En una entrevista reciente con la BBC como parte del especial 100 Women, la actriz Sharon Stone rompió en lágrimas al reflexionar sobre su vida y los retos que ha superado, especialmente tras una hemorragia cerebral que casi le costó la vida en 2001.
Durante la emotiva conversación, Stone, de 66 años, compartió el mensaje que le gustaría darle a su yo más joven: “Vas a lograrlo”.
La figura de Hollywood no pudo evitar las lágrimas al pensar en el significado de esas palabras para sus vivencias personales. La frase encapsula la resiliencia que necesitaba en sus momentos más oscuros.
“No lo sabes, pero vas a lograrlo”, continuó con la voz quebrada. “Me lo tatuaría en el interior de los párpados”.
Stone, conocida por su protagónico en Bajos instintos (1992), resaltó que a lo largo de su vida deseó escuchar esas palabras en muchas ocasiones, especialmente durante una crisis de salud aterradora hace 23 años.
Una emergencia médica devastadora
En 2001, Sharon Stone fue hospitalizada de urgencia tras un derrame cerebral que le causó una hemorragia cerebral prolongada durante nueve días.
Según relató a Vogue en una entrevista previa, su condición era muy grave: “Mi arteria vertebral estaba rota, mi piscina subaracnoidea estaba llena de sangre, y sufrí un derrame que paralizó el lado derecho de mi rostro. No podía levantar mi pie izquierdo. Además, tartamudeaba mucho”.
La actriz además contó que los médicos inicialmente subestimaron su estado. “Decidieron que estaba fingiendo”, comentó. Fue gracias a la insistencia de su mejor amiga que le realizaron una segunda angiografía, descubriendo entonces el alcance real de su hemorragia. A Stone se le dio solo un 1% de probabilidades de sobrevivir.
El proceso de recuperación fue largo y arduo, y la artista tuvo que reaprender habilidades básicas como caminar y hablar. Su vida cotidiana también se transformó: sus sentidos cambiaron, desarrolló nuevas alergias alimenticias y comenzó a sufrir de convulsiones si no dormía al menos ocho horas por noche.
Más crisis
Lamentablemente, el impacto de la hemorragia cerebral trascendió lo físico. Stone enfrentó graves problemas financieros y emocionales tras su enfermedad.
Luego de siete años de difícil recuperación, se dio con la sorpresa de que había perdido los USD 18 millones que tenía ahorrado fruto de su éxito cinematográfico. “Cuando volví a mi cuenta bancaria, todo se había ido”, relató en julio a The Hollywood Reporter. Durante ese tiempo, su teléfono, su refrigerador e incluso su hogar habían sido registrados a nombre de otras personas.
Además, le tocó enfrentar una batalla legal por la custodia de su hijo adoptivo, Roan, con su ex esposo Phil Bronstein.
La actriz explicó que hace mucho que no había pensado en todo lo que había sobrevivido. “Ha pasado tanto, y está bien. Se acabó. Todos llegamos a puerto”, afirmó.
La historia de Sharon Stone fue destacada en el especial 100 Women de la BBC, que cada año honra a mujeres influyentes e inspiradoras en todo el mundo. La actriz expresó orgullo por haber superado estos retos y afirmó que ahora vive para encontrar alegría y propósito en su vida.
Stone también usó la fama que adquirió tras Bajos instintos para defender causas filantrópicas, especialmente en la lucha contra el VIH/SIDA.
“Estoy muy orgullosa de haber tomado esta idea creada en esta película —que yo era muy sexy— y usarla para combatir una enfermedad y un contexto en el que las personas estaban siendo castigadas por su sexualidad, porque yo estaba siendo castigada por la mía”, declaró.
Por su trabajo, recibió el Premio de la Cumbre de la Paz en 2013, otorgado por laureados de la fundación del Nobel, que reconoce a figuras del entretenimiento que logran impacto social.
Hoy en día, Stone ha encontrado una nueva pasión en la pintura, un pasatiempo que comenzó a explorar en la pandemia.