Katy Perry ha compartido de forma abierta y sin tapujos detalles íntimos de la rutina diaria en su relación con Orlando Bloom, algo que nuevamente la ha colocado en el centro de la atención mediática. En una reciente entrevista en el podcast Call Her Daddy, la cantante comentó cómo recompensa sexualmente a su prometido cuando él realiza las tareas del hogar.
Perry, de 39 años, lleva ocho años junto al actor conocido por su papel en El Señor de los Anillos, quien tiene 47 años. Durante su charla con Alex Cooper, la anfitriona del programa, la estrella no temió hablar sobre su “lenguaje del amor” y reveló que pone en ejercicio una específica práctica sexual cada vez que Bloom lava los platos.
“Si bajo y la cocina está limpia, y has hecho todo, y lavaste todos los platos y cerraste todas las puertas de la despensa, será mejor que estés listo para que te chupen el pene”, comentó de manera explícita Perry, afirmando que ese es su modo de mostrar afecto hacia su pareja cuando le ayuda en los quehaceres básicos del hogar.
“Es que literalmente, ese es mi lenguaje del amor”, recalcó la estrella. “¡No necesito un Ferrari rojo! Puedo comprarme un Ferrari rojo. ¡Solo lava los jodidos platos, te chuparé el pene! Es así de fácil”, añadió la cantante de “Firework”, que este año lanzará su nuevo álbum “143″.
El tema de la comunicación afectiva no solo incluye recompensas después de tareas hogareñas, sino también una visión del tipo de hombre que ahora la atrae. Perry afirmó: “Ya no me atraen los narcisistas”, respondiendo a las preguntas de Cooper sobre las señales de alerta que ahora evita en una relación.
El relato se amplió cuando Perry explicó su estricta educación religiosa. Sus padres, Mary Christine Perry y Maurice Keith Hudson, son pastores pentecostales. “Ni siquiera me permitían reconocer a alguien del sexo opuesto”, confesó Perry, describiendo un ambiente donde incluso el uso de tampones le estaba prohibido, lo que la llevó a utilizar compresas en el equipo de natación con resultados incómodos.
Analizando el contexto de su pareja, se pueden observar las declaraciones de Bloom sobre su relación y vida sexual. En una entrevista con The Guardian, cuando su hija Daisy Dove era un bebé, admitió que no tenían relaciones sexuales con la frecuencia deseada, aunque luego comentó: “Acabamos de tener un bebé, sin embargo”.
La relación entre Bloom y Perry, que se comprometieron en 2019 y tuvieron a su hija en 2020, también es notable por cómo ambos han manejado sus carreras. Orlando reflexionó en el podcast What Now? With Trevor Noah sobre cómo se enamoró de Perry, describiendo que aunque su música estaba en todas partes, se enamoró de la mujer real: Katheryn Hudson, una chica de Santa Bárbara.
Este trasfondo compartido de experiencia de vida, según Bloom, ha ayudado a ambos a entender de dónde vienen y a evolucionar juntos como pareja, padres y como celebridades dedicadas al oficio de la actuación y la música.
Adicionalmente, la pareja se ha mostrado disfrutando de tiempo en familia en Nueva York, donde fueron vistos paseando con su hija. Perry vestía de manera casual con un top blanco, pantalones joggers negros y una gorra de béisbol, complementando con una riñonera de Chanel. Por otro lado, Bloom, con una camiseta blanca y gafas de sol, llevaba a Daisy sobre sus hombros.
Perry también hizo referencia a su carrera musical, con el lanzamiento de su séptimo álbum de estudio programado para septiembre, el cual incluirá los sencillos “Woman’s World” y “Lifetimes”. Sin embargo, estos no han tenido el desempeño esperado en las listas de popularidad, según Daily Mail.