, quien también escribió y produjo el filme, explicó que el momento en el que el personaje de Nicole Kidman, Romy, recibe un vaso de leche de su joven pasante Samuel, interpretado por Harris Dickinson, se basa en un hecho real que vivió cuando tenía 30 años.
Según Reijn, el incidente ocurrió en un bar cuando un actor “mucho más joven” le envió un vaso de leche.
“Lo bebí, y él simplemente se fue”, relató. “Pensé: ‘¿De dónde saca este chico el valor?’. Fue algo muy sensual y, al mismo tiempo, muy divertido”.
En la película, esta escena simboliza la tensión sexual y el inicio de una relación prohibida entre los personajes principales, enmarcada en un ambiente de poder corporativo y deseo reprimido.
Halina Reijn, de 49 años, compartió detalles sobre el enfoque detrás de las escenas íntimas en Babygirl. La directora contrató un coordinador de intimidad para coreografiar las secuencias entre Kidman, de 57 años, y Dickinson, de 28.
Según detalló al citado medio, este rol es crucial para garantizar la seguridad emocional de los actores y lograr una representación auténtica en pantalla.
“No se puede hacer una pelea sin un coordinador de acrobacias; con las escenas de sexo ocurre lo mismo. Es útil tener a alguien que conozca los trucos necesarios y haga que todos se sientan cómodos”, afirmó.
Las escenas íntimas, dijo, fueron diseñadas para ser “calientes, apasionadas y divertidas”, pero también fieles a la realidad. “La sexualidad es intermitente, no como las escenas glamorosas de las películas de los años 90. Eso no es cómo funciona”.
La diferencia de edad en “Babygirl”
La relación entre los personajes de Nicole Kidman y Harris Dickinson ha generado críticas por la marcada diferencia de edad entre ambos, algo que la directora abordó en varias entrevistas.
“Si vemos una película donde el actor masculino tiene la misma edad que la actriz femenina, nos parece extraño, lo cual es una locura. Deberíamos normalizar las diferencias de edad en ambas direcciones y aceptar que las mujeres pueden tener relaciones diversas”, expresó Reijn.
La actriz protagonista compartió una perspectiva similar. En una entrevista con The Hollywood Reporter, Kidman manifestó que “muchas veces las mujeres son descartadas como seres sexuales en cierta etapa de sus carreras”.
Por eso, consideró significativo interpretar a Romy, una ejecutiva con un aparente control total sobre su vida profesional, pero que atraviesa dudas sobre sus deseos y su identidad personal.
“Es un personaje que parece tenerlo todo, pero está en un lugar donde no sabe lo que quiere o quién es. Eso es algo muy identificable”, señaló la ganadora del Oscar.
La directora de Babygirl también destacó que este proyecto es su respuesta a las películas eróticas que dominaron las décadas pasadas, como Bajos instintos y 9 Semanas y Media.
Inspirada por esos títulos, buscó modernizar el género, reflejando los cambios en la percepción de la sexualidad femenina y las dinámicas de poder.
“Quería que el público conectara con Romy. Ya no estamos atrapadas en una caja. Necesitamos liberarnos del patriarcado y las normas impuestas sobre cómo comportarnos”, expresó.
La cineasta Halina Reijn también mencionó que su propia lucha con las normas sociales relacionadas con el sexo influyó en la narrativa de la película.
“Estados Unidos sirve como una metáfora de mis propios conflictos. Tiene una relación reprimida con el sexo, algo con lo que me identifico profundamente”, sostuvo la realizadora originaria de Ámsterdam.
Babygirl se verá en la cartelera de países de América Latina a partir del 2 de enero de 2025.