John Lennon, una de las figuras más famosas del siglo XX gracias a su paso por The Beatles y su carrera en solitario, fue asesinado el 8 de diciembre de 1980 en Nueva York a manos de Mark David Chapman. Según un nuevo libro, Yoko Ono, su esposa, había sido advertida sobre el peligro que corría Lennon antes de su muerte. El libro, titulado We All Shine On: John, Yoko and Me, fue escrito por Elliot Mintz, amigo y ex portavoz de la pareja.
En el libro, Mintz relata una conversación con Ono en la que le pidió que participara en una entrevista radial para contrarrestar la desinformación sobre Lennon. Ono respondió que consultaría con sus “asesores”, refiriéndose a tarotistas y numerólogos en los que confiaba.
Mintz cuestionó la eficacia de estos asesores, preguntando por qué no habían previsto el trágico destino de Lennon. Ono afirmó que sí había recibido advertencias sobre el peligro que corría su esposo en Nueva York.
“Me dijeron que estaba en peligro en Nueva York y que había que sacarlo inmediatamente. Por eso le envié a las Bermudas durante el verano. ... Pero no podía mantenerlo alejado para siempre. Tenía que volver en algún momento”, declaró Yoko.
Según ella, Lennon tenía una actitud despreocupada respecto a su seguridad personal, recordando una conversación en la que él expresó que si alguien quería hacerle daño, lo haría sin importar las precauciones.
“Ya sabes lo que sentía John por su propia seguridad. Hablamos de ello en la mesa de nuestra cocina cuando mataron a su amigo [el actor Sal Mineo]. John dijo: ‘Si van a por ti, van a por ti’. No importaba lo que mis asesores me dijeran. No creía en los guardaespaldas, no los soportaba. Quería ser libre”.
Cabe recordar que Sal Mineo fue asesinado por una puñalada en el corazón en 1976 por Lionel Ray Williams en lo que se presumió, fue un crimen pasional. Williams ya tenía historial delictivo y fue condenado a 57 años de prisión. Fue liberado mucho antes de pagar su condena, pero rápidamente volvió tras las rejas por nuevos actos delictivos.
Mark David Chapman continúa pagando una condena en la Correccional de Attica por disparar a quemarropa al ex-beatle. El juez había determinado que su condena fuera de 20 años. No obstante, cuando este periodo de tiempo se cumplió, el jurado determinó que no era apto para la libertad condicional, situación que se repitió un total de 13 ocasiones.
En una de las veces que Mark pidió su libertad, Yoko mandó una carta exigiendo que este se quedara en prisión, pues nunca podría volver a sentirse segura si Chapman abandonaba Attica.
“Temo que vuelva la pesadilla, el caos y la confusión una vez más. Los dos hijos de John y yo no nos sentiríamos seguros el resto de nuestras vidas”, se leía en la carta.
En 2020, Chapman reflexionó sobre las razones que lo orillaron a asesinar a John Lennon, además de pedirle perdón a Yoko Ono por el dolor que le causó en aquella fatídica noche de 1980.
“Era muy, muy, muy famoso, y esa es la única razón por la que yo estaba buscando mucho, mucho, mucho, la gloria para mí. Fui muy egoísta. Quiero añadir eso, y enfatizarlo profundamente. Fue un acto extremadamente egoísta. Lo siento mucho por el dolor que le causé a ella. Pienso en ella constantemente”