La actriz Ashley Tisdale, de 39 años, compartió una mirada íntima y reveladora sobre su batalla contra la alopecia areata y su experiencia como madre de dos niñas.
En una entrevista exclusiva con la revista People, la ex estrella de Disney expuso los desafíos personales y profesionales que ha enfrentado en los últimos años.
En una confesión profundamente personal, Tisdale describió su diagnóstico de alopecia areata, que ocurrió a mediados de sus 20, cuando descubrió una zona calva en su línea de cabello durante una visita rutinaria a su colorista.
“La parte más difícil de la alopecia areata es que realmente no tiene cura. Es una enfermedad autoinmune que te diagnostican y te quedas pensando: ‘¿Qué hago ahora?’”, señaló con franqueza.
La artista explicó que sus brotes suelen estar estrechamente relacionados con niveles elevados de estrés físico y emocional.
“Si veo una zona calva, me digo a mí misma: ‘Necesito calmarme... porque obviamente estoy demasiado estresada’”, manifestó.
Ashley Tisdale indicó que experimenta brotes cada par de años, generalmente en zonas que puede ocultar estratégicamente.
Como parte de su proceso de adaptación y autocuidado, modificó su rutina capilar :“Solía jugar mucho con los colores y teñir mi cabello, blanquearlo. Realmente no he sido rubia brillante desde entonces”.
Adicionalmente, Tisdale abandonó el uso de extensiones y comenzó a tratar su cabello con mayor delicadeza y consideración.
En el marco de su asociación con Pfizer y Litfulo, un medicamento aprobado por la FDA para personas mayores de 12 años con alopecia areata severa, la actriz busca educar y concientizar sobre las opciones de tratamiento disponibles.
“Es bueno saber que hay un tratamiento y opciones, porque cuando me diagnosticaron, no conocía ninguna”, expresó, destacando la importancia de la información y el apoyo para quienes enfrentan esta condición.
Paralelamente, Ashley Tisdale compartió su profunda felicidad por la maternidad. Madre de Jupiter Iris, de 3 años, y Emerson Clover, de 3 meses, afirmó: “Definitivamente lo amo. Es obviamente mi cosa favorita y ha cambiado mi vida de muchas maneras”.
La estrella de cine y televisión reveló que inicialmente dudaba en tener otro hijo después de una primera experiencia de embarazo físicamente desafiante.
Sin embargo, al observar lo sociable que era Jupiter y su interacción con otros niños, ella y su esposo Christopher French decidieron darle una hermana, ampliando su núcleo familiar.
Ashley Tisdale y la fama que comenzó en Disney
Ashley Tisdale, nacida el 2 de julio de 1985 en Monmouth County, Nueva Jersey, inició su carrera artística a temprana edad participando en más de 100 anuncios publicitarios y producciones teatrales emblemáticas como Los Miserables y Annie, demostrando desde muy joven su talento interpretativo.
Llegó a Disney con el papel de Maddie Fitzpatrick en la serie Zack y Cody: Gemelos en acción, estrenada en 2005. Tisdale se convirtió en un personaje recurrente y su actuación contribuyó al éxito del programa, que se emitió durante tres temporadas y generó un spin-off titulado Zack y Cody: Gemelos a bordo.
Su salto definitivo a la fama internacional llegó con su icónico papel como Sharpay Evans en la franquicia High School Musical, estrenada en 2006, que no solo catapultó su carrera actoral sino que la convirtió en un ícono de la cultura juvenil.
Complementó su carrera actoral con la música, lanzando su álbum debut Headstrong en 2007, que alcanzó el impresionante puesto número 5 en la lista Billboard 200.
Como actriz de voz, demostró su versatilidad prestando su talento al personaje Candace Flynn en la serie animada Phineas y Ferb, consolidando su presencia en múltiples plataformas de entretenimiento.
En 2008, fundó su propia productora Blondie Girl Productions, incursionando estratégicamente en la producción ejecutiva de diversos proyectos televisivos y cinematográficos.
A lo largo de su trayectoria, Ashley Tisdale ha explorado diversos géneros, desde comedias románticas hasta series dramáticas.