La actriz Jenna Fischer, quien encarnó a Pam Beesly en la exitosa serie The Office, reveló recientemente que ha superado una dura batalla contra el cáncer de mama. En un emotivo post de Instagram publicado este martes 8 de octubre, Fischer, de 50 años, compartió con sus seguidores la noticia de su diagnóstico y recuperación en el marco del Mes de la concientización sobre el cáncer de mama.
Según explicó en su testimonio, ella fue diagnosticada en diciembre de 2023 con un cáncer de mama en etapa 1, triple positivo, que es considerada una forma agresiva de la enfermedad, aunque altamente receptiva a los tratamientos.
El diagnóstico llegó después de que los resultados de su mamografía rutinaria en octubre fueran inconclusos debido a tejido denso, lo que llevó a su médico a ordenar una ecografía mamaria. “Encontraron algo en mi seno izquierdo. Se ordenó una biopsia”, explicó la actriz, quien ha utilizado su experiencia para enfatizar la importancia de los controles médicos regulares. “Si hubiera esperado seis meses más, las cosas podrían haber sido mucho peores. Podría haberse extendido”, añadió.
Afortunadamente, el cáncer fue detectado en una etapa temprana, lo que permitió a los médicos intervenir rápidamente. Fischer fue sometida a una lumpectomía en enero de 2024 para extirpar el tumor que no se había propagado. Sin embargo, debido a la naturaleza agresiva de su cáncer, los médicos recomendaron un tratamiento complementario para asegurar que no regresara. “Comencé la quimioterapia en febrero, un plan semanal que duró 12 rondas, seguido de tres semanas de radiación en junio”, detalló Fischer.
En ese periodo, la actriz sufrió la pérdida de su cabello, un efecto secundario común de la quimioterapia. Para mantener su privacidad, Fischer optó por usar pelucas y sombreros con cabello, que su familia cariñosamente llamaba “wigats” (una combinación de las palabras wig y hat).
“Gracias a algunas pelucas y sombreros con cabello estupendos, pude esperar hasta ahora para revelar todo lo que ha estado sucediendo conmigo”, comentó en su publicación.
Aunque decidió pasar todo el tratamiento de su enfermedad en privado, Jenna consideró que este era el momento ideal para revelar su experiencia y así instar a otras mujeres a realizarse chequeos médicos regulares.
“Estoy haciendo este anuncio por dos razones”, explicó. “Una, estoy lista para deshacerme de las pelucas. Dos, para implorarles que se hagan sus mamografías anuales. Pueden pedirle a su médico que calcule su puntaje de riesgo de cáncer de mama y que les realicen los exámenes adicionales necesarios. Les hablo en serio, llamen a sus médicos ahora mismo”.
La artista además expresó su gratitud a quienes la apoyaron en su lucha contra la enfermedad, ya que contar con una red de apoyo cercana fue vital para mantenerse optimista.
“Mi esposo, Lee Kirk, estuvo a mi lado en todas las cirugías, tratamientos de quimioterapia, citas, búsquedas interminables en Google y llantos nocturnos. Sabía que él era un buen partido cuando me casé con él. Tenía razón”, declaró Fischer.
Además, agradeció a Angela Kinsey, su compañera de reparto en The Office y colaboradora en el podcast Office Ladies, por los gestos de empatía que tenía con ella. “Cuando perdí mi cabello, ella usaba sombreros en nuestras reuniones de trabajo para que yo no fuera la única”, recordó Fischer.
Finalmente, la querida ‘Pam’ compartió la buena noticia de que, tras someterse a nuevas pruebas, los resultados confirmaron que está libre de cáncer. Sin embargo, continuará recibiendo tratamiento y seguimiento para asegurarse de que la enfermedad no regrese.
Con un mensaje de esperanza y gratitud, Fischer concluyó su post alentando a otras mujeres a no descuidar su salud y a apoyarse en sus seres queridos. “Si reciben un diagnóstico de cáncer de mama, sepan que hay toda una aldea esperando para cuidarlas”, afirmó.