La actriz Nicole Eggert, reconocida mundialmente por su papel en Baywatch, reveló públicamente los desafíos más íntimos de su batalla contra el cáncer de mama.
Eggert, de 52 años, recibió el diagnóstico de carcinoma cribriform de estadio 2 en diciembre de 2023, marcando el inicio de un complejo proceso de tratamiento y recuperación.
En un video emotivo compartido en Instagram el pasado 20 de noviembre, la retirada estrella televisiva mostró su vulnerabilidad al hablar sobre su experiencia reciente con el proceso de radiación.
Durante una sesión de mapeo para su tratamiento oncológico, se sorprendió al descubrir que le realizarían tatuajes reales para guiar con precisión la radiación.
“Cuando dijeron que me iban a tatuar, no me di cuenta de que eran tatuajes reales”, explicó en su mensaje, su voz quebrantándose por la emoción y la intensidad del momento.
La intérprete de Summer Quinn en Baywatch describió estos pequeños tatuajes como “puntos” técnicamente estratégicos que servirán para mapear la radiación y minimizar el daño potencial a los órganos vitales.
Sin embargo, manifestó que cada paso del proceso le recuerda constantemente su condición médica y los desafíos que enfrenta.
Por otro lado, su preocupación trasciende los aspectos físicos del tratamiento. Nicole Eggert compartió un temor profundamente personal basado en la experiencia de su padre, quien recibió radiación cerebral y “no fue el mismo después del primer tratamiento”.
“Cuando estaba en tratamiento, sentía que hacía algo productivo”, manifestó, destacando la importancia de sentirse activa durante el proceso médico.
La actriz, quien previamente había destacado en series como Charles in Charge, ha sido completamente transparente sobre su proceso de recuperación.
Incluso compartió un video de sí misma rapándose el cabello tras el diagnóstico, un momento de gran carga emocional que simboliza su enfrentamiento directo con la enfermedad.
Además, Nicole Eggert ha sido pública sobre lo que considera una posible causa de su cáncer: los implantes mamarios que se realizó a los 18 años para su papel en Baywatch.
A pesar de los desafíos médicos y emocionales, mantiene una actitud esperanzadora que refleja una fortaleza extraordinaria. En su video, concluyó: “El resto va a tener que ser yo trabajando en mí misma y cómo voy a superarlo”.
En agosto, durante la premiere del documental After Baywatch: Moment in the Sun, Eggert proporcionó una actualización sobre su estado de salud. Describió su situación actual como un “área gris”, explicando la incertidumbre inherente al proceso de tratamiento oncológico.
El evento reunió a varios de sus ex compañeros de Baywatch, incluyendo a Carmen Electra, Alexandra Paul, Jeremy Jackson, David Chokachi y otros, quienes la apoyaron durante la premiere del documental.
Es significativo mencionar que Pamela Anderson y David Hasselhoff no estuvieron presentes ni participaron en el proyecto de Hulu.
Los secretos revelados en “After Baywatch”
El documental After Baywatch: Moment in the Sun, disponible en Hulu, revela los entresijos de la popular serie Baywatch, que reunió 1,2 mil millones de espectadores semanales durante 12 años.
La producción, dirigida por Matt Felker y protagonizada por Nicole Eggert, reúne testimonios de más de 35 miembros del elenco original que exponen las sombras detrás del éxito televisivo.
Entre las revelaciones más impactantes, Jeremy Jackson confesó su adicción a las metanfetaminas durante su adolescencia como actor, mientras que Pamela Anderson describió la presión mediática que experimentó siendo considerada un ícono sexual de los años 90.
La producción también destaca problemas estructurales de la serie. Gregory Alan Williams, único actor afroamericano del elenco, denunció discriminación racial, siendo relegado sistemáticamente a papeles cómicos.
Asimismo, actrices como Carmen Electra revelaron presiones constantes sobre su imagen corporal, con supuestas cláusulas contractuales que restringían cambios de peso.
Jaason Simmons compartió su experiencia personal sobre el estigma de la homosexualidad en la industria, llegando incluso a fingir una relación con su compañera Alexandra Paul para proteger su imagen profesional.
Los actores también expusieron disparidades económicas significativas. Mientras series contemporáneas como Friends pagaban un millón de dólares por episodio, los protagonistas de Baywatch recibían aproximadamente 3,500 dólares.
La serie, originalmente cancelada por NBC, fue rescatada por David Hasselhoff, quien invirtió personalmente para mantenerla en antena.