La edición 81 del Festival Internacional de Cine de Venecia arrancó esta semana con un despliegue de estrellas y esperados largometrajes. Angelina Jolie, ícono de Hollywood, tuvo un exitoso regreso a la Mostra con su protagónico en Maria, el biopic sobre la legendaria cantante de ópera Maria Callas, dirigido por Pablo Larraín.
La película, que compite en la sección oficial del festival, fue recibida con una ovación de aproximadamente 10 minutos tras su proyección en la Sala Grande. Según informó Deadline, “el público estaba emocionado e incluso coreaba el nombre de Jolie”. La actriz, visiblemente conmovida, no pudo contener las lágrimas mientras saludaba desde la galería.
Este caluroso recibimiento no es inusual para las películas de Larraín en Venecia. Maria es el tercer retrato de una mujer famosa que el director chileno presenta en el festival, tras Jackie (2016) y Spencer (2021).
Durante la rueda de prensa previa al estreno, Angelina Jolie compartió los desafíos que enfrentó al interpretar a Maria Callas. “Nunca había cantado en público antes de Maria”, confesó la actriz.
Ella reveló que entrenó durante siete meses para el papel. “Estaba terriblemente nerviosa”, admitió.
Jolie también explicó en qué aspectos conectó con la historia de la famosa soprano. “Creo que la forma en que me identifiqué con ella fue, probablemente, la parte de ella que es extremadamente suave y no tiene ese espacio en el mundo para ser tan sensible como era, tan emocionalmente abierta como era de verdad. Comparto su vulnerabilidad más que cualquier otra cosa”, aseguró.
La gentileza de Jolie
Uno de los momentos más emotivos de la noche ocurrió antes de la proyección. Mientras recorría la alfombra roja, Jolie se detuvo para saludar a un fan muy especial: Pasqualino Esposito, un escritor italiano que sufre de osteogénesis imperfecta, una enfermedad genética conocida como “enfermedad de los huesos de cristal”.
Según el corresponsal de The Hollywood Reporter, Esposito es un asistente asiduo del festival y suele tener un espacio en la alfombra roja para saludar a las estrellas de Hollywood. Jolie se inclinó para poder conversar brevemente con él en un gesto que no pasó desapercibido para los fotógrafos y fanáticos en el lugar.
Después del encuentro, Esposito compartió sus impresiones con el medio estadounidense: “Es una persona con un corazón muy grande”, dijo con la ayuda de un traductor. “Es fantástica”.
Para su aparición en la premiere, Jolie deslumbró con un vestido beige sin tirantes de Tamara Ralph, complementado con una estola de piel y un llamativo labial rojo que contrastaba con el conjunto monocromático.
Voceada para los premios Óscar
Las primeras críticas de Maria han sido bastante mixtas, aunque predominan los elogios a la interpretación de la protagonista.
Stephanie Bunbury, de Deadline, escribió: “Jolie es una coincidencia casi mágica con la verdadera diva: dolorosamente delgada pero aún hermosa, altivamente patricia, caprichosamente amable o egoísta, caminando peligrosamente cerca de la locura. El compromiso de la actriz con esta creación es obvio en cada momento”.
Sin embargo, también añadió que al filme le hizo falta algún ingrediente para que alcance el mismo impacto que los biopics previos de Larraín.
Por otro lado, The Guardian le otorgó a la película cuatro estrellas, describiendo la actuación de Angelina como “magnífica”: “Jolie es un cuadro para ser contemplado en el opulento drama de Pablo Larraín, tambaleándose por París en los años 70 y atrayéndonos hacia la tragedia tan a fondo como Bellini o Puccini”.
No obstante, otras publicaciones no fueron tan benévolas con la actriz. Vulture describió el trabajo de Jolie como “lo más ambicioso que ha hecho en años”, aunque para el medio, “no le alcanzó para dar la sensación de un resurgimiento”. Mientras que el Times of London dijo que su “pálida imitación de una cantante de ópera” no llegó a convencer en el plano emocional.
A pesar de las críticas mixtas, la performance de Angelina Jolie ha recogido suficiente atención y aplausos en el festival, como para ser voceada como una seria contendiente en la carrera por el Oscar a Mejor Actriz. Asimismo, la reciente adquisición de los derechos de distribución en Estados Unidos de Maria por parte de Netflix podría impulsar una fuerte campaña de cara a los premios.
Una nominación marcaría la primera candidatura al Oscar para Jolie en más de 15 años. La actriz ha competido por una estatuilla dorada en dos oportunidades anteriores: ganó el premio a Mejor Actriz de Reparto en 2000 por Inocencia interrumpida y obtuvo una nominación a Mejor Actriz en 2009 por The Changeling: sombras de Nueva York.