La actriz británica Florence Pugh, conocida por su participación en películas como Oppenheimer y la más reciente El tiempo que tenemos, reveló recientemente que decidió congelar sus óvulos a los 27 años tras ser diagnosticada con síndrome de ovario poliquístico (PCOS) y endometriosis. Ambas condiciones, que pueden afectar la fertilidad, llevaron a la intérprete a tomar medidas preventivas para preservar su capacidad de tener hijos en el futuro.
En una entrevista en el podcast SHE MD de Dear Media, conducido por la doctora Thaïs Aliabadi (también conocida como “Dr. A”) y la influencer Mary Alice Haney, Pugh compartió cómo llegó a la decisión: “Tuve este sentimiento repentino de que debía revisarme. Había tenido algunos sueños extraños, creo que mi cuerpo me estaba avisando”.
La actriz explicó que durante su visita, la doctora Aliabadi le preguntó si alguna vez se había realizado un conteo de óvulos. “Yo respondí: ‘No, ¿qué significa eso? Soy muy joven, ¿por qué necesitaría un conteo de óvulos?’”, relató Pugh. Después de los estudios, fue diagnosticada con ambas condiciones, lo que llevó a su médico a recomendarle congelar sus óvulos lo antes posible.
“Fue muy extraño porque mi familia siempre ha sido muy fértil. Mi madre tuvo hijos en sus cuarentas, mi abuela tuvo hijos durante años. Y luego, por supuesto, recibí información completamente distinta: que a los 27 años necesitaba extraer mis óvulos rápido. Fue una realización impactante, pero estoy realmente agradecida de haberlo descubierto cuando lo hice porque he querido tener hijos desde que era niña”, afirmó.
El síndrome de ovario poliquístico (PCOS, por sus siglas en inglés) es una de las principales causas de infertilidad en mujeres, según la organización PCOS Awareness Month. Esta condición genética, hormonal y metabólica puede causar períodos irregulares, acné, infertilidad, aumento de peso y crecimiento excesivo de vello.
Por su parte, la Clínica Cleveland explica que la endometriosis ocurre cuando tejido similar al que recubre el útero crece en otras áreas del cuerpo, provocando dolor pélvico, menstruaciones abundantes y problemas de fertilidad.
Pugh reconoció que tenía algunos síntomas de estas condiciones, como acné y crecimiento de vello en lugares inusuales, pero asumió que eran “parte de ser mujer” o consecuencia de “un estilo de vida quizás algo estresante”. También mencionó haber experimentado fluctuaciones constantes de peso, algo que no relacionó inicialmente con el PCOS.
La nominada al Oscar hizo hincapié en la importancia de hablar sobre estos temas para educar a las jóvenes sobre su salud reproductiva. “Si tienes el sueño de ser madre algún día, estas cosas son muy importantes, al igual que aprender a detectar bultos en el pecho. No sería tan difícil educar a todos sobre esto cuando estás en la escuela”, señaló.
Florence también destacó la necesidad de ser proactiva frente a estas condiciones: “Te das cuenta de que tienes que cambiar tu estilo de vida, ser proactiva y pensar en el futuro. Creo que muchas mujeres jóvenes no están necesariamente pensando en eso en sus veintes”.
La actriz subrayó que conocer esta información a tiempo le permitió tomar decisiones para proteger su futuro como madre, y animó a otras mujeres a priorizar su salud reproductiva. “No pensé que el PCOS fuera tan común. Pensé que era algo que sentirías o sabrías que tenías y que no era realmente una preocupación, pero cuando lo descubres, cambia tu perspectiva”, concluyó.
Con esta reflexión, la intérprete reafirmó su compromiso de crear conciencia sobre las condiciones que afectan la fertilidad y fomentar conversaciones abiertas sobre la salud femenina. Mientras tanto, Florence sigue expandiendo su carrera cinematográfica y en su agenda sigue el estreno de Thunderbolts el próximo 2 de mayo de 2025, donde retomará su papel como Yelena Belova.