Tras la trágica e inesperada muerte de Liam Payne, The X Factor, el programa que lo vio convertirse en estrella, le rindió homenaje a través de su cuenta oficial en X (antes Twitter). El mensaje destacó su talento y legado en la industria musical, subrayando el impacto que tuvo como parte de One Direction.
“Nuestros pensamientos están con su familia, amigos y todos aquellos que lo amaron”, expresó el comunicado, generando una oleada de condolencias de seguidores que lamentaron la pérdida del artista.
Su trayecto en el programa
El paso de Liam Payne por The X Factor marcó no solo el comienzo de su carrera musical, sino también el nacimiento de una de las bandas más icónicas de la última década: One Direction. Este reality británico se ha convertido en la plataforma que catapulta a figuras a la fama, y el cantante es prueba de ello, aunque su camino no fue tan facil ni inmediato.
En 2008, con tan solo 14 años, Liam se presentó por primera vez en el show. Su audición impactó a los jueces, pero Simon Cowell, conocido por sus críticas duras, fue claro: “Aún no estás listo para esta industria”. La decisión fue dejarlo fuera, pero no sin antes aconsejarle que volviera más adelante. Esa primera negativa no apagó su ambición, sino que lo impulsó a prepararse mejor para regresar dos años después.
En 2010, Payne volvió al escenario del concurso, esta vez con 16 años y una versión madura de “Cry Me a River”, que sorprendió a todos, incluyendo a Cowell. Sin embargo, la competencia era feroz, y aunque su talento era evidente, no logró avanzar como solista. Fue entonces cuando ocurrió un giro inesperado: los jueces decidieron unirlo con otros cuatro jóvenes rechazados de la categoría individual. Así nació One Direction, junto a Harry Styles, Zayn Malik, Niall Horan y Louis Tomlinson.
La banda no ganó The X Factor, quedaron en tercer lugar, pero su paso por el programa fue suficiente para ganar una legión de seguidores y llamar la atención de la industria musical. Poco después, firmaron contrato con la discográfica de Cowell y lanzaron su primer sencillo, “What Makes You Beautiful”, que se convirtió en un éxito inmediato.
La banda rápidamente se convirtió en una sensación global. Con cinco álbumes de estudio, cuatro giras mundiales, una película y hasta un memorable videoclip para el Red Nose Day en 2013, donde aparecieron bailando frente al 10 de Downing Street junto al entonces primer ministro británico, David Cameron, One Direction consolidó su lugar en la industria musical. En seis años, vendieron más de 20 millones de discos y marcaron una generación.
Sin embargo, no todo fue éxito continuo. En 2015, Zayn Malik decidió abandonar el grupo para iniciar su carrera en solitario, y apenas un año después, la banda anunció que se tomaría un receso indefinido.
Su relación con Cheryl
Payne conoció a Cheryl Tweedy en un contexto inusual: durante su primera audición en The X Factor en 2008, cuando él tenía apenas 14 años y ella, ya una estrella del pop británico como miembro de Girls Aloud, formaba parte del jurado. Años más tarde, sus caminos volvieron a cruzarse, pero esta vez en una historia que trascendió la música y se convirtió en un romance que capturó la atención de los medios británicos.
La relación entre Liam y Cheryl comenzó oficialmente en 2016, luego de que ambos atravesaran momentos personales difíciles: Payne lidiaba con la disolución de One Direction y Cheryl acababa de separarse de su segundo esposo, el empresario Jean-Bernard Fernandez-Versini. A pesar de la diferencia de edad, ella es diez años mayor, la pareja sorprendió con su química y compartieron momentos importantes bajo el escrutinio público. En marzo de 2017, dieron la bienvenida a su hijo, Bear Grey Payne, consolidando su vínculo familiar.
Sin embargo, mantener una relación en medio de la fama no fue sencillo. En 2018, la pareja anunció su separación amistosa, aunque subrayaron que seguirían unidos por el bienestar de Bear. Payne ha reconocido en entrevistas que, aunque la ruptura fue difícil, él y Cheryl mantienen una relación cordial y enfocada en la crianza compartida.